Eloise Pearson.
Su mirada está perdida, aquella persona solía asociarla con aquel color, el color de la perfección, ella para mi siempre fue un espacio en blanco, una escala de neutros, pero jamás imagine que verla llevando esto, una bata blanca con el logo de un hospital de salud mental.
Esta observando el ventanal gigantesco con un paisaje que intenta dar un aire armónico. Ella no esta aquí, esta sumida en sus pensamientos.
—¿Estás segura que quieres hacer esto?—La voz de mi amigo aparta mi vista de aquella mujer.
Sus agradables ojos azules lucen inseguros.
Asiento.
—Debo hacer esto Asher, necesito escucharlo de ella—Respondo con cansancio. Todavía me cuesta caminar por la herida, por eso me apoyo de Asher.
—Estaré allí—señala un sillón blanco.
—Intentaré no demorar—me alejo de mi amigo quien me da una mirada compresiva, con pasos lentos voy hacia donde está Eleonor.
Al estar a menos de un metro de ella, me detengo. Estoy insegura de esto, una parte de mi está feliz de que acabó, pero la otra siente pena por verla así.
La perfecta Eleonor, ¿Mira donde has terminado?
—¿Luke?—el sonido de su voz me hace sobresaltarme.
Eleonor observa el reflejo, mi reflejo en el ventanal.
—Soy Eloise—Aclaro, su médico me advirtió que podría estar confundida.
Sus ojos decaen y sigue mirando el mismo punto de hace un momento. Me coloco a su lado.
—Mamá—la llamo, sus ojos me buscan, pero se vuelven a perder, pierdo la calma más rápido de lo que creí.—No es justo Eleonor. ¿Por qué tiene que ser así? —reclamo —Estás aquí como si fueras la víctima de esto, cuando no es así, no eres una víctima madre. Eres tan culpable, pero aún así ¿Por qué yo me siento culpable?
No obtengo reacción. Ni un músculo.
Nada.
Me pasó la mano por el rostro frustrada. Los doctores me lo dijeron, Eleonor está en shock, no pudo lidiar con la situación de Luke. Lo irónico de todo esto es que ni siquiera esta así por mi.
Solo es por él.
—Lamento de Luke—señalo.
—¿Qué lamentas?¿Conoces a Luke?—me sorprendo al obtener una reacción.
—No—indico apagada—¿Me hablas de él?
Sonríe y no puedo evitar sentir remordimiento porque es la primera vez que la veo sonreír genuinamente. Verla sonreír así me hace querer haber conocido más de Luke.
—Es el chico más encantador que conozco, cuando lo vi por primera vez supe que quería estar siempre a su lado, sus ojos son verdes, como los tuyos—señala, me detalla, pero sigue hablando de manera risueña—me daba tanta tranquilidad verlos. Hacia arte con sus manos, aún tengo uno de sus tantos dibujos sobre mí guardados.
En su rostro solo hay añoro. Sus palabras, sus palabras son capaces de hacerte sentir un revoltijo de emociones. Sin embargo solo veo...
—¿Lo amas?
—Claro que sí,—confiesa con voz suave— soñamos con tener una familia, él quiere tener una niña y ponerle Eloise como su abuela.
Tengo que sellar mis labios para contenerme.
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Un mapa hacia ti-EN EDICIÓN.
Roman d'amourPrivilegio, sí, nací con ellos, una de las pocas afortunadas. No es que sea una molestia comprar lo último de la moda, ir a restaurantes caros, o acceder a la tecnología del momento sin siquiera detenerse a observar cuánto ha perdido mi cuenta banca...