Capítulo 27: Sé Que Te Duele

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—¿Cómo supones que vallamos? No tragiste auto— Preguntó Sadie dudosa.

—Ah, este bueno supongo que me lo quitaron por llegar drogado en la madrugada ayer, mamá implora que lo deje, es complicado, ¿sabes?.

—No podría decirte nada al respecto.

—Bueno, pero gracias a quién sea que haya sido el responsable de nuestra existencia, tenemos piernas, y con ellas podemos caminar— Dijo sonriendo ya afuera de la casa de Sadie.

—Supongo que tendremos suerte de qué no nos secuestren caminando con toallas de baño— Dijo Sadie y comenzó a caminar.

—Así es, vamos.

—Finn sacó un cigarrillo y lo prendió— Aspirando un poco del humo que haría daño en sus pulmones. —¿Quieres un poco?.

Sadie tomó el cigarrillo y aspiro también.

Caminaban tranquilos, y en silencio, Sadie iba muy descubierta, sin embargo no tenía frío.

Traía pulceras largas y gruesas, Finn noto eso.

—Son para que no vean lo que escondes, ¿cierto?.

—Sería un fastidio que lo supieran.

—Sigo pensando que no deberías hacerlo.

—Yo pienso que no deberías drogarte, sin embargo lo haces, ¿no?.

—Es cierto, perdón.

Hicieron una pausa en silencio.

—¿Y tú padre?.

—Debe andar por ahí bebiendo o "trabajando", realmente no me importa— Dijo Sadie sin interés.

—Puedo preguntarte, ¿por qué lo odias tanto?— Preguntó Finn, siendo tan impertinente cómo siempre.

Sadie se sentía cómoda con él, no tenía ninguna razón para no contarle lo que quisiera, ella no solía abrirse con la gente así de fácil, pero Finn era un caso distinto.

Lo quería.

Y aún no asimilaba eso.

"No estoy preparada para amar" se repetía ella.

—Es un idiota, podría contarte mil cosas sobre él, y te aseguro que lo odiarías más de lo qué odias a Gaby por dispararle a Sasha.

—Mierda, sería la escoria en persona.

Sadie sonrió cabizbaja:— Lo es— Dio un suspiro largo. —Antes de que mi mamá se matara, era dulce, era bueno, recuerdo que solía tomar mi mano y decirme que era una princesa pelirroja, los niños pequeños son crueles, te llaman por apodos, te dicen lo que piensan sin filtros, y eso duele hasta el alma aunque no quieras que te afecte. Solía curar mi baja autoestima, pero después hizo que odiara aún más mi cabello.

—¿Odias tú cabello?.

—Es asqueroso.

—Yo creo qué es muy hermoso.

Sadie sintió algo en el estómago, eso la hizo estremecer, y sus ojos reflejaban un leve brillo.

—E-El conoció a una chica, de 15 años, se llamaba Romina, era pelirroja, cómo yo, y ella, me lo arrebató todo.

Finn comenzó a entender todo el odio.

—Empezó a salir con papá, el tenía 32, y ella 15, era una repugnante locura, pero a ellos no les importo, construyeron algo que llamaban "amor" y es por eso que los problemas entre mi mamá y él comenzaron a surgir, porque él no llegaba a casa, no contestaba las llamadas ni los mensajes, casi no lo veía, luego los padres de la chica se enteraron, y vinieron a reclamarle a mi mamá, allí mi mamá se entero y todo en ella se rompió, o al menos eso pienso, él se fue lejos, dejó dinero en mis manos, el muy idiota pensó "ahora todo quedó pagado" y se fue. Mamá y yo nos quedamos solas, ella hizo lo posible porque yo tuviera más de lo que ella tuvo cuando creció, pero al parecer el peso la absorbió, no pudo sobrellevarlo, y por eso hizo lo qué hizo.

The Trouble Club [Cast Stranger Things e IT] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora