Los diez mandamientos de los vampiros [YOONMIN]

Capítulo 20

Yoongi y Jimin se dirigen a un hotel y rentan un cuarto por una noche. Suben por el ascensor pero sienten que tardan demasiado y las ganas les pueden. Yoongi carga a Jimin y Jimin rodea la cintura de su amado con sus piernas. Se besan desesperadamente y no les importa que alguien pueda verles. El ascensor para repentinamente y la puerta se abre. Una empleada de servicio se les queda viendo con prejuicio pero ellos solo se ríen. La empleada decide no usar el ascensor y los chicos, como si nada hubiera pasado, siguen besándose con intensidad.

Cuando el ascensor se detiene en su piso, los dos se agarran de la mano y corren hasta el cuarto que rentaron. Adentro, ambos se quitan sus chamarras quedándose desnudos de la cintura para arriba. Se funden en un profundo abrazo. La sensación de la piel del otro es embriagante.

—¿Quieres ser el activo? —pregunta Jimin, jadeando.

—Por favor —responde Yoongi.

Jimin y Yoongi se quitan al mismo tiempo el resto de la ropa mientras se besan y acarician ocasionalmente. Cuando están completamente desnudos, Yoongi se sienta en el borde de la cama y Jimin se sienta en su regazo. Se miran a los ojos.

—¿Estás listo? —pregunta Yoongi.

—Si.

Yoongi intenta ser lo más cuidadoso posible con Jimin.

Después de unas horas ambos no pueden más. Para ser su primera vez, Jimin lo disfrutó mucho, aunque algo le dice que no podrá sentarse bien durante unos días.

—Me alegra que lo hayas disfrutado —comenta Yoongi.

—¿Esta fue tu primera vez, también?

—No.

A Jimin no le sorprende, de hecho, le parece lo más normal del mundo considerando que Yoongi tiene más de 80 años. Jimin le insiste que le diga quien fue su primera vez pero Yoongi se niega rotundamente a decirle la verdad.

—No voy a poner celoso—replica Jimin con pucheros.

—No me preocupa que te pongas celoso. Pero sé que no te va a gustar.

Yoongi se da la vuelta para no verle la cara. Jimin se queda pensando durante un rato y deduce quién fue y sí, definitivamente no le gusta.

—¡Eres un degenerado! —grita Jimin mientras le pega a Yoongi con una almohada.

—¡Estábamos borrachos! —responde Yoongi mientras bloquea los almohadazos— ¡Te prometo que a ninguno de los dos nos gustó!

Jimin se siente un poco asqueado al principio. Sin embargo, eso fue hace décadas, por lo tanto no debe importarle. De hecho no le importa. Al final acaba por reírse de lo irónico que es la situación y Yoongi, aunque confundido, le sigue el juego hasta que las risas se apagan.

—Te amo, Min.

—Te amo, Park.

Dejo esto aquí sin más explicaciones...