32.0🍫

6.6K 578 249
                                    

abrumado, esa seria la perfecta palabra para describir como se sentía, era una pequeña bomba de tiempo que en cualquier momento explotaría. 

Tic, tac

Con cada una de sus emociones a flor de piel, el contacto, alfa omega,  se había deteriorado totalmente, y se culpaba totalmente, Las mañanas juntos eran incomodas, ninguno hablaba, las cenas consistían en comer mirando fijamente al plato, se habían acabado las noches en las que hablaban de sus sueños, todo era un constante vacío. El constante pesar que se sembraba al rededor del otro era agobiante para ambas partes. ambos renunciaron a todo, Solían llamarse por los mas cariñosos apodos, ahora era un seco 'Louis'.

🍫🍫🍫

La desesperación consumía a su cuerpo, el pesar no lo dejaba respirar y el simple pensamiento de Louis dejándolo con su hijo en su vientre, lo hacia llorar en su oficina constantemente. Pero ¿Como habían pasado a esto en cuestión de semanas?; Ahora se encontraba manejando hacia su 'hogar' con la vista empañada después de tanto pesar en lo feliz que había sido su relación.

Con el animo decaído y tremendas ganas de llorar entro a la gran mansion, sintiendo un gran vacío en su ser, camino esperando ver a su pareja en algún lugar de la gran casa, siendo todo en vano, Largo un suspiro, tallando sus ojerosos oculares; Se dirigió a su oficina. Que ya contaba con sabanas y mantas en un comodo sillon.

ya no dormia con Louis, ni siquiera en la misma planta.

Sentado, ya en el gran sillón de cuero, lloro. Como un niño pequeño que ha perdido a su madre, abrazaba fuertemente sus rodillas mientras sollozaba, su frustración estaba siendo descargada, por fin. No sabia si sentirse usado, molesto o simplemente seguir llorando como un pequeño niño perdido y sin rumbo; Su perdida de rumbo lo angustiaba completamente, y pensar eso lo hizo sollozar mas. 

Por favor alguien que lo ayude.

🍫🍫🍫

Escucho el abrir de la puerta, vio a su prometido cruzar por el umbral, desde lo mas alto de la escalera, lo buscaba y al no encontrarlo corrió a su constante refugio, su oficina.

Un par de diminutos pies descalzos bajo rápidamente, apurados hasta donde se encontraba Harry, pasaba el obscuro pasillo deleitándose con el masculino olor de su compañero, se pego a la gran puerta de roble, sollozos y un pesado respirar.

Harry lloraba.

empujo la puerta con toda sus fuerzas, no daba resultado, estaba trancada, Mierda.

-¡Abreme, maldita sea!.- Su garganta desgarro en el mismo momento en el que comenzo a llorar fuertemente.


Hey, Daddy HarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora