Dandelions |Larry Stylinson|

Capítulo 51.

El ojiazul muestra su pulsera en la entrada y avanza un poco para esperar al ojiverde.

Bueno... Definitivamente si cabía muchísima gente en el gimnasio, en verdad ni siquiera parecía uno, le agradaba la idea de que hubiera barra libre, probablemente solo pediría un vaso de vodka y nada más.

Siente una mano en su cintura y alza la mirada para comprobar que era Harry, sonríe al verlo y rápidamente se voltea para toma una de su manos y jalarlo hacia la pista de baile.

La única vez que habían bailado había sido en las fiestas de graduaciones de ambos e igualmente lo hicieron con timidez, tenían a sus padres casi encima grabándolos, obviamente eso les había generado vergüenza.

Harry sonríe al ver a su novio tan motivado, así que no duda en seguirle el ritmo, muerde su labio inferior y lo agarra por las caderas, apega las suya contra las de este y el castaño baja su mirada a esa acción.

Vuelve a alzar la mirada y apoya sus manos sobre los hombros del ojiverde.

Harry acaricia la cintura del castaño por encima de la camiseta y el gesto le causa escalofríos al ojiazul.

—¡Permiso, déjenme pasar!— ambos chicos se separan y miran con su ceño fruncido a la persona que había causado aquello. 

Ambos abren sus ojos al ver a Niall ahí, con un vaso entre las manos, ¿uno? Mejor dicho, dos.

Bebía de un vaso y luego del otro.

—¡Viva la fiesta!— Harry le da una mirada a Louis y este se encoge de hombros.

—¿Estás estudiando aquí?

—Claro que sí, Economía— murmura y el ojiceleste se balancea en su lugar, Harry sonríe ampliamente y lo abraza por los hombros, era increíble que estuviera ahí.

—Oigan, estuve apunto de gritarles que se consiguieran un cuarto— el ojiverde reconoce esa voz al instante y voltea a ver hacia su izquierda, Liam estaba ahí y Zayn estaba su lado.

—¿Qué...?

—Antes que nada, te juro que postulamos a muchas Universidades, pero Zayn quería irse de California y quedamos en esta, te íbamos a decir pero con todo el tema de la mudanza se nos olvidó.

Harry se lleva ambas manos a la cabeza, no podía creerlo.

Ríe y se acerca a ellos para abrazarlos, Zayn ríe y palmea la espalda de su amigo.

De inmediato Louis saluda a ambos chicos y los cinco se quedan ahí formando un pequeño círculo, de forma discreta Louis le había quitado un vaso a Niall y se lo había comenzado a beber él.

El ojimiel había ido a buscar botellas de agua mientras Liam y Harry se ponían al día.

Zayn estudiaría arquitectura y Liam odontología, ambos finalmente estaban saliendo y al igual que Harry y Louis, se habían mudado a un departamento y estaban viviendo juntos.

Louis se apega a un costado de Harry y apoya su cabeza en su hombro, el ojiverde pone su atención sobre él y es cuando se da cuenta de la poca resistencia que tenía el castaño ante el alcohol.

—¿Qué bebiste?

—Uno de los vaso de Niall, vodka.

Harry suelta un suspiro y lo abraza por la cintura, de todas formas no se iban a quedar mucho tiempo ahí en la fiesta.

—¿Quieres agua?— cuando ve a su novio asentir, destapa la botella y se la ofrece— bebe harta, si quieres ir al baño avísame y te acompaño.

Harry no desconfiaba de Louis, desconfiaba de la gente y si su novio estaba un poco mareado no lo dejaría solo, podía pasar cualquier cosa, algo como que se tropezara con alguién y sin querer se metería en una pelea.

Harry se sorprende al ver como había bebido más de la mitad de la botella, ríe con suavidad y deja un beso en su frente.

Sólo pasaron cinco minutos antes de que Louis le avisara que iba a ir al baño, y Harry va detrás de él asegurándose que llegara bien.

—Son tan jodidamente adorables— murmura el ojimiel y le iba a dar un trago a su botella con agua, pero ve que Niall, también estaba bastante mal, le da una mirada a Liam y este asiente.

—Oye, mira bebe esto, te hará bien— el ojiceleste pone su mirada sobre la botella de agua y la toma entre sus manos, mantenerse hidratado lo haría sentirse mejor.

—Chicos, nosotros ya nos vamos y...—la mirada de Harry se pone sobre Niall— me llevaré a Niall.

—No que va, déjanos ayudarte, nosotros llevaremos a Niall y tu ve con Louis directo a casa.

—¿Seguros?

—Sí, no lo dejaremos botado y menos en el estado que está.

Harry asiente y se acerca a abrazarlos, les comenta que los vería pronto en los pasillos de la Universidad.

El ojiverde toma la mano del ojiazul y lo dirige hasta la salida, sería un trayecto a casa bastante divertido.

Y así fué, Louis acariciaba a cada perrito callejero que se encontraba, chocaba con los basureros y luego les pedía perdón.

Era tan adorable.

|🌠|

Harry pensó que a penas llegaría al departamento el castaño se quedaría dormido, pero no fué así, se había sentado frente al sillón con toda la intención de ver una serie, así que mientras elegía, el ojiverde fué a la cocina a preparar dos tazas de té.

Ese fué el motivo por el cual ambos chicos se amanecieron viendo una serie, a Louis le había parecido fantástico ver “Young Royals” ya que tenía pocos episodios, gran sorpresa se llevaron ambos cuando se metieron tanto en la serie que no pudieron parar de verla hasta terminarla.

Ahora ambos se encontraban sin estabilidad emocional sentados en el sillón frente al televisor viendo como pasaban los créditos, Harry podía jurar que ya no le quedaban más lágrimas por derramar, en cambio Louis seguía sollozando.

—Me niego a que ese sea el final, deben sacar la segunda temporada.

—¿Por qué? P-pensé que iba a volver— Harry voltea a ver a Louis y suelta un suspiro para luego atraerlo hacia su cuerpo, era más que evidente que el alcohol había abandonado su sistema.

—Ya, no llores más, es sólo una serie.

—Una serie... Pero necesitan un mejor final— Harry luego encuentra divertida la situación.

—Vamos a dormir mejor, ya es suficiente— Louis hace un puchero pero se levanta de su lugar, camina hacia la habitación en la cual ambos dormían y comienza a desvestirse, Harry en cambio se queda ordenando el desorden que habían hecho en la sal principal.

Luego avanza por el pasillo y se quita la camiseta mientras caminaba, desabrocha sus pantalones y deja su ropa doblada en una silla, saca un buzo holgado del closet y se mete en la cama.

Louis de inmediato se acerca a él y apoya su cabeza en el pecho del ojiverde.

Ambos estaban tan cansados que no les cuesta para nada quedarse dormidos.