𝐑𝐄𝐌𝐄𝐌𝐁𝐄𝐑 |njh| ©

03. | Mami.

Capítulo 03.

Tiempo más tarde...

Londres, Inglaterra: 3 años después...

—¡Mami! La tía Natalie llegó. —anuncia la pequeña desde el salón sin despegar la mirada del iPad.

Me dispuse a salir de la cocina con un pañuelo sobre las manos.

—Hola cariño. —besa la frente de Charlotte quien le responde con un beso en la mejilla —Huele delicioso, ¿Qué cocinas? —la saludo de igual forma.

—Pollo a la plancha con salsa y ensalada de vegetales ¿Te quedarás a almorzar?

—Por supuesto, también vine a decirte que el el jefe pidió que tú prepares estos papeles para una de las juntas más importantes que tendremos en una semana. Firial y yo te ayudaremos a presentarlos Mer.

—Y ¿Sobre qué es? —pregunto entrando de nuevo a la cocina con Natalie siguiéndome.

—Es una exposición sobre marketing para distribuir productos de dos tres importantes artistas. Christian no quizo decirnos de quién se trataba pues según él, son muy importantes y bla bla bla. Quieren sorprendernos. —la miré de reojo y ya estaba sentada en uno de los taburetes.

—Christian y sus bromitas. —reí sin gracia.

—Oye, pobrecito. Le gustas mucho y tú solamente no le das pero ni el avión mamasita.

—No estoy buscando pareja Nath.

—Si ajá, pero nisiquiera te has dado la oportunidad de experimentar con él. Feo no es, va al gym, ojos azules, es británico y alto ¿Qué más quieres? ¿En tres años no estás buscando pareja?

—Tengo una hija...

—Y Christian la adora y ella a él.

—¿Te ha pagado para decirme todo ésto?

—Nop. Sólo digo que él te acepta tal y como eres y acepta a Charlotte también. Amiga, no vas a quedarte sóla toda la vida.

—Con mi niña es más que suficiente.

—No será por siempre una niña Mer. —ámbas miramos lo adorable que se vé la pequeña recostada en el sillón gris. Se ha quedado dormida con un vídeo de Bob esponja en el iPad.

—Lo sé...

Me lavo las manos y después las seco con una toalla para después dirigirme hacia el sofá en donde se encuentra. La tomo entre mis brazos apagando el aparato mientras somnolienta pasa sus pequeños brazos alrededor de mi cuello.

Subo las escaleras hasta llegar y dejarla sobre su cama con sábanas de lindas flores. Enciendo el aire acondicionado y la arropo con el cobertor.

«Ella es todo mi mundo» pensé apoyada del umbral de la puerta.

Cuando supe que estaba embarazada no lo podía creer. No sabía qué hacer ni cómo actuar.

Por un momento creí abortar.

Pero esos pensamientos fueron opacados por mi conciencia. Mi bebé no tenía la culpa de mis errores y la inmadurez que pasaba por mi cabeza en ese momento. No estaba en mis cinco sentidos y tuve sexo con un artista.

Fuí un acostón que terminó en la mejor desición de toda mi vida.

Cuando cumplí los dos meses de embarazo, una noticia que circulaba por todos los medios de comunicación me sacudió por completo.

Niall Horan tenía novia.

Una novia modelo que dos meses después que la noticia de su relación fuese pública, quedó embarazada...también.

El problema fué que cuando hice las cuentas desde aquella noche en el club y el tiempo que ellos llevaban; llegué a la conclusión de que Niall engañó a su novia conmigo pues según la prensa y la confirmación de el mismo Niall, tenían más de 1 año juntos.

Esa noche lloré demasiado.

Y no por él o tal vez si pero lloré más por mi y por esa chica. Nadie podía entender por lo que yo estaba pasando. Estaba embarazada de un hombre al que le conocí apenas el nombre y el pene ¿Loco no?
Luego me dí cuenta de que jamás volvería a verlo, es una figura MUY PUBLICA, nunca me lo toparía y muchísimo menos si así fuese; le diría: Oye ¿Me recuerdas? Nos conocimos de un club clandestino en Londres. Partimos a tu hotel y finalmente tuvimos sexo sin protección por qué a ninguno se le ocurrió gracias a que estábamos tan jodidamente ébrios y excitados que la calentura fué mayor. ¡Ha! Y un pequeño detalle, unas semanas después supe que estaba embarazada...de ti. Ahora mi hija es un retrato tuyo, se llama Charlotte por cierto.

Por supuesto que no.

Salí de la habitación y bajé las escaleras para terminar de cocinar.
Nos me preocupé por mi pequeña pues había almorzado ántes.

(...)

—Después de terminar, simplemente nos Irémos hacía la mesa de corroboración.

—Me parece perfecto Nath. Así es mejor. —ahora nos encontramos ya almorzando, son las tres de la tarde. Hace una hora Charlotte está dormida.
Tocan a la puerta y me dispongo a abrirla, Christian está frente a mi con un ramo de tulipanes sobre las manos.