38.0🍫

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Observaba orgulloso la marca que había colocado sobre el blanquecino cuello de su amante. Sus colmillos se enterraron brutalmente sobre la piel, dándole una satisfacción a su lobo como a si mismo, Joder, que hermosa marca.

-¿amor?, ¿me permitirías reclamarte como mío otra vez?.

-¿Acaso me estás seduciendo?.- su contestación fue rápida y melosa.

-¿Lo he conseguido?.

-Ven y complace al lindo omega embarazado.

Llevaban tres días de su larga luna de miel, en la que ambos habían disfrutado una acción en particular, dejando de lado el turismo que supuestamente ansiaban realizar; Más aún no habían completado la unión de marca, ya que ambos pensaban prepararse mentalmente para este importante momento.

Ambos comenzaron besándose fogosamente, mientras se desprendían de su ropa sin cuidado alguno, cabe aclarar que Harry fue el destructor de tal ropa, troceándola duramente sin importar las consecuencias que traería esta acción más tarde.

El olor a excitación y lubricante de omega se hizo presente en la gran habitación de la que ambos gozaban.

Styles besaba rudamente el cuello de su amante; concentrándose en el área de su glándula de olor, de la que desprendía un aroma suave y rico. Creando marcas y hematomas de los cuales estaría orgulloso más tarde.

Se concentró en el placer del otro, dirigiendo sus dedos suavemente a la entrada e insertando uno de forma suave y tranquila.

-¡Oh-mi!.- los gemidos de su esposo eran simplemente bellos.

El segundo dedo entró y al igual que el primero, le sacó un largo y agudo gemido a su cónyuge; el movimiento de tijera se hizo presente, abriendo maravillosamente a su pareja.

Y le susurro al oído:

-¿podría hacerte el amor esta noche?.

Un gemido fue su respuesta y todo lo necesario para que el continuara, saco sus dedos de la ya no tan estrecha entrada, viendo hipnotizado como el lubricante se deslizaba por su muñeca hasta su antebrazo.

-amor, por favor.

Y no pudo más, se enterró cuidadosamente sobre su esposo, lentamente y sin embargo de una forma extremadamente placentera para ambos, comenzó su trabajo de forma lenta y suave, tomando a su esposo de una manera en la que jamás lo había hecho, susurrando palabras dulces que salían desde lo mas profundo de su alma.

-No tienes ni idea de cuanto te amo.

Y embistió en su punto dulce.

-Haces a papi tan inmensamente feliz, corazón.

Su omega gimió fuertemente mientras se arqueaba.

-Estoy tan enamorado de ti.

Y su pareja se corrió fuertemente sobre sus vientres, mientras el otro clavaba sus dientes en el blanquecino lugar.

-¡Oh, Alfa!.

Lamia el lugar cuidadosamente, percatándose de, que su lindo niño había caído en su espacio, dándole besos y mimos, haciéndolo Feliz

Haciendo a sus cachorros felices





Quedan dos caps

Hey, Daddy HarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora