Re-unión

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Ya dentro de la caseta real, Min Yoongi supo disimular su inquietud frente a los reyes Park. El hecho de que el comandante no estuviera presente junto a los reyes del sur le levantó muchas sospechas, pero era algo que ya se imaginaba iba a suceder. Pobres ilusos, se les olvida que están pretendiendo engañar a la armada mas grande y poderosa de todas las colonias orientales; no saben lo que les espera. Min se acercó e hizo una reverencia a los reyes Park al igual que sus guardaespaldas- “Buenos días, mi nombre es Jung Min Yoongi, esposo del Canciller del Imperio Jeon, consejero y emisario del Emperador. Estoy aquí para traer el mensaje por parte del Emperador para la reina Park Shin-hye según acordado en la noche de ayer. Su majestad habló con su prometido el príncipe Jimin y éste aceptó hab…- “regresará con nosotros y punto! - el rey Park interrumpió alzando su voz – “en sus sueños señor”- “eres un insolente! ¿Cómo te atreves a dirigirte a mí de esa manera? “- el rey se levantó de su silla e iba a golpear a Yoongi, éste no se inmutó a moverse ni un milímetro, mirándolo fijamente, atrás del rey se escuchó otra voz- Ya BASTA Bo-Gum!, no voy a perder la oportunidad de hablar con mi hijo por tus arranques de ira; por fa-favor, deja que termine de hablar” – la reina estaba a punto de llorar, sus ojos llenos de lágrimas- “por favor esposo mío” – el rey Park era cruel, arrogante y prepotente; pero todo eso se iba abajo y su corazón se apretaba al ver a su esposa llorar. Ella era su todo, su fortaleza, su alegría, su mundo entero; el rey Park nunca quiso tener hijos, pero al nacer Jimin y la reina darle su atención, como madre al fin, no le gustó para nada a Park Bo-Gum. Estaba celoso de su propio hijo, por eso para él, Jimin era solo un estorbo, un “objeto” del que podría obtener riquezas y poder, más aún por ser de los pocos bebés varones que cuando llegaran a su edad adulta, podían salir embarazados y eso para el rey Park significaba poder pedir la cantidad de oro, riquezas y armada que quisiera. Pero sobre todas esas cosas, podía tener la atención de su esposa únicamente para él. Park Bo-Gum solo quería ganar poder y según él, lo obtendría vendiendo a Jimin. El rey había convencido a la reina que había escogido a el esposo perfecto para su hijo y que no tenía por qué preocuparse ya que su elegido lo iba a tratar muy bien. Lo que no le iba a decir era que el trato radicaba en hacer que Jimin le pariera al comandante tres hijos, quisiera el menor o no, a cambio de eso unirían las armadas Park y Cheol-Gang para atacar otras colonias y conseguir mayor poder. “Bo-Gum, por favor” – éste se había acercado a la reina y le acariciaba el rostro - “está bien Shin, está bien, lo dejaré hablar” – el rey voltea a mirar a Yoongi y éste lo observaba con una cara de fastidio – “termina de hablar para que te largues, ya bastante has incomodado a mi esposa” – Yoongi le dio una mirada como de que le importaba una mierda lo que el rey Park dijera, pero continuó con su mensaje- “como le decía, el Príncipe Jimin aceptó hablar, pero solo con su madre, la reina Park. La reunión será en el salón principal del palacio, no se aceptará a ningún guardia de la armada del comandante Cho Cheol-Gang, el Príncipe escuchará lo que la reina tenga que decir, pero de la misma manera ella escuchará lo que el Príncipe le expondrá. Recuerde, si vemos algún movimiento en falso o que intenten hacer algo en contra del Príncipe, aténganse a las consecuencias. Solo les recuerdo que están en desventaja, ahora ¿cuál es su respuesta reina Park? – la reina no espero ni un segundo para contestar - “acepto” – “bien, me retiro, vendrá una escolta mas tarde para llevarla al palacio” – Yoongi hizo una reverencia, dio media vuelta para salir de la caseta real, no sin antes ver como un encapuchado salía de detrás de una de las cortinas, creyó que Min no había notado su presencia, iluso.

누군가 우리를 따라옵니다nugunga ulileul ttalaobnida (Alguien nos sigue)”- Min comunicó en su lengua natal a sus guardaespaldas que esperaban afuera de la caseta real por él. “내가 당신에게 말할 때까지 아무것도하지 마십시오/ naega dangsin-ege malhal ttaekkaji amugeosdohaji masibsio (No hagan nada hasta que yo les diga)” – terminó de montarse en su caballo, lo giró y comenzaron a salir del campamento, al pasar por la entrada, este distinguió nuevamente al soldado que quiso pasarse de listo con él. El infeliz no pudo sostener la mirada amenazante de Yoongi y por instinto, volvió a poner su mano en sus partes privadas. Cuando estuvieron bastante retirados del campamento y a punto de entrar al palacio, alguien llamó la atención de los guardaespaldas de Min sacando estos sus espadas ante el extraño. Éste tenía una capucha color vino que solo dejaba ver sus labios y su vestimenta era negra. Ya Yoongi se había percatado de la cercanía del encapuchado, solo quería ver hasta donde llegaba su audacia. El encapuchado levantó sus manos en forma de rendición – “¿quién eres y que quieres? y mas vale que conteste rápido antes que mis guardias te maten” – el encapuchado llevó sus manos a su capucha y la retiró, dejando ver su rostro- “Mi nombre es Kim Taehyung, soy el guardia personal del Príncipe Park Jimin y quien lo ayudó a escapar”- dándole una hermosa sonrisa cuadrada.

El Emperador y mi Príncipe "©"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora