Vas A Caer. [EN EDICIÓN]

Cero Celos.

Ha pasado una hora y Noah aún no me ha sacado de este problema... Supongo que pasaré toda la tarde con Sandee, digo, no es que ella esté mal, es sólo que no me gusta de esa forma... De la forma en la que Noah... ¡Pero qué tonterías! Claro que no, Noah es un chico.

-¿Cómo es que se conocen Noah y tú? Digo, estudian juntos, sí... Pero Noah es demasiado irritable, no cualquiera es su amigo.
-Bueno... Es una historia tonta, no quieres oírla.
-No, dímelo por fa.
-Ahh... Bueno...

¿¡Y si sospecha!? Es que nuestra historia es rara. Bueno, piensa Liam... Tienes que decirle una historia normal.

-Bueno, una vez vino a mi casa con Kevin y otros chicos y por accidente quedamos atrapados en el depósito. Estuvimos solos durante más de una hora. Otro día cuando fui por el libro a tu casa, nos hicimos más cercanos y de la nada somos super cercanos...

Wow, de verdad que vamos rápido, de la nada ya somos... ¿Qué somos? Supongo que amigos, aunque por lo que veo, Noah no está muy interesado en mí, ni como amigo. Debo dejar de pensar en lo que somos.

-Es... Es raro, se volvieron tan cercanos en poco tiempo, pero no tienen nada en común.
-N-no, no es raro.

¡Lo es! Ya debe estar sospechando, se va a enojar y luego le dirá a todos que me gusta Noah y que le gusto a él. ¡Demonios! Hoy estoy muy pesimista.

Sandee se sentó más cerca a mí, su pierna estaba pegada a la mía. Tomó mi mano y me sonrió tiernamente.

-Sandee... Yo...
-¡Sandee! -Gritó Noah acercándose. -¡Demonios, suelta a Liam ya!
-¿Y ahora qué te pasa?

Noah, ya era hora de que hicieras algo, tonto... Vino a mi lado, tomó mi brazo y haló de él haciéndome levantar de la silla. Lo miré, se veía tan enojado.

-Ay no, Noah. ¿Cuándo vas a entender que no es tu problema con quién salgo? Deja a Liam en paz. -Habló Sandee con calma.
-¡Vete con Lilián, ahora!
-¡No, ya no molestes! Ven, Liam, vamos a otro lado sólo nosotros dos. -Me dijo Sandee.

¿¡Qué hago!? Noah seguía tomando mi brazo, intenté que me soltara, pero fue en vano. Noah comenzó a caminar llevándome con él hacia adentro.

-¡Noah! Deja a Liam.
-No pasa nada, Sandee. Sólo vamos a hablar. -Dije.
-Te espero afuera, Liam. Y tú, Noah, no le hagas nada.
-No te preocupes, sé manejar a Noah.

Noah y yo entramos, subimos las escaleras y me llevó a mi habitación, azotó la puerta, me miró de brazos cruzados. Parecía que iba a salir fuego de sus ojos, aún así se veía tan encantador... Pero antes de admirar su belleza, debía decirle unas cuantas cosas.

-Te demoraste en detenerla, ¿No, tonto? Te dije que esto iba a ser un problema.
-¡También es tu culpa por ser amable con ella!
-No hables tan fuerte, te van a oír.
-¡Es que no puedo creer que la dejes tocarte así!

Sonreí... Resultó que sí le importa si le gusto a alguien más, estaba celoso. Noah me miró enojado, aún más cuando vio que sonreía.

-¿Qué es tan gracioso, cuatro-ojos?
-¿Tienes celos? -Me reí.
-N-no...
-¡Tienes celos! No puedo creer que el chico más rudo está celoso.

Noah fue hacia la cama y se acostó, cubrió su cara con el antebrazo. Fui a donde él y me acosté a su lado, tomé su mano y le di un beso.

-¿Por qué me besas la mano? Tengo boca.
-¿Sabes, chico alto? Estaba empezando a enojarme.
-¿Tú, y eso por qué?
-Porque estabas tan desinteresado en mí y tu hermana que creí que ya no te gustaba.
-¿Y eso te enoja?
-Sí...
-Trataba de ser menos "rudo". Odio que me vean como un peligro.
-A mí me gusta el peligro.
-¿Qué te pasa? Últimamente me coqueteas mucho. -Lo ignoré, no iba responder esa pregunta...
-¿Por qué te cubres la cara? Quita tu brazo. -Cambié de tema.
-Tengo vergüenza.
-¿De qué?
-De estar celoso.
-No tiene nada de malo... De hecho me alegra, si no estuvieras celoso me daría un poco de tristeza.
-Me estoy cansando de fingir...
-¿Qué? Pero si sólo ha pasado un mes desde que empezamos con esto, Noah.
-Así es, pero yo llevo fingiendo toda mi vida.
-Noah, no podemos ser más que amigos, menos frente a los demás.
-¡Pero le gustas a muchas chicas!
-No es cierto.
-Yo sé lo que digo... Y para acabar de ajustar, le gustas a mi hermana. Y no puedo competir con ella, mi hermana es mil veces mejor que yo.
-Sandee es linda, inteligente, emprendedora... Graciosa...
-Ya sé... Se nota que te agrada mucho... Muchísimo.
-Claro que me agrada. Pero nunca voy a sentir por Sandee lo que siento por ti..
-¿Y qué sientes por mí?
-No sé, sólo sé que eres muy importante para mí.
-Gracias por decirlo, entiendo que no es fácil para ti decirme cosas lindas.

Me acosté de lado, apoyé mi antebrazo en el colchón, me acerqué a Noah y lo besé en los labios. Él tomó mi cintura con una mano... En serio... Nadie puede ocupar el lugar de Noah, él es muy especial... Comencé a quitarle el pantalón, Noah tomó mis manos y dejó de besarme.

-Si alguien abre la puerta...
-Voy a ponerle seguro.

Me levanté, Noah mientras tanto estaba quitándose la ropa. Cuando tomé el picaporte para asegurar la puerta, alguien abrió con fuerza, me empujaron y casi caigo.

-¿Por qué te estás quitando la ropa? Ay no... -Habló Sandee horrorizada.

Nos miró a ambos... ¡Sabía que este iba a ser el peor día! Lilián a su lado se cubrió la boca evitando que salieran sus gritos, o sus malas palabras, no tenía idea de qué le pasaba, pero eso no era lo importante en el momento.

-¿¡Qué hacen!? -Gritó Lilián.
-E-es que... No crean que nosotros... -¿¡A dónde se fue mi don de mentir!?
-Ya, entren y cierren la puerta.

Las chicas hicieron lo que dijo Noah, él se cubrió con una sábana, con la intención de no vestirse... ¿Acaso cree que podemos seguir? Está loco.

-¿No van a tomarse el trabajo de decir una mentira? Sabía que lo de hace un rato no era cierto.
-¿Qué?
-¡Sí, es obvio que escondían algo! Entrando a un cuarto a escondidas y ahora a solas en una habitación y tú estás casi desnudo.

Lilián, cállate, aún había esperanza... Sandee me miró confundida, Noah sólo miraba a Lilián hablar... ¿Y ahora qué? No somos novios y nuestras hermanas ya saben lo que pasa.