Después de lo ocurrido ayer, recurrí a mi contacto de emergencia... Stella.
Stella es psicóloga, estudio muy joven al igual que yo, además es mi mejor amiga, puedo confiarle todo.
- ¿Que sucede? - pregunto al verme tras abrirle la puerta del pent-house.
- Stell...
- Cállate y abre la bocota- dijo y me senté en el sofá con la cabeza baja.
- No se que me pasa, nunca había llorado por un hombre o sentido como me siento, y antes de que me interrumpas déjame contarte- dije y comencé a contarle todo con lujo de detalle, solo lo referente a Aaron.
- Amiga, estas enamorada- dijo y negué muchas veces con la cabeza.
- Eso no... no pue... no puede ser, yo no estoy enamorada, no debería sentir nada hacia el- dije.
- Exacto, no deberías sentir nada, pero sientes, ya es muy tarde, no puedes ir por la vida pretendiendo que todo este bajo tu control, el llego a ti, tu llegaste a el, y formaron un huracán, no lo reprimas y acepta tus sentimientos.
- Stella, yo no puedo enamorarme, y menos de el, estoy en la mafia, soy del bando contrario, en dado caso que haría? No puedo hacer absolutamente nada, nada de nada, tengo que seguir el camino que se me fue construido, no puedo cambiar mi vida por el, y el no va a cambiar su vida por mi, el no siente nada por mi, solo un deseo carnal, eso es algo que no va a cambiar- dije.
- Se puso celoso tonta, claro que siente cosas por ti.
- No, no es así, el no siente nada por mi, el puede llegar a ser tan frió y distante como yo, el tampoco siente.
- Claro que lo hace, todos lo hacemos, tu lo haces, yo lo hago, y el no es la excepción, podrá negar sus sentimientos justo como lo estas haciendo tu, pero cuando encuentras una persona y los sentimientos son así de fuertes, y te sientes así como tu te sientes, es imposible negar los sentimientos- dijo y tome de la copa de vino que me había servido.
- ¿No se que hacer?
- Yo si...
- Te escucho- dije y comenzó a hablarme de su plan siniestro para poner aprueba a mi jefecito, esto era algo que me parecía estúpido, pero para que negar que me gusta, no, no estoy enamorada, o al menos eso quiero creer, pero lo que si se es que me gusta y Stella tiene muy locas ideas.
(***)
Stella ya había regresado a Australia, hoy era el día de viajar a Brasil, todavía falta un día para la misión, viajaremos hoy, instalaremos todo, estaremos al pendiente del perímetro y mañana por la noche iríamos a ese maldito baile.
Haciendo la maleta comencé a pensar en todas las cosas buenas y malas que podrían pasar, este no seria cualquier trabajo, eso es algo que se muy bien, el jefe de la mafia en Brasil no era un mafioso fácil de atrapar, no debíamos matarlo, seria una escapatoria muy fácil para el y todo lo que ha hecho, cuando estas en la mafia o terminas preso o muerto y un mafioso siempre prefiere la muerte a la cárcel, y es comprensible porque la cárcel es un lugar horrible, sin embargo, nuestro trabajo es retenerlo vivo para que pase mucho tiempo encerrado.
Tomo unos cuantos vestidos de mi armario, solo por si salimos a conocer en la noche, entre esos el vestido que utilizaría la noche del baile, metí varios zapatos y ropa cómoda.
Tome mis cosas y salí rumbo a la organización donde todas las tropas se estaban formando para subir a los aviones, eramos demasiados, por lo cual habían como cinco o seis aviones exageradamente grandes, esperando ser abordados.
- ¿Lista? - pregunta Artemisa y yo solo asiento.
NOTA: disculpen lo corto del capitulo! se los recompenso con un maratón!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
