Mago Supremo: Volúmenes 6 y 7

Capítulo 373. Solución Perfecta

Es difícil pasar por alto su importancia cuando ves cómo las runas afectan el espacio que las rodea y cómo el orden de su activación puede hacer que los efectos de dos matrices compuestas por las mismas runas sean completamente diferentes. Lith pensó.

—Por desgracia, estoy demasiado vieja y cansada para seguir adelante. La luna ya está alta. Descansa un poco. Si más criaturas nos atacan mañana, contaré con tu protección. —Yondra sofocó el fuego con un chasquido de dedos y entró en las habitaciones de las mujeres.

Lith permaneció solo por un tiempo, clasificando la nueva información adquirida con Solus y tomando notas en sus propios papeles para luego almacenarlos dentro de Soluspedia. Pronto la fatiga le provocó dolor de cabeza y su cerebro le suplicaba un descanso.

Pelear es mucho más fácil. Él suspiró.

Tu cuerpo puede soportar mucho, pero tu mente aún necesita relajarse. Vete a dormir, estaré pendiente de la situación. Fuera de su torre, Solus no podía dormir ni descansar. Le daba a Lith una ventaja en muchas situaciones, pero a largo plazo, afectaba su cordura.

Lith se fue a dormir cerca de un puesto de guardia, listo para actuar a la primera señal de peligro. No confiaba en nadie. Morok era demasiado extraño y los soldados demasiado débiles para su gusto. Los Profesores eran mágicamente fuertes, algunos incluso más que Lith, pero como Korgh había demostrado, sólo se necesitaba un golpe para derribarlos.

La paranoia era una amante cruel, pero le había servido demasiadas veces para ignorarla. Excepto cuando estaba completamente equivocada, por supuesto. Cuando llegó la mañana y no pasó nada, Lith se maldijo a sí mismo.

La retrospectiva siempre es 100% correcta. Solus se rió entre dientes.

Los miembros de la expedición volvieron a estudiar la puerta y antes de que ninguno de ellos se diera cuenta, el amanecer se convirtió en atardecer. Lith incluso había intentado usar Fire Vision al mediodía para detectar compartimentos ocultos.

Si un interruptor estaba camuflado debajo de una roca falsa, debería haber mostrado una coloración diferente en su visión térmica en comparación con el resto de la pared de roca después de haber sido calentada durante horas por el hechizo de Yondra. Desafortunadamente, incluso este intento fracasó.

Lith cenó con Yondra y Quylla, comparando notas en busca de una solución. La expedición era la mejor oportunidad de Lith para poner sus manos en la antigua tecnología Odi que podría ayudarlo a resolver su problema de reencarnación.

Si resolvemos este acertijo y en el futuro encuentro más ruinas por mi cuenta, sabré cómo entrar. Si fallamos a pesar de que tantos magos sabios trabajan juntos, también podría tachar a los Odi de mi lista de posibles soluciones. Él pensó.

Durante el tercer día, Lith comenzó a inquietarse al igual que los Profesores Asistentes. Los magos mayores sabían que resolver misterios antiguos requería tiempo, esfuerzo y suerte, mientras que sus ayudantes tomaban el fracaso personalmente.

Después de susurrar "ábrete sésamo" frente a la puerta, obteniendo nada a cambio más que un eco incómodo, Lith le preguntó a la Profesora Gaakhu, la experta en lenguaje:

—¿Cuál es la palabra Odi para amigos?

—Glavrish. ¿Por qué?

Después de un doloroso segundo que hizo añicos sus últimas esperanzas, respondió:

—No hay razón. Sólo tenía curiosidad. —Dijo mientras Solus se reía a carcajadas a sus expensas.

Cuando llegó la hora de la cena, Lith decidió darse un descanso tanto para él como para Yondra, pasando la noche con sus amigas. Después de recibir su propia Skinwalker, el estado de ánimo de Quylla había mejorado mucho, pero se estaba volviendo más triste con cada día que pasaba.