Me alegro

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07 de agosto, 2016

-Jamás había estado aquí- Anunció Anthony aludiendo a la ciudad natal de su bella prometida.

-¿En serio?- Ahora se encontraban en un centro comercial, simplemente paseando.

-En serio- Iban con las manos entrelazadas, viendo las diversas tiendas que se hallaban a su alrededor.

-¿Sabes? He tenido ganas de localizar a mis... viejos amigos- Un nudo en la garganta comenzó a formársele.

-Suena genial, deberías hacerlo- Le beso la coronilla muy tiernamente en señal de apoyo.

Ella le sonrió en respuesta.
Sus ojos estaban fijos en alguna parte del establecimiento, pero de la nada, una figura familiar se atravesó en su campo de visión...

"¿Trini?"

Si, efectivamente era la morena curiosa y bella que se encontraba saliendo de un puesto de ropa para damas con un.. ¿bebé?

-No, he dicho que no Maximiliano- Le hablaba a alguien por el teléfono- Mira, si tienes algún problema con mi decisión pues vete a... ¡Auch!- Gritó al instante que sintió su cuerpo estrellarse dolorosamente contra otro- ¡Fíjate por donde...!- Sus palabras se quedaron suspendidas al levantar la vista y toparse con su despampanante ex- mejor amiga- ¿Ava?- Murmuró atónita- ¡Oh por Dios! ¡Ava  Gonzales!-

-La misma-

-¡Pero mira que guapa estás! ¡Eres un tremendo mujerón!-

-No exageres, pero tú... No tengo palabras, estás totalmente diferente- Comentó de buena manera.

-Nada de diferente, lo único nuevo es este monstruo que cuelga de mi- Sacudió el brazo de donde colgaba un pequeño bebé de apenas un año de edad; precioso la verdad.

-¿Es... tuyo?- Cuestionó temerosa. La vida de Trinidad estaba planeada a la perfección, y entre eso, obviamente no había espacio para un recién nacido.

-Si- Respondió con sencillez, como si no acabará de informarle a su vieja amiga que todos los planes de su vida sufrieron una severa modificación.

La boca de Ava formó una "O" y no supo que más decir.

Pero Trini terminó con ese incómodo silencio.

-¿Quién es ese Dios griego de ojos azules?- Interrogó curiosa al notar que venían juntos.

-Oh... él es Anthony, mi prometido- La mandíbula de la morena cayó casi al suelo de la impresión.

-¡Yo te lo dije! ¡Te dije que volverías con toda una vida hecha y derecha!- Chillaba llena de sincera emoción- ¡Estoy tan feliz por ti, Ava!- La sacudió un poco por los hombros para hacer más énfasis en su alegría.

-Gracias- Respondió tímidamente. Luego le surgió una pregunta que moría por soltar; así que miró a Thony, quien estaba perdido en la pantalla de su móvil, y habló-¿Qué sabes de...John?-

-¿John Müller?- Repitió para estar segura de que se refería al flacucho en silla de ruedas. La castaña asintió despacio- Él está bien, estudia arquitectura y creo que se encuentra en los últimos semestres; ya sabes, con el mejor promedio y todo eso- En los labios de Ava surcó una pequeña sonrisita al imaginar a su morocho cumpliendo uno de sus más profundos sueños.

-Me alegro- Admitió con sinceridad y orgullo; si, orgullo.

-Espera... ¿Aún no has hablado con él?- Su cara adoptó un semblante de confusión, ¿por qué rayos no había hablado con ese ser tan "importante" para ella?

-No- Torció su boca y echó un vistazo de nuevo a su novio- ¿Sabes dónde puedo encontrarlo?-

-En su casa, sigue viviendo ahí- Replicó aún confundida- Creí que sentías algo por John- Soltó de repente.

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