Ha comenzado el verano, la pequeña Katica ya tenía tres meses de edad, y William comenzaba a sufrir ansiedad al saber que debía irse.
—Will... —Dijo Sara mirando por la ventana.
— ¿Qué pasa? —Dejó de jugar con Katica.
Al asomarse, vio un trío de caballos acercarse a la cabaña.
—Ya están aquí. —Dijo con seriedad.
—Me habría gustado haber ido contigo. Habríamos encontrado un buen lugar. —William negó en silencio.
—La ciudad no es un lugar tan agradable, créeme.
—Siempre lo hago.
— ¡Lobo! —Llamaron desde afuera —¡Ya es hora! —Gritó Henry.
—Te acompañamos a...
—No —Le interrumpió —No quiero que él la vea.
Ambos se besaron y abrazaron por un momento hasta que El Perro volvió a llamar.
Sara notó la tristeza en William; pero no había nada que ella pudiera hacer para evitarlo. Solo aceptarlo.
William tomó sus cosas, y luego de darle un beso en la cabeza a Katica, salió de la cabaña hacia donde su padre y el otro hombre que lo esperaban con un caballo para él.
—Se acabaron las vacaciones, hijo... —Dijo con melodía —De vuelta a nuestra vida de peleas y sangre. —Continuó mientras William se montaba en el caballo —Ya quiero ver a cuantos haces llorar en la primera lección. Solo espero que hayas entrenado en todo este tiempo —Lo fulminó con la mirada.
—Lo que sea que haga, ya no debería importarte —Le devolvió la mirada —Recuerda que tú y yo, somos muy diferentes en todo. A pesar de que tú hiciste de mí lo que soy ahora. —Tomó las riendas he hizo que el cabello volteara en dirección a la ciudad.
—El lobo está molesto —Dijo mientras reía —La familia lo ha estado domesticando.
—Ya cierra la boca y muévete.
— ¿No vas a presentarme a mi nieta?
— ¿Para qué? No tienes interés real en ella —Esbozó una sonrisa —Y yo no quiero que la conozcas... —Hizo que el caballo comenzara a caminar.
Al Perro le sorprendió un poco el ver sonreír a William; pero no le dio mayor importancia y lo siguió.
Al llegar a la ciudad, se dirigió directamente al despacho de Lord Edgard para recibir órdenes.
—Tiempo sin volver, Lobo —Saludó —Te veo distinto. Debes estar lleno de orgullo por haber tenido un hijo. —Dijo sonriente. — ¿Cuál es su nombre?
—Su nombre es Katica, Señor. Es una niña. —La expresión de Edgard cambió totalmente.
—Oh, es una lástima. Tenía la esperanza de ver a tu descendencia aquí. Pero quizás tengas un varón la próxima vez.
—Señor, con todo respeto, no estoy aquí para hablar de mi familia. Estoy para recibir órdenes sobre el entrenamiento de los nuevos reclutas.
—Está bien. —Sacó una lista —Han sido reclutados 150 hombres y jóvenes adultos. Te encargarás de todos ellos con tu padre para enseñarles técnicas de combate. La forma en cómo lo hagas no me interesa. Solo quisiera que no mataras a nadie por accidente.
— ¿Es todo?
—Sí, ya puedes irte.
—Sí, señor.
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El colmillo del lobo
General FictionLa vida de William comienza a mejorar luego de conocer a Sara, con quién tiene una hija llamada Katica. Katica, es conocida como "El Colmillo", y nadie se atreve a acercarse a ella por miedo a su padre; sin embargo, ella buscará su lugar en el mundo...