Estaba sola, Nathan me dio mi espacio y dejo que me fuera sin su compañía.
Me metí en un salón de clases donde no había alumnos, necesitaba un lugar donde llorar y que nadie me viera, escogí el salón de autoestima, rápidamente los recuerdos inundaron mi mente, desde esa vez no he vuelto a ver a Sofía.
Me fui a la parte de atrás y me deslice por la pared hasta el suelo. Estaba tan agotada de los problemas, cuando me encontraba bien algo llegaba y lo arruinaba sólo Dios sabe porque, a lo mejor yo no nací para ser feliz. Tal vez a lo mejor si nací para ser feliz pero mi felicidad se destruyo desde que Daemon llego. ¿Qué digo? Maldita mente toda llena de desiluciones, yo creo mi propia felicidad y fin, nadie me va a arruinar la vida mucho menos Daemon.
-¿Llorando?-escuche una voz y levanté la cabeza.
-¿Qué haces aquí?-dije.
-Es el peor lugar para esconderse-río.
-Déjame en paz-dije.Entonces Daemon se acercó hasta mi, se puso un momento enfrente de mi y después se deslizó en la pared al lado mío hasta caer en el suelo. Lo mire por reojo y vi que su mirada estaba perdida mientras miraba enfrente.
-Daemon-susurro.
-Carrie-susurre y luego me reí-¿Porqué...porque decimos nuestro nombre?.
-¿No te has puedo a pensar lo que tu nombre me provoca?-río-Creo que no.De hecho si me había puesto a pensarlo, ya hasta había sacado conclusiones.
-Explícame-dije.
-Cada vez que pronuncias tu nombre con tu labios hay algo que me pasa, no lo he descubierto pero creo que es un...
-Escalofrío-termine por el.
-¿También lo sientes?-me miro.
-Si-asentí.
-Carrie-suspiro-¿No quieres volver con esta tonta relación falsa?.
-Ruegame-reí-Quiero verte de rodillas.El suspiro, pero se puso enfrente de mi y de rodillas, pensaba que no iba a hacerlo pero al parecer estaba muy equivocada.
-Carrie Steele-me sujetó la mano-¿Quisieras ser novia de este bombón?.
-Tonto-le pegue en la cabeza-¡Si!-me lance a sus brazos y caí encima de el-Recuerda que sólo estoy fingiendo.
-Recuerda que aún me debes un golpe-cerró los ojos esperando el golpe-¿Porqué tuve que recordártelo?.
-Ya te arrodillaste así que ese era un golpe para ti-me encogí de hombros.
-Si que fue un duro golpe-río.-Hey-Nathan me llamo mientras yo almorzaba una manzana.
-¿Qué quieres?-le dije mientras el se sentaba enfrente de mi.
-No te preocupes, tu mereces a alguien mejor, no alguien que te este engañando-me sujetó la mano.
-¿Cómo puedes ser tan idiota?-me zafe de su agarre-Era su hermana Nathan.
-Soy un imbecil-Negó con la cabeza.
-También lo pensé-le lance la manzana en la cara, el la tomo y le dio un mordisco-Te extraño-le dije.
-¿Qué dices?-se atragantó con la manzana.
-Me estoy volviendo una maldita cursi, pero no sabes como extraño la amistad que llevábamos-suspire-Ya lo dije y es la última vez.
-También te extraño, me siento tan sólo, tu ya no me hablabas y Ron, bueno ni se diga-inhaló profundamente-El único que me quedaba es Tai, pero es que ese chico es tan maldita mente raro.
-Nathan-dije.
-Luego aveces pienso que ni siquiera me pone atención, es muy extraño no se de dónde venga ese chico pero...
-Nathan-volví a decir.
-Déjame terminar Carrie, aparte está bien alto, siento como si me fuera a aplastar y...esta detrás de mi ¿cierto?-dijo Nathan nervioso y yo asentí.Tai puso una mano en el hombro de Nathan y se sentó a un lado de el.
-¿Eso piensas de mi?-dijo Tai.
-No Tai, era broma-Nathan trago saliva.
-Tu eres un gran idiota-Tai le revolvió el cabello y después le pego en el estómago, fue un ligero golpe nada de que preocuparse-Denada.
Comenzamos a reír de un modo extraño pero mi sonrisa desapareció al ver a Ron parado enfrente de nosotros. Mi humor comenzó a decaer y comencé a ponerme extremadamente furiosa.
-¿Puedo sentarme?-dijo Ron.Nathan se quedo boquiabierto y después asintió, mire furiosa a Nathan y el sólo se encogió de hombros.
-Me tengo que ir-dije y antes de que me levantara Ron me tomo de la mano.
-Carrie-suspiro Ron-¿Me dejarías explicártelo?.
-Anda-me libere de su agarre y levanté los brazos furiosa-¡Suéltalo! Di porqué te besaste con mi madre.
-Nosotros nos vamos-dijo Nathan tomando de la chamarra a Tai.
-Nathan-dije.
-Adiós Carrie-dijo Nathan llevándose a Tai con el tan apresuradamente
-Dime-mire a Ron esperando respuestas.
-Me-soltó una ligera risa.
-Me voy-lo mire hartada.
