Final

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-'cachorros...ataquen' -el resto de los lobos brincaron y despedazaron el cuerpo de Cho Hyuk-Shik, al fin, el enemigo estaba muerto.
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-Habían pasado dos días desde el incidente con Cho Hyuk-Shik y Kim Soo-Young; uno estaba muerto y el otro en el calabozo esperando ser enjuiciado. Por órdenes del Canciller Hoseok, Soo-Young tenía vigilancia 24 horas, ya que querían evitar que atentara contra su vida antes del juicio. El pasillo donde se había dado la pelea había sido baldeado, frotado y limpiado minuciosamente; la limpieza había sido supervisada por la señora Lola. El rey Park Bo-Gum envió un mensajero al Sur para que trajeran a Kim Taehyung ya que era más que obvio que su esposa lo necesitaba. Se preguntarán en dónde está Cha Eun-Woo, pues Jeon lo envió a investigar que no quedara algún otro hermano de Cho Cheol-Gang y que luego quisiera venir a tomar venganza. Fue a hacer lo que el Emperador le había pedido, pero con mucho pesar, ya que cuando habían llegado del Sur, su esposa le dio la noticia de que estaban esperando un bebé. Demás está decir que la alegría de Eun-Woo era enorme, pero de algo estaba seguro, ahora iba a tener que aguantar las bromas que le haría Taehyung. La reina Park Shin-Hye se estaba recuperando del golpe recibido cuando fue empujada al suelo, tenía varios moretones y una fractura en su mano, de lo demás estaba bien.

El bebé de Yoongi y Hoseok había dado señales de mejoría; ya la fiebre se le había ido y estaba comiendo y durmiendo mejor, pero el doctor le dijo que no era conveniente que lo sacaran de la casa por lo menos por una semana. Debido a la condición del bebé Yoongi no podía ir a ver a su amigo JiMin, pero Hoseok prometió mantenerlo al tanto de la salud del rubio. Sue-Han, la esposa de Kim Taehyung fue atendida por el médico Kim ya que fue golpeada en la cabeza por Hyuk-Shik, gracias al cielo que ella y su bebé estaban bien. Taehyung pidió tiempo libre para poder atender a su esposa, tiempo que fue concedido por parte de Jeon ya que entendía a la perfección por lo que el comandante estaba pasando. Jeon recibió doce puntos de sutura en su pierna y le fue ordenado por el médico no hacer fuerza a su pierna, pero su mente no estaba en su mejoría, sino en la de su ángel, su amado rubio que aún no despertaba desde el día de la agresión. Había perdido bastante sangre y de la forma que Hyuk-Shik lo empujó al suelo hizo que se golpeara en la barriga y en la cabeza. El médico Kim le dijo al Emperador que era mejor mantenerlo en total reposo hasta ver que no hubiera secuelas en su embarazo. Los mellizos se negaron a dormir en su cuarto, querían estar al lado de su appa JiMin todo el tiempo. Mientras los niños dormían en la cama con JiMin, Jungkook dormía en el gran sofá que había en la habitación, dándole espacio a sus retoños. Los niños no querían ni salir a jugar. A cada rato le daban besos en el rostro y en la barriga a JiMin como normalmente hacían, ellos estaban asustados y Jeon lo sabía porque él también lo estaba. Era como revivir lo que había sucedido cinco años atrás (capítulo: Traición) esta vez era aún más preocupante ya que JiMin estaba embarazado. Su vida y la del bebé estaban en peligro; sus hijos acariciaban los brazos de su appa -'Appa, abe lo chojo (abre los ojos) Appa yo ti amo mucho y a bebé, abe lo chojo pol fabol' - para Jeon, esa palabras de sus hijos hacia JiMin le partían el corazón. -'niños vengan acá' -Yak y Hae bajaron de la cama y se treparon en las piernas de su padre con cuidado de no lastimarlo. Sus ojitos llenitos de lágrimas y muchas preguntas en sus cabecitas. -'Papi, cuando appa abil lo chojo? Appi umiendo mucho y yo quero abacho de appa' -'yo tamben quero abacho de appa y no abe chojo' -ambos niños recostaron sus cabecitas en el pecho de Jeon y comenzaron a llorar. Para él era difícil encontrar las palabras de consuelo para sus mellizos cuando él mismo estaba sumamente preocupado, aún así, con voz muy suave habló a sus pequeños -'Ángeles míos, appa se pondrá bien, solo que en estos momentos él y el bebé necesitan dormir mucho. Cuando appa despierte los llenará de besos y abrazos, pero ahora mismo necesita descansar y ustedes también, ya es tarde. Vayan al baño para que laven sus caritas y se pongan su ropita de dormir, aquí los espero para acostarlos.' -los niños hicieron lo pedido por su padre; con mucho cuidado se acostaron a cada lado del rubio, agarrando sus brazos. Jeon acomodó las sábanas y depositó un beso en la frente de cada uno de ellos. -'Papi' -'Si mi amor' -'¿El cielo oye?' -'Claro que sí Hae, el cielo escucha los deseos mas grandes de nuestro corazón' -'¿Y como se hace?' -'Yo tamben quero sabel papi' -Yak preguntó muy interesado en la respuesta que le podía dar su padre, Jeon se acercó de nuevo a la cama mirando los ojitos atentos de sus bellos mellizos y les explicó tan sutilmente, para que ellos pudieran entender a su corta edad. -'¿El señol cielo pude despeltal a appa, velda?' -'Si mis ángeles, el señor cielo es el único que puede' -La voz de Jeon comenzó a quebrarse y sus ojos a llenarse de lágrimas. -'Pue Yak y yo se lo pidiremo' -Los niños cerraron sus ojitos y unieron sus manos en forma de oración, Jeon los miraba atentamente lleno de adoración -'Annyeonghaseyo señol cielo, me llamo Jeon Hae-San' -'Annyeonghaseyo y yo me llamo Jeon Yak-Sok' -'mi papi dijo que tu oye y mi Hyung y yo quelemos pidil que mi appa depielte' -(Yak es mayor que Hae por par de minutos, por eso lo llamó Hyung) -'señol cielo, Hae y yo quelemos abacho de appa, prometemo poltal bien y no comel más galletitas ehcondido de Appa y Noona' -Hae abrió los ojos- 'Yak, pero a mi gutan galletita' -'es pol appa Hae' -ta bien, pol appa si' -Jeon escuchaba la petición de los mellizos y la promesa que hacían, tuvo que aguantar el deseo de reír de lo tiernos e inocentes que se escuchaban -'Pol favor señol cielo, depielta a appa' -Ambos niños bajaron sus cabecitas e intentaban aguantar sus lagrimitas -'Vamos mis hermosos ángeles, es hora de dormir' -'Papi, crees que el señol cielo oyó?' -'No tengo la menor duda que los haya escuchado mis niños, ahora a dormir, los amo mucho' -'Ti amo papá' -dijeron al unísono. Jeon se volvió a sentar en el gran sofá, cubrió su rostro con una almohada para que sus hijos no lo escucharan llorar. Cuando se calmó un poco miró por la ventana hacia el cielo, uniendo su oración con la de sus hijos -'Señor cielo, por favor, te lo suplico con todo mi corazón, haz que mi amado esposo despierte. Permíteme ver esos hermosos ojos azules hasta el fin de mis días, mis hijos y yo lo necesitamos, por favor señor cielo' -poco tiempo después quedó dormido.

El Emperador y mi Príncipe "©"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora