Capítulo 36

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"Sacrificios"

Anton

Cuando tenía 6 años de edad lleve a cabo el diseño de mi primera bomba, una tan catastrófica como para causar daños irreversibles y demasiados peligrosos al igual que dañina para la salud, fue el orgullo de mi padre, el que me compenso y aplaudió dándome mi primera arma, no un arma cualquiera, una blindada y con una seguridad impactante, solo yo podía decodificar el arma, solo podía utilizarla con balas blindadas, que eran tan eficaces como traspasar un tanque de bomba, pero la forma en que pasaban el cuerpo humano era indescriptible, a cualquiera dirección que disparabas, ocasionaba un daño irreversible, cuando las balas detonaban en el cuerpo, estas explotaban, impidiendo una recuperación y es por eso que siempre fue mi arma favorita.

A los 7 años, tuve mi primer combate cuerpo a cuerpo, cuando enemigos quisieron asesinarme durmiendo, mate a tres hombres, a mano limpia, el último hombre me dejo una cicatriz en el abdomen, que jamás quise curar, era un recuerdo de lo que fui y de lo que soy y seré, a los 10 años logre hackear Venecia en solo tres horas, dando tiempo a la organización de adentrar y sacar droga, para procesarla y posteriormente mandarla a los puertos que esperaban por ella.

Cuando cumplí 15 años ya tenía un historial bastante largo, mi padre, mis tíos, mis abuelos me criaron para ser una bestia, para poner el nombre Dancomo en alto y no solo en Italia, ya había creado venenos nucleares, drogas adictivamente placenteras, ya tenía construido un centro de operaciones inteligentes, tenía puntos de puertos donde se recibía, empacaba y mandaba la droga, y perdí mi virginidad con tres mujeres hermosas y mayores que yo, que hicieron que me llenara en cada una de ellas unas 4 veces y aun así yo quería más, cuando mi padre me ordeno entrar a la milicia lo hice sin objetar.

Pero lo hice para salvar a mis hermanos del peligro, si yo entraba ellos salían ese era el trato, adentrarme al mundo sin proteger a los míos no servía de nada, necesitaba poner primero el mundo a nuestros pies y después traerlos de nuevo a nuestro lado, donde pertenecían, mis cuatro hermanos debí exiliarlos de Italia y mandarlos a Rusia, Estados Unidos, Brasil, Chile, todo por su propio bien, claro que siempre moviéndolos de lugar cada determinado tiempo.

Alessia mi única hermana, la única mujer a parte de mi madre que jure proteger con mi vida, Alonzo, Alessandro, Adriano y Angelo, son mis hermanos, Alessandro y Adriano mis hermanos mayores, luego estoy yo y Angelo, para seguir Alonzo y Alessia, cuando ellos abandonaron tierra italiana yo me adentre a la milicia, entregando mi vida a ser militar con el único fin de saber cómo y dónde atacar al llegar el momento.

Mi padre el gran Pietro Dancomo solia decir que un líder no es el primogénito siempre, un líder nace siendo uno, en nuestra familia se dice que un líder Dancomo se caracteriza siempre por algo en él, es difícil explicar cómo saber quién es líder, mi padre me decía que algun día lo descubriría y lo entendería, Alessandro y Adriano debían ser los siguientes lideres Dancomo pero jamás llegaron a entrenar y saber un mínimo de lo que yo tengo conocimiento.

Cuando llegue a los 18 años de edad diseñe mi nuevo modelo, no era una droga, pero estaba creada de una, fue creada de mis conocimientos, de mis aprendizajes y de mi imaginación, solo pensé que algun día nos serviría.

Sopravvivenza (Sobrevivencia)

Un medicamento que diseñé para los míos y mis tropas, jamás la di a conocer, y nadie jamás supo cómo es que mis soldados siempre salían heridos sin embargo sus hemorragias cesaban y podían llevarlos a cirugía sin ningún problema, cuando mi hermano Alessandro lo encontraron los gold, tuve que hacer un movimiento contradictorio a todo lo que me había planteado.

Tuve que asesinar a los Mackenzie verdaderos, en ese entonces los Brown comenzaron a buscar socios para su organización, ya que esta comenzaba a crecer considerablemente, llevándolos a necesitar más ayuda para su poder.

Desgracia Ardiente (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora