S I E T E - Padre.

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H A J I M E.

– ¿Esos quiénes son?

– Los protagonistas.

– ¿Y qué están haciendo?

– Caminando.

– ¿Es de noche?

– Si.

– ¿A dónde van?

– Hajime ve la película – Musitó (T/N) tomando un puñado de palomitas. Ella estaba sentada en el sillón con sus hinchados pies sobre la pequeña mesita de noche.

El día estaba algo nublado, parecía que en cualquier momento llovería, un buen día para flojear y no hacer absolutamente nada, justamente eso habíamos planeado, (T/N) quería ver una maratón de algunas películas.

Por su evolución en el embarazo (T/N) permanecía más en el departamento que afuera, pues solo caminar algunas calles se cansaba, sus pies se hinchaban o se mareaba, igualmente sus contracciones eran cada vez más seguidas

– ¿Eso es un perro de tres cabezas? – Pregunté extrañado.

Y claro, por su encierro rotundo Ushijima se había vuelto fan de ciertas sagas, una de esas era la saga de "Harry Potter"... Ahora llevábamos la primera película y para ser honesto, no entendía nada.

Alrededor de mis ojos tenían un leve ardor, quizás producto del poco sueño, la universidad, el trabajo, ambos estaban acabando conmigo y mis ganas de dormir.

"Ahora, si no les importa me iré a la cama, antes de que se les ocurra otra idea para que nos maten a todos... O peor que nos expulsen" – Imitó con total certeza la voz de la pequeña niña en el televisor. Al ver mi expresión de extrañeza (T/N) sonrió, tomando otro puñado de palomitas.

– "Creo que tiene que ordenar sus prioridades".

– Te sabes la película de memoria ¿no?

Otra sonrisa, aunque realmente me daba risa verla imitar las voces, los gestos y las acciones de los personajes.

Mis ojos lentamente se fueron al tazón de comida el cual llevaba todas las palomitas, (T/N) había dejado el tazón de palomitas en su notoria barriga mientras sus pies so movían con ternura.

– Hajime ve la película... Mira esta parte es buena.

Haciendo caso omiso, subí mi mirada viendo su perfil o al menos lo que el tazón me dejaba ver, (T/N) sonrió en ese instante a una graciosa escena, sus ojos se cerraron levemente mientras que en sus labios se formaron unas líneas, era... Realmente hermosa.

– ¿Hajime? – Gracias a sus palabras salí de mi transe, aunque inevitablemente nuestros ojos se conectaron – ¿Qué pasa?

– Nada - -Hable al instante volviendo la mirada al frente.

Me pegué mentalmente por lo anterior... No podía seguir con estos sentimientos, menos cuando (T/N) esperaba un lindo bebé de mi mejor amigo. Crucé mis brazos por el pecho con enojo. Sabía que, tarde o temprano aquel par volverían a estar juntos.

Nuevamente mis pensamientos se vieron interrumpidos, esta vez por una suave y delicada palma en mi mejilla, su toque fue agradable al instante, generando un gran bombeo en mi corazón.

– Hajime creo que tienes fiebre.

– ¿Eh? – Nuevamente la miré – No, estoy bien... Solo, tengo algo de sueño.

– No lo creo – Musitó con gran preocupación – ¿Quieres ir a dormir? Puedo comprar medicamentos – Murmuró levantándose del sillón con cierta dificultad.

𝘗𝘦𝘲𝘶𝘦ñ𝘰 𝘋𝘪𝘷𝘢𝘬𝘢𝘸𝘢 - 𝘏𝘢𝘫𝘪𝘮𝘦 𝘐𝘸𝘢𝘪𝘻𝘶𝘮𝘪 | corrigiendoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora