Para muchos lo primordial es la línea de sangre, pero ¿Que importancia tiene eso cuando lo que prima es el amor?
Nuestra sangre no nos define como personas, ni fija nuestro destino, solo podemos ser víctimas de aquel primitivo y audaz ladrón llamad...
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-¡Excelente idea!- dijo Lockhart, haciéndoles un gesto para que se acercaran alcentro del Salón, al mismo tiempo que la multitud se apartaba para dejarles sitio, Lockhard intentó explicarle a Harry un movimiento de varita pero se le cayó, provocando que algunas risas se escaparan, era cada vez más obvio el fraude de ese tipo. Snape se acercó a Draco para aconsejarlo, lo que hizo que su sonrisa creciera, al parecer ambos amaban la idea de hacer quedar mal a Potter, hasta incluso podrían ser mejores amigos respecto a ese tema.
-¿Asustado Potter?- murmuró Draco, de forma que Lockhart no pudiera oírle
-Eso quisieras tú - le dijo Potter torciendo la boca
-Vaya, estos de verdad se detestan- dijo Summer con una sonrisa y por un momento Draco volteó a verme, yo le asentí con la cabeza en señal de apoyo, después de todo quería ver a mi querido hermano ganarle a su némesis
Lockhart dio una palmada amistosa a Potter en el hombro y dijo -¡Simplemente, hazlo como yo, Harry!-
-¿El qué?, ¿dejar caer la varita?- respondió Potter
-El chico tiene agallas- dije con una media sonrisa, pues todo esto me resultaba bastante divertido y entretenido
-Tres, dos, uno, ¡ya!- gritó Lockhard, a lo que Draco levantó rápidamente la varita y dijo
-¡Serpensortia!-
En ese momento hubo un estallido en el extremo de su varita. Potter veía aterrorizado como de ella salía una larga serpiente negra, caía al suelo entre los dos y se erguía, lista para atacar. Todos se echaron atrás gritando y despejaron el lugar en un segundo
-No te muevas, Potter- dijo Snape sin hacer nada, disfrutando claramente de la visión de Harry, que se había quedado inmóvil, mirando a los ojos a la furiosa serpiente
-Me encargaré de ella, ¡Permítanme!- gritó Lockhart. Blandió su varita apuntando a la serpiente y se oyó un disparo: la serpiente, en vez de desvanecerse, se elevó en el aire unos tres metros y volvió a caer al suelo con un chasquido. Furiosa, silbando de enojo, se deslizó derecha hacia Finch-Fletchley y se irguió de nuevo, enseñando los colmillos venenosos.
-Este tipo va a terminar matando a alguien con su ineptitud- dije enojada, pues era obvio que chico Finch ahora estaba en peligro gracias a él
Pero todos nos quedamos pasmados cuando Potter comenzó a hablar con la serpiente, algo extremadamente extraño, pues no era muy común el hablar parcel, lo que espantó a muchos, pues se escuchaba como si este incitara a la serpiente a atacar, pero al analizarla me dí cuenta que la estaba logrando calmar
