¿Importa?

Te amo

15 de enero, 2011

-¡Hola!- Saludó una alegre joven mientras corría a darle un beso en la mejilla a su mejor amigo.

-¿Qué tal la escuela?- Cuestionó el chico con una sonrisa en sus labios.

-Estuvo normal, ya sabes- Se encogió de hombros restándole importancia.

Era su primera semana de clases y todos los días sin falta iba a visitar a su morocho favorito al hospital.

Resulta que su enojo de la ultima vez no le duró mucho, ya que cuando al muchacho le dio un ataque de asma recordó las palabras del doctor: "El trastorno no es común, y a veces es un aviso de que su verdadera muerte se aproxima"; así que empezó a ignorar sus celos para pasar el mayor tiempo que podía con él.

-Me alegro- Le dijo sincero.

-¿Qué estás viendo?- Cuestionó al ver un largometraje de zombies en la pantalla.

-Nada en realidad-

-Que bueno, porque traje unas buenas películas- Le mostró una bolsita negra que contenía tres discos.

John le sonrió y se acomodo para dejarle un espacio en la camilla a su amiga.

-¿Sabes? Creo que si le gusto a Jacob- Comentó mientras se sacaba los zapatos y se subía a la camita.

El flacucho la rodeó con sus brazos para que se acurrucara en su pecho. Era ajeno, porque él no era cariñoso.

-¿Y a ti te gusta él?- 

-Mmh... creo que no- Respondió.

Jacob no le gustaba, pero ahora sus dos mejores amigos estaban emparejados y ella se quedó sola; por lo tanto, le dijo a John que la ayudara a buscar pareja y el aceptó con gusto. La aconsejaba o le mostraba a algunos pacientes que llegaban, la mayoría eran guapos, pero aún no encontraba al correcto.

-Ava, ninguno te gusta- Se quejó su amigo en lo que intentaba hacerle una torpe trenza en su cabello.

-¡Oye! No puedes obligarme- Río.

La chica giró bruscamente su cabeza y sus rostros quedaron a milímetros, pero a ninguno le importaba en realidad; para ellos no era nada malo, o al menos para John no lo era.

Él estaba acostumbrado a la cercanía de las personas, debido a que cuando era más pequeño parecía una rata de laboratorio en todos los hospitales, siempre rodeado de gente, así que eso no le preocupaba.

Pero una cosa era la cercanía y otra las muestras de cariño...

Ava se acercó un poco más para acariciar su nariz con la suya y luego depositó un beso en la punta de esta.

-¿Trini vendrá hoy?- Interrogó.

-Dijo que no sabía, tenía un proyecto o algo así- Le contestó sin interés alguno.

-Ya, eso es bueno ¿no?- En sus labios se formó una sonrisa pícara.

Trinidad le pisaba los talones a Ava en cuanto a visitas; usualmente, ambas estaban siempre al mismo tiempo en el cuarto del muchacho, así que oír eso fue como una bendición para ella.

-No creo- Replicó entre risas.

John estaba al tanto del odio que tenían cuando se encontraban cerca de él (porque lejos eran las comadres que siempre habían sido); sin embrago, le gustaban las visitas de Trini, quien ahora era su "novia", algo totalmente extraño.

Novia

Él nunca había tenido una, no sabía como tratarla o que decirle, por ende decidió verla como a su amiga; excepto con las muestras de afecto. John le tomaba la mano, le acariciaba el cabello o le daba besos en la cabeza; pero no a Trini... sino a Ava.