-No Carrie, lo siento-tomo una fuerte respiración-Sólo trataba de que recordarás cuando yo decía *me* y tu te enojabas tanto que llegabas a golpearme.
-Aún puedo golpearte-lo agarre de su camisa y después lo solté con brusquedad haciendo que su silla se meciera.
-Escúchame-asentí-¿Recuerdas la vez en la que nos emborrachamos en tu casa?.
-¿Cuál de todas?-rodé los ojos.
-La vez en la que le pintamos un mechón de cabello negro a tu hermana-dijo riendo.
-¡Ah ya me acorde!-reí-Prosigue-me puse de nuevo sería.
-Bueno, esa vez tu y Nathan se quedaron jugando videojuegos en tu cuarto y yo me salí a fumar un cigarrillo ¿recuerdas?-asentí-Estaba tan borracho que estuve apunto de caer de las escaleras y de pronto mire a tu madre que me decía que tuviera cuidado, así que me sentó en su sofá morado.Mi madre tenía un sofá morado muy cómodo y sólo era para ella, nunca dejaba que ninguna de nosotras sus hijas se sentará en el y ahora resulta que si dejo que se sentará Ron.
-Comencé a decir cosas sin sentido...
-Siempre.
-Si, siempre-rodó los ojos-Sigamos, después tu madre comenzó a decir cosas extrañas que no recuerdo, luego comenzó a llorar y no supe que hacer más que abrazarla, murmure Carrie y la bese.
-¿Carrie?-fruncí el ceño.
-Estaba enamorado de ti-agacho la cabeza avergonzado.
-¡Oh por Dios!-di una carcajada-¿Tu? ¿Enamorado de mi? Ya no ¿cierto?.
-¿Qué?-se rio-¡No!.
-Que bueno-suspire aliviada-¿Cuándo fue eso?.
-Pues fue hace mucho tiempo,entonces ¿Me perdonas?-me suplico Ron.
-Lo pensare-dije de forma orgullosa.Le guiñe un ojo, el sonrió de una manera tan sincera que supe que esa era la sonrisa verdadera de Ron, no aquella sonrisa hipócrita e incómoda si no que esta era abierta y linda. Me despedí de el con un saludo de mano y me fui.
Daemon estaba apoyado en una cancha de fútbol mientras hablaba con una chica. Estaba en las canchas de fútbol buscando a Sofía, lo se, el peor lugar para buscarla pero mi instinto me dijo que era porrista. Me gire un poco más de lado para poder mirar a la chica con la cual estaba Daemon y descubrí que era Sam ¿Sam en la escuela? ¿Qué hace aquí? Creo que las razones son obvias.
-¡Hola, tórtolos!-di pequeños saltos llegando hasta ellos dos.
-¡Carrie!-llego Sam y me abrazo.
-¿Algo cambio entre nosotras dos?-dije y me miro con el ceño fruncido-Bueno, es que antes queríamos matarnos y ahora me abrazas.
-Me caes bien-me guiñó un ojo.
-¡No!-grito Daemon apartando a Sam de mi lado.
-¿Qué te pasa?-pregunto Sam.
-Eso del guiñó es de ella, puede matarte si se lo copeas.
-¿Ah si?-dijo Sam y comenzó a guiñar el ojo pero esta vez como si tuviera un tic.
-Ya basta, chica tic-dije riéndome.
-Okay,okay-suspiro y después miro su reloj de mano-Demonios, ya es muy tarde, tengo que irme.
-Adiós-me despedí chocando nuestras manos.
-Adiós-le dijo Daemon dándole un beso en la mejilla-Cuídate mucho.
-¡Sabes que no!-Sam tomo su mochila y se fue trotando.Sam parecía una chica llena de vida, no se veía aburrida y amargada como aveces sentía que me veía yo, ella era divertida y alegre de manera que podía caerte muy bien con apenas conocerla. Pero había algo en sus ojos que le hacia la mirada más profunda y abrumadora, en el momento que la veía estaba apunto de adivinarlo pero me era imposible ya que era fácil que ella ocultará aquellas emociones que se reflejaban en sus ojos. Pero por fin pude hacerlo hace un momento, lo único que logre ver fue dolor y estrés. Me di cuenta de algo y supe que no siempre tenía esa sonrisa que le iluminaba la cara.
Daemon me miro mientras yo seguía inundando mi mente de pensamientos sin sentido. Levanté la mirada y le sonreí.
-¿Me espiabas?.
-¿Qué?-me reí-¿Porqué querría hacerlo?.
-A mi no me engañas-me apunto con su dedo carcajeando se.
-Oye-paro de reír y me puso atención-¡Cuidado un balón!.
Daemon se asusto mucho y se tapó la cabeza con sus manos mientras se tiraba al suelo y me tomaba de las manos jalándome junto con el. Caí al lado de Daemon mientras el me abrazaba cerrando los ojos.
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Conociendo a chica mala ;)
Genç KurguNadie sería capaz de robarme mi lugar en la escuela, lo estaría pensando dos veces antes de hacerlo. Al parecer a este chico Daemon no le importa que destroce su cara de niño bonito. ¿Esta será una pelea por ver quién se queda con el lugar de "chic...