𝘗𝘦𝘲𝘶𝘦ñ𝘰 𝘋𝘪𝘷𝘢𝘬𝘢𝘸𝘢 - 𝘏𝘢𝘫𝘪𝘮𝘦 𝘐𝘸𝘢𝘪𝘻𝘶𝘮𝘪 | corrigiendo

V E I N T I S I E T E - En poco tiempo.

James: 11 años

( T / N ).

- ¡Callate niño feo!

- ¿Eres una adulto y eso es lo mejor que te ocurrió?... Al menos piensa un poco - Murmuró James lo último, se podía escuchar un leve puchero en su voz.

- Pfff.... ¡Cerrá el orto tobogán de piojos!

- Si quieres insultarme hazlo en japones ¡Stupid fool!

- ¡Hablá Japones que no entiendo tú taka taka!

Agradecía estar en mi cama aún acostada para no poder escuchar la infantil discusión que llevaban los clones de la casa, si Oikawa conoció a James y vice versa, aunque su relación no es la mejor.

- ¿Empezaron a insultarse en Castillano e Ingles?

- Si.

Asentí viendo como Hajime salía de nuestro baño, la nueva casa a comparación del pequeño departamento era una mansión, aún a los meses no había podido acostumbrarme del todo al gran espacio que sobrara.

- ¡Idiot, stupid, mindless!

- ¡Puto gallego!

- Es increíble que aún no se maten - Murmuró nuevamente sentándose en la suave cama, vi como su cuerpo se movía con pezades mientras se colocaba sus botines.

- Es increíble que aún no se den cuenta de su parecido.

Desde que habíamos llegado a Japon muchas cosas habían pasado, bastante de echo y una de ellas era la presentación de Oikawa y James, al parecer ninguno de los dos habían notado su parecido o simplemente ninguno quería aceptarlo.

Mire como Hajime lentamente se seguía vistiendo, hoy tenía trabajo muy en la mañana, tanto que el sol aún no había echo acto de presencia.

- ¿Te vas a levantar? - Pregunto mirándome por primera vez en el día.

Sonreí sintiendo esa extraña sensación en mi estomago, lentamente bajé la mirada hasta sus dos anillos, uno de juguete y otro verdadero.... Me encantaba ver esa escena, aunque me sentía verdaderamente egoísta al pensar en que el hombre frente a mi era totalmente mio.

- Si, en un rato más.

- ¿Te sientes bien?

Abrí mi boca para responder aunque al instante la cerré al sentir como la comida de la noche anterior subía por mi garganta.

Sin pensarlo me levante de la cama para correr al baño, abrí el inodoro y deje escapar todo.... Diablos.

- Eso responde mi pregunta - Con lentitud Hajime tomo mi cabello para levantarlo en una coleta alta, pronto sentí sus manos paleando mi espalda - ¿Algo te hizo mal anoche?

No extrañaba esto..

- Si, supongo que comi de más.

- ¿Quieres que te prepare algo?

- No.

Mis piernas al igual que mis mano tiritaron junto a la leve capa de lágrimas que se asomaron por mis ojos.