They Dont Know About Us ™ 《LT》

·Vestidos De Novias·

Capítulo 22:

 

POV Paula:

 

Algunos meses después…

 

Hoy estábamos en mi prueba de vestido para la boda.

Venían todos los chicos DE One Direction (excepto Louis), mi madre, mi hermano, los chicos de 5SOS y los chicos de mi banda. Éramos muchos en la sala. Tuvieron que cerrar el local por la cantidad de fans de los distintos grupos juntos que había.

Ya había encargado mi vestido hace unas semanas y hoy era mi última prueba.

Louis estaba pagando su traje en otra habitación y no podía ver el vestido, supuestamente por una “tradición”.

La chica que nos atendió me llevó a una habitación y me ayudo con el vestido, por ultimo me coloco el velo que mi madre había querido que usara, ella lo había usado y por supuesto sería un honor usarlo también.

Una vez estuve lista pude salir y mostrarles mi vestido y el resultado de todo. La habitación se colmo de ojos abiertos y suspiros de sorpresa.

— ¡estas hermosa, santo cielo! — exclamó Harry

— Serás una hermosa novia— me sonrió Luke.

Todos concordaron en distintos piropos. Me sonroje notablemente.

— bueno, quiten esos ojos pervertidos de mi hermosa hermanita— dijo Scott levantándose y abrazándome por los hombros— te ves genial, por cierto.

—muchas gracias, espero que Louis le guste tanto como a ustedes.

— ¡Lo amara!- dijo Charlie.

— Y sí no lo hace, le corto las pelotas— me sonrió ______.

La sala entera rió con el comentario de mi baterista.

— bueno, me cambio y lo compro, mientras, ¿por qué no van con Louis?

— claro.

Todos abandonaron la sala de espera y se dirigieron a la de Louis.

Entre a la habitación y volví a mi ropa inicial. Le di el vestido a la encargada para que me lo envolviera así podría pagarlo.

Me entrego una bolsa grande y pesada que lo contenía.

— bien señorita, ahora caminé por ese pasillo, ahí la atenderá nuestro cajero.

— claro, gracias.

Iba tranquilamente caminando, podría apreciar como el pasillo era bastante ancho, a la mitad de él había una puerta pero no le tome importancia.

Pero entonces esa puerta se abre y deja ver a la persona menos esperada e indicada de pie enfrente de mí.

— ¿Nicolás? — pronuncie pero no tuve tiempo a reaccionar, dio unas grandes zancadas hasta mi y coloco un paño en mi nariz. Tenía una fuerza impresionante, no podía sacármelo de encima.

Lo último que oí fue “no sabes lo que espere este día, dulzura” antes de que mis ojos se cerraran completamente y entrara en un sueño profundo.