Melifluo | Hyunin #1

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Jeongin y Hyunjin tuvieron un dilema esa madrugada, considerando que acaban de tener su primer encuentro sexual, ni uno ni el otro iba a dejar ni de broma que uno baje junto al personal considerando el aroma extremadamente fuerte que poseían ambos.

Tanto así que estuvieron peleando en la noche por quien se encargaría de subir el desayuno o almuerzo.

Al final, no hubo otra solución que dar al personal otro día libre, por que de parte de Jeongin, ya el alfa estaba advertido de hasta que punto pueden llegar sus celos, y bueno, para Hyunjin ofrecer en bandeja a su ángel era un rotundo no sin considerar la opción.

Así que ambos se encontraban ahí, en la cocina luego de una extensa ducha que a Jeongin le dejó los músculos débiles por que la diversión no faltó para el alfa, pero pudo llegar hasta ahí abajo refunfuñando y Hyunjin riendo detrás suyo.

- Es un alivio que haya comida empaquetada por que el hecho de que ambos no sepamos cocinar es un contratiempo- Jeongin se relajó al escuchar al mayor.

Soltó una pequeña risa, era cierto, y le resultó gracioso el hecho que realmente ambos no poseían ni cerca de las habilidades comunes de alguien en la cocina, por lo que agradecidos en ese momento estaban por recalentar las comidas en diferentes potes que se hallaban en orden en el frigorífico.

Iban a almorzar, desayunar no pudo incluir en sus planes por que como dijo anteriormente, había sido un dilema levantarse y un dilema poder salir del baño.

Y mientras Hyunjin ordenaba los cuencos el omega se servía un vaso de agua, tomando de la pequeña pastilla blanca conocida como un supresor con tranquilidad.

- Hyung- Jeongin no tardo en quejarse.

Jeongin había creído que cuando el acto sexual de ellos finalice, sería él quien se aferraría al alfa como pegamento, pero había sido totalmente al revés, Hyunjin ni siquiera lo dejaba dar un paso sin rodearlo con sus brazos y besar todo su rostro, Jeongin se cuestionaba incluso si aún había alguna parte de su cuerpo que el alfa no hubiera tocado.

Y en ese momento, el alfa de nuevo lo estiraba para sentarlo en sus piernas, incluso para comer.

- Me gustas cerca mío- Hyunjin solo murmuró eso, frotando su rostro en su hombro hasta hacerlo reír.

- A mí me gusta mi trasero en una silla- el alfa río entre dientes.

- No sólo te gusta tu trasero en una silla- tonto y pervertido Hwang Hyunjin.

- ¡Ya!- golpeó el hombro del alfa para poder girar en sus piernas ignorando sus risas mientras él enrojecía pobremente.

Jeongin ya no se quejó cuando Hyunjin comenzó a dejar besos en su nuca y bajando por su hombro, en ese momento tenía puesto una camisa del alfa.

Sí, realmente fue una de las fantasías del omega.

Y estaba totalmente satisfecho considerando que Hyunjin era fanático de las prendas anchas y grandes, Jeongin podía considerar que realmente se veía bonito con aquella tela llegando hasta un poco más abajo de sus glúteos, y claro, con ropa interior.

Suspirando Jeongin tomo una hoja de lechuga y comenzó a llenarlo de pedazos de carne y verduras, una vez rellenado pudo doblar la rodaja y colocando una palma debajo de la que sostenía por precaución giro un poco hacia el alfa.

- Toma hyung, esto sí es comestible- murmuró divertido, Hyunjin literalmente lo iba a comer si no le daba algo para digerir.

Hyunjin ni siquiera se vio afectado a sus palabras, abrazando con firmeza la cintura del menor se inclinó hacia la mano del omega y abrió la boca esperando paciente a que le dé de comer.