FULL IN BLOOM

CAPITULO 3

LISA.

—No puedo hacerlo—le dije a Harry bajando por el ascensor.

—¿Pero qué ha pasado?

—Pasa que Jennie es una loca—ví como rió y yo lo miré molesta—si, tú ríete que la que me la tengo que fumar pesadamente soy yo.

—Se como es Jennie, Lisa. Vengo trabajando con ella hace ya casi medio año. No es fácil, lo sé. Es una miniatura de lo que era su madre.

—Pues entonces manéjala tú.

—Lisa, pero te necesito. Te lo pedí porque confío en ti.

—No me conoces.

¿Que hablaba este si apenas me acababa de conocer?

—No, pero veo cómo aún la miras y me basta. Necesito que ella esté en confianza, ¿y quién mejor que tú para eso?

—¿Sabes qué sucede? Que ninguna de las dos tiene ganas de mejorar nada. Y yo estoy harta de escuchar sus reproches hacia mi. Consíguele a otro. Sabes que puedes hacerlo—solté saliendo del ascensor.

—Eres una fotógrafa increíble, Lisa.

—Lo sé.

—Pero me he confundido. Creí que podías llegar a ser lo suficiente madura y profesional para el trabajo.

—No, no utilices psicología barata contra mi. Mira, yo te comprendo, ¿vale? Entiendo que quieras protegerla y demás, ¿pero es mi puto problema? No. Tratar con Jennie siempre me fue complicado, pero ni siquiera antes, cuando apenas nos conocimos era así, ahora se ha vuelto peor. Porque la princesa esta enojada y me jode bien los ovarios. Fúmatela tú.

—Si cambias de opinión...

—Ajá.

—Ten un buen día Lisa—le asentí con la mano dándole la espalda y me marché.

Anoche, apenas había vuelto del desfile, no pasaron ni veinte minutos que tuve una llamada desconocida.

FLASHBACK

—Louis, mamá ya llegó—lo llamé pero no apareció.

—¿Dónde está mi sobrino? Debe odiar a la madre delincuente que tiene.

—¿Delincuente?

—Si. No paras de traer mujeres a su casa—me reprobó Jisoo dejando sus llaves sobre la mesa del living—esto es medio un desastre—soltó sentándose en el sofá y viendo cómo había quedado todo luego de la fiesta—¿llamaras a tu sexy empleada a qué lo limpié?—alzó ambas cejas sonriéndome.

—¿Qué sucede? ¿Tantas ganas tienes de conocer—pero mi móvil me interrumpió. Lo saqué de mi blazer—llamada desconocida.

—Atiende.

—¿Tu dices? Debe ser de alguna compañía telefónica o—

—¿A esta hora? No lo creo, anda responde—me ordenó quitándose las botas y estirándose sobre el respaldo.

—Hola—solté sin más apenas deslicé el dedo aceptando la llamada.

—Buenas noches, ¿hablo con Lisa Manoban?

—Ajá. La misma.

—¿Qué tal Lisa? Te habla Harry Dubois. Has estado en el desfile de Jennie hace unos minutos—miré a Jisoo sin comprender nada y ella me hizo señas en plan de saber qué sucedía.

—Ah. ¿Y?

—Lisa, se que la situación con Jennie no es la más indicada para pedirte esto pero, me gustaría poder llegar a un acuerdo contigo.