Yuna Hiroshi [One piece]

Capítulo 28

Yuna, Vivi y Guardian corrieron en fila alejándose de la batalla entre los ejércitos que seguía sin ver un final, a pesar de que la princesa quería detenerlos debían priorizar la bomba que planeaba asesinar a todos en la plaza y a sus alrededores. Se alejaron de la pelea y se encontraron de frente con el resto de los mugiwara.

— ¡Usopp, Nami, ¿Qué les pasó? — Se preocupó Yuna cuando vio al francotirador vendado desde los pies a la cabeza y a la navegante llena de su propia sangre. 

— ¡Vencimos a nuestros enemigos! — Exclamó Nami orgullosa de si misma. 

— Es doloroso. — Se quejó Usopp. 

— ¿Qué está ocurriendo aquí? — Preguntó Zoro analizando la situación, una Yuna levemente herida, Guardian oculto bajo la capa y Vivi agitada. 

— Crocodile planea hacer estallar una bomba en la plaza donde pelean los ejércitos real y rebelde. — Explicó Vivi apresurada. — Debemos detenerla. 

— Es probable que esté cerca de la plaza, las bombas no tienen mucho alcance. — Acotó Guardian observando hacía atrás haciendo referencia a la plaza. — Si nos dividimos en equipos podemos encontrarla y destruirla. 

— ¿Ese es el plan? — Inquirió Zoro hacia la segunda oficial y esta asintió. — Bien, andando. 

Todos se dividieron y comenzaron a correr buscando la posible ubicación de la bomba, Yuna terminó haciendo equipo con Nami, ambas prestaban atención a su alrededor mientras corrían e incluso revisaban las casas y edificios pero no encontraron nada.

— ¿Deberíamos volver? — Preguntó Nami intentando recobrar la respiración. 

— Quizás los demás hayan encontrado algo. — Asintió Yuna respirando agitadamente.— ¿Estás bien?

— Claro, no tenemos tiempo para descansar. — La navegante se quitó el sudor de la frente y asintió dispuesta a continuar pero Yuna la detuvo al ver una bengala en el cielo indicando un lugar. — ¿Qué? 

— Mira. — Apuntó, Nami observó y sonrió en grande.

— ¡Deben ser ellos! ¡Lo encontraron! 

— ¡Vamos!

Yuna jaló a Nami y corrieron siguiendo el rastro que la bengala había dejado, se veía lejos de su ubicación pero bastante cerca de la plaza. 

— ¡Yuna-san! — Llamó la navegante al ya no tener una responsabilidad encima, Yuna volteó a verla prestándole atención. — ¿Es cierto que la persona debajo de la mascara es tu madre? 

— Si, lo es. — Respondió ella emocionándose un poco. — Por cierto, quiero que estés conmigo cuando ella quiera hablar conmigo. 

— ¿Estás segura? — Se asombró Nami. 

— Sí, necesito que estés ahí para saber que es real. — Murmuró avergonzada, Nami le tomó la mano aún corriendo. 

— Ahí estaré. 

Llegaron hasta el pie de un reloj donde se encontraron a Usopp, Vivi, Chopper y Guardian, al parecer la princesa jugaba ahí en su infancia y era el lugar perfecto para esconder la bomba ya que apuntaba hacia la plaza. 

— ¿Cómo llegaremos arriba? — Preguntó Usopp, les quedaba poco tiempo para la explosión y la torre del reloj era gigante. 

— Yo puedo subir rápido. — Avisó Guardian llamando la atención de todos. — Soy muy rápido. 

— No... Son demasiadas escaleras. — Murmuró Vivi pensándolo bien aunque no tenían muchas opciones.

— ¡Hola! — Gritó Sanji moviendo su brazo de un lado a otro dentro de la torre y ya varios pisos arriba. — ¿Qué hacen allá abajo?