just kids; rdg

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r u b é n
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Apenas finalizó el juego y sentí los ojos pesados decidí cambiar la dinámica y distraerme un poco de la pantalla.

—Vale chicos, ¿y ahora qué hacemos? —dije acomodándome mejor en la silla— ¿Preguntas y respuestas? —reí— Suena bien para mí.

Abrí twitter y escribí que pregunten lo que fuera que quisieran saber. Actualicé la página unos cinco minutos después y más animado me centré en la cámara y en el stream.

—"¿Por qué ya no hay más vlogs en skate?" —solté una carcajada— Coño, pues porque después de que me diera con la tabla en los huevos lo dejé. Es cierto, chicos, que no volví a tocar un skate.

Busqué alguna otra pregunta.

—"¿Ya no van a festivales de música con Mangel?" Sí vamos, solo que ya no lo grabamos —bromeé—. No, la verdad es que no nos ha llamado mucho ir a alguno otra vez. Estamos un poco viejetes para saltar y beber como idiotas con electrónica de fondo —leí los comentarios del stream diciéndome que había que aprovechar que no teníamos cuarenta años todavía—. Ya, joder, prometo que lo pensaré.

Me salté todas las que preguntaban si estaba soltero.

—"¿Volverás a Noruega?" —asentí— Sí, de hecho pasaré las fiestas allí —solté una risa ligera.

Seguí bajando por la página leyendo tweets al azar riendo con lo que escribían.

—"¿Has comprado leche xd?" —rodé los ojos entretenido— Sí, coño, he comprado leche.

Respondí un par más, me animaba bastante recordar cosas del pasado y ver que se divertían con las historias.

—A ver, otra pregunta —busqué distraído y elegí una sin fijarme— "¿qué pasó con Da-dani? —titubeé— Hace años que no la vemos y nu-nunca lo has contado:("

Suspiré arrepentido de no haberla leído en mi mente primero, había evitado esa pregunta por años. Miré hacia la cámara, nervioso. Sabía que ella no vería esto, pero tampoco estaba preparado para admitirle a los fans que toda la culpa la tuve yo.

No quería exponernos a ninguno de los dos, pero mi ansiedad me impedía negarme a responder porque ya la había leído y estaba en directo. Me fijé en los mensajes que estaban agregando, la mayoría decía que la extrañaba, que querían volver a verla.

Ojeé mi rostro en la pantalla, estoy serio, con los ojos apagados y en mi cabeza no deja de repetirse la última vez que la vi.

—Espero de corazón que cuando te des cuenta de lo que hiciste también te des cuenta de que es muy tarde, tú decidiste quedarte solo, Rubén —dijo antes de irse, más frágil que nunca, me tomó semanas darme cuenta de ello.

Wilson soltó un maullido devolviéndome a la realidad. Dudé un par de segundos más, ni siquiera sabía qué decir o no, qué tanto detalle me haría sentir incómodo. Si siquiera valía la pena hablar de ello.

Pero Dani fue parte del canal durante años, muchos fans le tenían cariño, le pidieron que se tomara fotos con ella, incluso le hicieron regalos a mano. Se merecían un poco de sinceridad.

—Supongo que les debo una explicación —reconocí hacia la cámara.

Empecé a jugar con mis dedos, nervioso. No quería mostrarme tan inseguro pero si fingía que no me dolía sería peor, no quería terminar llorando en directo.

—Lo cierto es que Dani había postulado a una beca en una compañía grandiosa, pero en otro país, lejos —empecé a contar—, ella no quería ir porque bueno, no quería dejarme, sabes —carraspeé—; entonces le prometí que si la ganaba nos mudaríamos juntos.