𝐑𝐄𝐌𝐄𝐌𝐁𝐄𝐑 |njh| ©

38. | Maura

Capítulo 38.

Los ojos azules de aquella linda mujer escanean nuestra posición en toda su totalidad. Rápidamente y por instinto, me pongo de pié optando una mejor postura. Niall hace exactamente lo mismo mientras Louis abraza a la madre de Niall regalándole calidez.
Mis nervios aumentan y mi pulso se acelera a medida que ella comienza a avanzar hacia nosotros.

—Querido... —Niall se acerca primero y la saluda con un beso en la mejilla y un cálido abrazo.

—Mamá, ¿Qué estás haciendo aquí? —le pregunta él totalmente extrañado.

—Yo también te extrañé hijo de mi vida... —nótese su sarcasmo. Aunque Niall no lo tomó igual de gracioso pues su rostro estaba decidido a sacar información. —Agh, que aguafiestas. Eres igual a tu padre. —le dice ella con un tono divertido —Vine a visitarte cielo, quería darte una sorpresa pero veo que la sorpresa me la he llevado yo. —me mira y yo siendo quizás una cabeza más alta que ella, ahora me siento el ser más diminuto en la tierra. —Mucho gusto, Maura Gallagher. —se presenta bastante formal y no me queda más que estrechar su mano.

—Meredith Grey, un placer. —le sonrío como "tratando de romper el hielo". Su rostro aún me examina como si de una prueba en hilo se tratase. Ella iba a responder algo pero la voz de mi pequeña hija bajando las escaleras de la mano de Darcy, resonó por toda la casa.

En mi mente solo podía pensar: El fin del mundo...

Y la bomba estalló cuando ella corrió hacia Niall murmurando un:

—¡Papi, cargame! —Niall lo hizo sin problemas y la cara de Maura era otra cosa en realidad.

—¿Papi? —pregunta ella con sus ojos clavados en Charlotte. Ella la mira y automáticamente enroscada sus brazos al rededor del cuello de Niall.

—¡Hola! —la saluda alargando la "a".
Maura se acerca temerosa y acaricia su mejilla con dulzura.

—Hola preciosa, ¿Cuál es tu nombre? —le sonríe.

—Charlotte. —le responde. Miro furtivamente a Natalie, Louis y Firial quienes tratan de no reír puesto que mi cara no ha cambiado para nada.

Me siento aterrada y no hay razón.

—¿Me explicas porqué esta nena tan linda se parece a ti... querido hijo de mi corazón? —lo mira en busca y exigencia de una explicación.

—Es mi hija. —los ojos de Maura se abren tanto que temo que pronto se salgan de sus cuencas.

¡Tantita sensibilidad, Niall!

—¿Qué? —Niall y Charlotte asienten al mismo tiempo.

Y yo solo me mantengo callada mientras me volteó rápidamente a tomar un largo y poderoso trago de la supuesta cerveza que embriaga más rápido que el tequila. Lo tomo de golpe y me incorporo nuevamente.

—Te lo explicaré después, solo... conformate con saberlo ahora mamá. Lamento no haber llamado, juro que iba a contartelo pero... en su debido momento. —Oh no, Maura parece molesta.

—¿Y cuándo es ese "debido momento" Niall James? ¿Cuándo la nena tenga dieciocho años? —él niega.

—No lo sé, pronto, primero quiero asimilar estos últimos meses, no es como que lo haya sabido hace un año o más.

—Meses... —repite ella —Meses y ni una sola llamada. Mi hijo tiene una hija a escondidas con sabrá dios que mujerzuela. —muerdo mi labio inferior queriendo que la tierra me trague, aprieto los puños solo intentando curar mi vergüenza, no quiero hablar, realmente no quiero.