Eloise Pearson
Quizá esté actuando de manera precipitada, pero no me arrepiento. Solo estoy de paso en este lugar. En unos meses seré mayor de edad dejaré estar atada a Eleonor y a Patrick. Podré ser libre de la presión de ser su hija, pero antes debo mostrarles quien tiene el control.
—Tocaremos en acto final, Profesora Jhonson—informo recuperando la compostura, acercándome a ellos de manera decidida y me coloco al lado del chico de exóticos ojos grises.
La profesora sonríe complacida como si no esperara menos de mí.
—Es un placer escuchar eso, pensé que Caden venía a rechazar la oferta por los dos.
Le doy una mirada a Caden quien me observa confuso.
No soy como tú Ferrati, yo no juego con los sentimientos de los demás.
—Está claro que a ninguno de los dos nos agrada la idea de tocar en ningún lado, sin embargo, lo haremos solo por mero protocolo. —Soy directa y concisa. Estoy cansada de andar con rodeos — ¿Estás de acuerdo Caden?
Me giro hacía él y lo observo desafiante. Su mirada se desvía hacia un lado. Está evitándome.
—Estoy de acuerdo. —Informa, noto que su voz suena apagada.
La profesora asiente.
—Bien prepárense, les comunicaré la fecha luego. —Comunica la profesora.
—Solo estás de paso Eloise —Me digo a mí misma.
Voy caminado hacia afuera de la oficina cuando detrás de mi escucho a la profesora hablar.
—Por cierto, Eloise, tienes el mismo carácter que tu madre. —señala.
Y no puedo negar que su comentario me molesta, así que sin importarme que piense contesto:
—Se equivoca, no somos ni seremos iguales nunca. —Y con eso salgo del lugar.
He vivido una vida de mierda con Eleonor y que piensen que seré copia eso no lo voy a permitir.
Entro a un baño, me lavo el rostro y luego acomodo mi uniforme. Estuve el fin de semana recriminándome por ser tan idiota, pero se acabó. No dejaré que vean que me afectaron.
Salgo del baño y al salir no me sorprendo al ver a Caden esperándome. Lo observo fríamente.
—Eloise...—Oírlo decir mi nombre me molesta, pero... al mismo tiempo me gusta. —¿Podemos hablar?
Elevo la comisura de mis labios y me acercó lentamente hacia él.
—¿Qué estúpida y barata excusa me dirás? ¿Qué no querías herirme? ¿Qué no pensaste en lo que decías? Vamos Caden, eres lo suficientemente inteligente para saber que no te creeré.
No dice nada, solo me observa y lo tomo como señal para irme.
—Tienes razón—habla y yo me detengo, algo de mi quiere oír su patética excusa— era completamente consciente de lo que decía y hacía, acepto que me cree un concepto errado de ti al inicio. No quería hacerte daño por eso te mentí sabía cuánto te afectaría mi mentira.
—¿Esa es tu excusa?
—Sí, soy un idiota mentiroso y tienes todo el derecho de estar enojada conmigo.
—Que bien que lo aceptes, sin embargo, lo que pienses de ti no me interesa.
Comienzo a caminar. Quiero salir de su vista.
—¿Por qué aceptaste tocar conmigo? —Su pregunta me hace detenerme y contestarle de inmediato.
—Porque yo no juego con las sentimientos de los demás. —digo sin girarme.
ESTÁS LEYENDO
Un mapa hacia ti-EN EDICIÓN.
RomancePrivilegio, sí, nací con ellos, una de las pocas afortunadas. No es que sea una molestia comprar lo último de la moda, ir a restaurantes caros, o acceder a la tecnología del momento sin siquiera detenerse a observar cuánto ha perdido mi cuenta banca...