Capítulo 45.

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Ese día Harry estaba bastante concentrado en clases, se encontraba haciendo la tarea de la semana en el tiempo que les había dado el profesor.

Él había sacado los audífonos de los bolsillos de su uniforme y con el volúmen al máximo estaba desarrollando dicha tarea, ese fué el motivo por el cual no había escuchado a su maestro.

Incluso su compañero de banco le dió un suave codazo para que volviera a prestar atención al mundo real.

El ojiverde se quita los audífonos y mira expectante a su profesor.

—El director te necesita en su oficina, lleva tus cosas— Harry asiente y comienza a guardar su cuaderno y sus lápices al interior de su mochila sin mucho cuidado.

El rizado se levanta de su lugar y cuelga la mochila en uno de sus hombros, su mirada se encuentra con la de Liam, se veía desconcertado.

Sinceramente Harry también lo estaba.

El ojiverde sale de su aula y a penas la puerta se cierra detrás de él lo toman de un brazo y la jalan hacia a un lado.

Frunce su ceño y mira la mano sobre su brazo, finalmente pone sus ojos sobre el rostro de la persona que lo había tomado desprevenido.

Lucas.

El pelinegro tenía una sonrisa sobre sus labios y en una de sus manos tenía su celular desbloqueado. El ojiverde alza una de sus cejas y se aleja un poco para escapar del agarre.

—Tengo dos entradas para el cine— Harry asiente sin tomarle mucha importancia, ¿qué tenía que decirle? ¿felicitaciones?

—Genial.

—Podemos ir ahora, ambos estamos fuera de clases.

El ojiverde niega con su cabeza y con una de sus manos apunta hacia el pasillo opuesto de donde estaban.

—Tengo que ir a la oficina del director, me acaba de citar.

—No te citó, fuí yo el que te sacó de la clase.

Harry literalmente se queda quieto en su lugar, no le había agradado para nada eso.

—Volveré a clases.

Ni siquiera alcanza a girarse cuando el pelinegro otra vez lo había detenido.

—Acompáñame por favor, ya tengo las entradas.

El ojiverde toma un profundo respiro y cierra momentáneamente sus ojos para no perder la paciencia, estaba al límite.

Desde que Zayn le había comentado como realmente era Lucas había perdido la confianza en él y todo le desagradaba.

—Tengo una pregunta— el pelinegro asiente y Harry de pronto toma la misma postura que tomaba cuando se enfrentaba a Joel— ¿por qué me diste la hora incorrecta el día de las evaluaciones?

—¿De qué hablas?

—El día en que mi celular quedó inservible, te pedí la hora y no me diste la correcta.

—¿En serio?— si Lucas estaba mintiendo, era realmente bueno en eso, Harry no podía detectar en su mirada si decía la verdad o no, parecía confundido— lo siento, debí tener la hora mala, a veces mi celular se desconfigura solo.

El ojiverde aparta la mirada y retrocede un par de veces.

—Bien.

—¿Sucede algo? Siento que estás a la defensiva conmigo.

Y en ese momento a Harry le hubiera gustado decir muchísimas cosas, pero simplemente murmuró un:

—No pasa nada.

Lucas vuelve a mirar su celular y la emoción regresa a su cuerpo, no había ideado el plan perfecto ese día para luego tener que cancelarlo.

—¿Entonces podemos ir al cine?

—No puedo atrasarme con las clases, se lo prometí a Louis.

—¿Louis?

—Mi novio.

Harry se siente tan bien al momento de decirlo, que inevitablemente una sonrisa se formó en sus labios.

Su novio.

—No sabía que tenías novio— la mentira se desliza son simpleza entre los labios de Lucas.

—Ahora lo sabes— el pelinegro pone la mejor sonrisa en sus labios, aparentando que no le había afectado ese comentario.

—Sí, lo siento por lo de las entradas, me emocioné porque salió esta película que estaba esperando hace tiempo y ninguno de mis amigos quería ir conmigo, pensé que tu sí y saqué conclusiones apurado.

Harry se siente mal por un momento, ¿y si decía la verdad?

—¿Para qué hora es?— ya en ese momento había considerado ir, e incluso había decidido dejar todos esos pensamientos de lado, no podía culparlo y tratarlo mal sin pruebas.

El pelinegro no había sido desagradable con él en ningún momento.

—En dos horas más— Harry mira por un momento dentro del salón y termina asintiendo, cuando Lucas ve que lo había convencido no puede evitar morder su labio inferior con fuerza.

—Bien, vamos— ambos chicos se voltean y Harry mira la hora en su celular, decide darle volumen ya que siempre que estaba en clases se lo bajaba por obvias razones.

Lo desbloquea cuando ve un mensaje de Zayn y se detiene para leerlo con mas calma.

A penas lo hace, levanta la mirada hacia el pelinegro que lo veía expectante.

—Fuiste tú.

La acusación toma por sorpresa al otro chico y ríe suavemente de puro nerviosismo.

—¿De qué hablas?

“Ya logré encontrar la ubicación y mi celular reconoció el número de teléfono, es el antiguo número de Lucas, fué él.”

—No te hagas ¿quieres?—Harry pierde el control cuando lo ve sonreír, como si su verdadera faceta se hubiera revelado— ¿por qué?

—La verdadera pregunta aquí es ¿Por qué no?

El ojiverde no duda en tomarlo por el uniforme y empujarlo a la pared más cercana, lo mira fijamente con odio y estaba aguantándose las ganas de soltarle un golpe, Lucas no pierde la oportunidad y se inclina con la intención de dejar un casto beso sobre los labios de Harry, pero este logra echar su cabeza hacia atrás antes de que ocurriera ese desastre, los labios del pelinegro impactan contra su barbilla.

Harry no duda y golpea con fuerza contra una de las mejillas del chico que había considerado su casi amigo.

—Nunca más en tu jodida vida vuelvas a intentar besarme— murmura con rencor y lo suelta bruscamente— eres una mierda, no te vuelvas acercar a mi o a Louis, porque que juro que te haré la vida imposible.

Le da una última mirada y toma su mochila la cual había caído al suelo, se la cuelga en el hombro y se devuelve a su clase.

Lucas toca con la punta de sus dedos su mejilla y suelta por lo bajo un par de quejidos, le había dolido como el infierno, también lleva una de sus manos a su nuca y recoge sus cosas, se da el lujo de volver a caminar hacia la salida y se detiene un par de metros antes.

—¿Las tienes?— cuando ve a Jackson asentir una sonrisa se forma en sus labios, de todas formas había resultado su plan.

Dandelions |Larry Stylinson|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora