Para muchos lo primordial es la línea de sangre, pero ¿Que importancia tiene eso cuando lo que prima es el amor?
Nuestra sangre no nos define como personas, ni fija nuestro destino, solo podemos ser víctimas de aquel primitivo y audaz ladrón llamad...
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ADARA
Pronto pasó otra semana, el tiempo se escurría cada vez más rápido entre los dedos de nosotros los de último año, o tal vez lo sentíamos así porque con cada día que pasaba los exámenes estaban más cerca. Después del incidente de Black la seguridad siguió tan estricta como les fue posible a los maestros, las rondas nocturnas eran un poco más alarmantes, pero no habían vuelto a ver señales de él, además no podía enfocar mi atención en eso, no después de todo lo que debía hacer.
Summer había tenido razón de cierto modo, ahora sin novio, me la pasaba aún más tiempo en la biblioteca, pero pareció ser bueno ya que mi querida amiga decidió dedicarse junto conmigo a los exámenes en un noventa porciento, esto hizo que nos vinieran muchos recuerdos de cuando éramos más pequeñas y ella repetía una y otra vez, que me crecerían hojas en el pelo de tanto estar entre libros. Ella era un gran apoyo para mi en estos momentos, como imaginaba que Leo lo estaba siendo para Marck. Seguía hablando con Leo, sin embargo entendía que no quería dejar a su mejor amigo solo después de lo que pasó, y no me molesté. Era consiente que esto estaba siendo más duro para Marck, que para mi, lo sé, suena cruel, pero después de la muerte de papá, decidí que las únicas personas que serían indispensables en mi vida son mi familia.
Los gemelos se habían vuelto más cercanos a mi desde la noche de la reunión en su sala común, hasta incluso cruzaba algunas palabras con los chicos del equipo de Quiddicth, lo cual desacreditaba la teoría de Summer de que me convertiría en una completa antisocial, digo eso ya era un avance. Me hacía bien la compañía de los chicos, después de todo ese par nunca dejaba que nos amargáramos mucho.
Estaba saliendo de clase de aritmancia cuando sentí un golpecito en mi brazo, y luego un par de voces apareciendo detrás mío
-Hola Hela- hablaron al unísono
-Hola chicos- respondí para verlos
-Que hermosa te encuentras esta mañana- dijo Fred ubicándose a mi derecha
-¿De qué hablas Gred? Ella siempre luce hermosa- dijo George ubicándose del lado contrarío
-Los conozco par de tontos, díganme que necesitan-
-¿Acaso crees que solo nos acercamos a ti por un favor?- preguntó Fred ofendido
-No siempre, sin embargo su tono los delata, hablen- dije
-George por favor- dijo Fred cediéndole la palabra a su hermano
-Me preguntaba, nos preguntábamos- se corrigió -Si vas a ir a Hogsmeade este fin de semana-
-Pues si, de hecho necesito un poco de aire fresco, además es de mis últimas salidas del año- dije
-Perfecto, entonces nos vemos en la puerta del castillo este sábado a las once treinta- dijo George
