The Trouble Club [Cast Stranger Things e IT]

Capítulo 23: Pinta Cómo Te Sientes

Esa noche en la qué Sadie Sink había contado su secreto más íntimo.

-No deberías estar conmigo- Dijo Sadie cabizbaja.

-¿Por qué no?- Preguntó Finn.

Sadie lo miró con el ceño fruncido, cómo si la respuesta fuese obvia:- Por qué hay algo malo en mí, por eso mi mamá se mató em mis ojos y me abandonó, por qué soy asquerosa y no merezco qué nadie me ame.

-¿Por qué mierda dices eso?- Dijo Finn totalmente en desacuerdo. -Le dices eso a la persona qué tiene problemas de adicción.

-Las adicciones se tratan, y curan, pero yo jamás podré recuperar a mi madre, y el estúpido de mi padre cree qué llendo a terapia gastando 100 dólares en un maldito psicológo, y tomando pastillas repletas de difenhidramina y melatonina van a ayudarme, está totalmente idiota.

-Puedes mejorar.

-No Finn, no puedo, no puedo no puedo, por qué no soy tan fuerte cómo lo era ella, por qué soy tan estúpida qué no puedo salir del agujero, jamás voy a mejorar- Decía sollozando.

-Quiero ayudarte.

-No necesito tú ayuda, no necesito nada, sólo quiero de vuelta a mi mamá- Finalizó dando un grito tan fuerte y lleno de odio, tristeza, rabia, repulsión.

Finn sabía qué Sadie Sink no estaba bien.

Pero, allí se dio cuenta, qué ella estaba totalmente rota, destrozada y deshecha hasta el alma.

✨

Millie Bobby Brown, salía de su última clase, y caminaba hacía el salón de The Trouble Club, con goma de mascar de frutilla en la boca.

Llegó al sitio encontrándose con algunos de sus compañeros de club.

-¡Holaaa!- Saludo con una sonrisa falsa.

—Holaaa— Saludo Erin de la misma forma.

—Hola mis queridos amigos de este Club de mierda— Saludo Finn llegando con unas gafas de sol, y el cabello totalmente alborotado.

—Finn, tú bocabulario— Regaño Joe.

—Disculpe profe.

Joe le dio una mirada curiosa.

—Finn, ¿por qué traes lentes de sol si el clima es bastante nublado hoy?— Preguntó.

—¿Quién? ¿Yo?, Ah, disculpe, es qué pensé que iba a hacer calor y bueno usted sabe, al parecer no hizo, haha qué loco no cree... — Dijo riendo algo paranoico.

—Quítatelos— ordenó.

—¿Eh?.

—Los lentes, quitatelos.

Finn dio un suspiro de desagrado, pero procedió a quitárselos, dejando ver unas ojeras realmente notables.

—Ayer no fuiste a casa, ¿cierto? Esa ropa la usas después de clase de educación física, significa qué la sacaste de tú casillero porque traías la misma de ayer y no querías qué lo notará, te pusiste esas gafas para intentar qué no me percatara de qué ayer te drogaste sin parar y ahora estás tan desvelado qué te cuesta mantener la calma— Finalizó.

Finn se quedó perplejo:— Bueno usted es mago adivino o una mierda así, ayer no tuve un buen día, así qué fui a calmar mis penas.

Sadie miró a Finn, y se preguntó si se habría referido a su encuentro esa noche.

—¿Calmas tus penas metiendote porquerías?— Preguntó Joe.

—Cada quién se destruye a su manera, no me moleste— Contesto Wolfhard mirando de reojo a Sadie.

—Cómo sea, hoy se quedarán una hora más por el descuido de su compañero Wolfhard— Dijo Joe anotando en su libreta.

—No jodas Finn, tengo cosas que hacer.

—¿Por qué nos tiene que salpicar su mierda? Sería más justo qué se quedara el sólo aquí— Dijo Erin.

—Cactulina mejor cierra el pico por qué también te vi ahí, shot tras shot comiendote a besos a cualquier persona que se te cruzaba— Defendió Finn.

—¡Vete a la mierda!— Grito Erin.

Finn le mostró su dedo medio sonriendo malo.

—Fuertes declaraciones, si los niños terminaron de jugar, comencemos con la clase— Dijo Joe y se levantó.

Fue hacía un lado del salón y sacó varios caballetes, pinturas al óleo, paletas de mezclar, diluyentes, aceites y medios, lienzos y soportes, todo lo necesario para pintar.

—Hoy, pintarás cómo te sientes.

—¿Cómo?— Preguntó Cylia.

—Creí que me había escuchado muy entusiasta, bueno, así es, les daré un caballete y podrán tomar la pintura qué ustedes quieran, y simplemente harán una pintura de cómo se sienten por dentro, todo lo qué dibujen, debe estar bien expresado y con un significado— Finalizó Joe.

—Entiendo.

—Bueno, debo ir a otra de mis clases, los veo más tarde— Se despidío para luego salir del club.

Todos se pusieron a pintar.

Sadie pintaba concentrada, con azul, negro y gris, tomaba una pluma de punta gruesa y hacía varios rayones sin rumbo alguno, daban a entender qué se sentía atrapada y sin ganas de nada, azul porque sus ojos lo eran, y en ellos tenía todos los recuerdos gráficos qué había vivido, negro por qué era solo y oscuro, y siempre se sintió así desde que su madre murió, gris sólo era porque era un color aburrido y triste, tal cómo ella.

—Oye, ¿qué tal?— Saludo Finn.

Sadie no le contestó, intentando evadirlo.

Finn pintaba con pinceles delgados, pastillas tras pastillas pintandolas de color blanco y haciendo la forma con pluma negra, humo gris cómo sus emociones y el humo qué soltaban sus cigarros, colores fosforescentes porque los veía constantemente con sus alucinaciones, y al centro dibujaba sus manos, blancas y largas llenas de cortadas, sosteniendo un collar con rayones los cuales daban a entender qué no sentía nada.

—No deberías ignorarme, ahora sé lo qué te pasa, y no pienso dejar qué te sigas lastimando— Añadió Finn.

—Déjame sola.

—No.

—Te dije qué no deberías hablarme, sólo olvidalo y largate— Contestó fría y cortante.

—No.

Sadie rodó los ojos molesta.

—Escucha, tú necesitas de mi, y yo necesito de ti...

—No necesito de ti— Confirmó Sadie rápidamente.

—Sí, lo haces, y lo sabes bien, por qué conmigo puedes hablar de lo qué no hablas con nadie, conmigo te puedes desahogar, y yo te necesito por qué contigo se me olvida qué necesito estar drogado para estar tranquilo. Es por eso, qué debo quedarme contigo.

Sadie lo miro fijamente a los ojos.

—No deberías, pero cómo insistes tanto, podría dejarte entrar a mi mundo.

—Hazlo.

—Es gris, triste, y solo, pero es mío.

Finn sonrió burlon:—Es tan tú, me gusta— Dijo sonriendo.

Es un error dejarte entrar en mí, porque sé qué luego te irás...

Pero, quiero qué te quedes...

Quédate...

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Dos capítulos hoy pq si soy ^^

Espero que les guste mucho, los qm.

Nos leemos luego, creo.

Ariooooos.

<3