-GLASS-(Julian Casablancas)

CAPITULO 7.

Capítulo VII

Íbamos en el camino a Londres, solo que ahora en autobús. Decidí que era buena idea dormir, ya que había terminado otro encargo de Ryan y hasta ahora no me dijo nada más. No tuve noción del tiempo. Cuando desperté, bostecé y volteé al asiento a mi lado para encontrarme con Julian observándome. Me dio un buen susto.

- ¡Dios mío! ¡Casi me matas de un infarto!- le reclamé

- ¿Por qué no te acostarías conmigo?-preguntó ¡De nuevo! ¿Esto era una jodida broma? ¿Enserio? Volteé a los asientos para confirmar que los chicos no estaban escuchando. Estaban todos dormidos.

- No, veo el por qué hacerlo.-conteste. Ojala y se calle.

- Vamos, yo sé que lo harías.-contesto sonriendo.

- ¿Por qué te importa tanto?

- Solo porque nadie, ninguna mujer me ha rechazado.-comento con una sonrisa victoriosa

- Soy la primera.

- Entonces, ¿con quién si te acostarías?-cuestionó, aun viéndome y demasiado cerca de mí. Me asomé de nuevo y los chicos seguían durmiendo.

- Con alguien que no todos los días este con una chica diferente. Apuesto a que ni siquiera sabes sus nombres.-sonreí. Se quedó un poco pensativo, gané esta vez.

- ¿Para qué saber su nombre, si solo son para una noche?-comentó

¿Tan alocada era su vida? ¿Cómo era posible que pensara así?

- Será, que no tomas a ninguna de ellas en serio.-murmuré un poco irritada.

- Eso suena feo.-frunció el ceño.-Tampoco ellas me toman importancia.-susurró a mi oído. ¿De qué hablaba? Apuesto a que muchas mujeres quisieran estar a su lado y él es el que no les da importancia, debe de estar jugando.

- ¿Porque lo dices?-pregunté desconcertada

- ¿Por qué no decirlo?-dijo. No me gustaba que me respondieran a mi pregunta, con otra pregunta. Nuestras miradas se cruzaron un momento, y surgió un incómodo silencio. Puedo jurar que lo vi dolido y afectado por su afirmación. De repente se paró y se fue sin más, al asiento del frente del autobús.

Espero que no siga molestando todo el viaje con eso. Vaya que era egocéntrico.

Un segundo después, de la nada llegó Nick a sentarse a mi lado. Su cara se veía fresca como una gota de agua. Se veía realmente descansado.

-Juliet, ¿ya has ido a Londres?-preguntó curioso y negué con la cabeza.

- Tampoco yo.-sonrió-Espero y tengamos tiempo de ir a un restaurante y pasearnos.

-Yo también

Nick es muy amable, algo dulce y muy guapo, pero realmente no podía verlo como algo más que mi amigo. ¿Tendría novia? No lo sé aún. Pero no lo dudo.

Llegamos a nuestro destino y bajamos del autobús. Fuimos al nuevo Hotel en que nos hospedariamos, cada quien dejo sus cosas. Esta vez cada quien tenía su propia habitación. En lo que esperábamos la hora de irnos hice algunas asignaciones de Ryan. Cuando acabe fui a su habitación a confirmar unas cuantas cosas.

- Oh Juliet eres muy puntual ¿Sabes? Eres muy asombrosa en tu trabajo.-comentó cuando terminamos de arreglar cuentas.

- Gracias Ryan- respondí sonriendo.

- Juliet, sé que no es tu trabajo, y ni debería pedírtelo, pero... ¿Podrías checar a Julian hoy en el concierto?-pidió Ryan con una mueca. ¡Lo que me faltaba!

- ¿Por qué?-pregunté

- Es que ahora que cada uno de nosotros tiene habitación, temo que haga de las suyas, y mañana tienen una entrevista. Necesito a los cinco bien para mañana y pues Julian es Julian.-sonrió.

Pensé durante un momento. Solo aceptare porque mañana es la entrevista y es muy importante para los chicos.

- Este bien-resoplé.

Llegó la noche del concierto. Había más gente que en España. La gente estaba de igual manera muy eufórica, se sabían las canciones. Esto es grandioso. Estoy muy feliz por ellos.

Cuando hicieron una pausa, una de las chicas del público, rubia y algo alta, subió su blusa y mostró sus atributos, en los cuales decía "Julian, I Love you" con marcador negro. Muy patética, no tiene dignidad. Volteo a ver a Julian y lo veo sonreír de oreja a oreja. Parece que ya tiene a su chica de hoy. Pero es una pena que yo le tenga otros planes.

- Lo que faltaba.-exclamó Ryan e hizo una mueca.

Acabaron, y todos los chicos, estaban con nosotros.

- Voy por un trago.-dijo Julian parándose de la mesa

- No, aquí hay.-contesto Ryan, determinado a mantener a Julian en la mira.

- Necesito fumar un poco.-insistió

- Voy contigo, también necesito.-comenté, y Ryan sonrió aliviado

Salí con Julian, a la parte trasera del bar.

- ¿Creen que iba a ir con la Rubia?-preguntó Julian, sacando un cigarrillo. Me limité a desviar la mirada.

- Vamos, es lo que pensamos. Te mostró su cariño.-dije con énfasis al fin mirándolo, lo que le hizo gracia. Me ofreció un cigarro y lo acepté.

- Maldita sea, no soy un niño. Sé que mañana tenemos una entrevista. Sé que no debía hacer de las mías hoy.-dijo serio y soltó el humo del tabaco.

- ¿Estás seguro?-pregunte y asintió

- Ryan debería confiar un poco en mí, como lo hace con los demás.-musitó.

Tenía razón, debería Ryan confiar en él, como lo hace con los demás chicos.

- Apuesto que la Rubia debe estar buscándote.-bromeé y sonrió de nuevo.

- No me gustan mucho las rubias.-respondió con aquella sonrisa de inocencia que derretiría a cualquier chica. Decidió ir a sentarse en la pequeña banqueta de al lado. Me senté a un lado de él. Lo que siguió fue un silencio que no se sentía incómodo. Era agradable. Todo iba bien, mientras no sacara el estúpido tema de por qué no me acuesto con él.

--GRACIAS POR LEER--
Espero y les guste, este capítulo, un poquito mas largo.