Unas horas más tarde nos encontrábamos en un auto que había mandado la hermana de Emily, ya que ella no pudo venir, lo bueno es que el hotel frente a la playa así que trataré de averiguar lo más que pueda. Al llegar Stephanie estaba esperándonos en la entrada, bajé del auto ayudando a Emily, ella se fue corriendo a abrazarla y sonreí levemente acercándome a ambas.
-Hola Matt, me da gusto verte después de tantos años. —el tono de su voz creo que me dice todo lo contrario. — ¿Y tu hermano? Creí que vendría a la boda.
-Lo mismo digo...es un placer verte de nuevo, Stephanie. —estreché su mano y besé su mejilla. —si, efectivamente vendrá a la boda, pero él llegó antes que yo, así que lo veré más tarde.
-Ya veo...dile que si necesita hospedaje puede quedarse aquí, todos los invitados de la boda serán bienvenidos y obviamente sin costo alguno. —asiento despacio mordiendo mi labio, creo que ya recuerdo porque no la toleraba.
-Se está quedando en casa de su amigo, así que gracias por tu invitación. —miré a Emily dudoso, solo espero no lo tome de otra manera. — ¿Te parece si vamos a la habitación para cambiarnos e ir a la playa? Para dar un paseo o comer algo.
-Sí, me encantaría, muero de hambre, ¿nos llevas a nuestra habitación, Steph? —me sujetó de la mano y ambos caminamos detrás de su hermana. Preferí mantener callado dejándolas platicar mientras subíamos a la habitación, aunque Stephanie solo hablaba de todo lo que iba a hacer de la boda y dejando muy claro lo...generosa que es.
-Llegamos...la mejor suite para la mejor pareja, yo los dejo que aún debo de terminar de hacer las llamadas para confirmar los invitados, disfruten el hotel, la playa y sobre todo la cama. —dijo antes de irse...dios si Emily es irritante, ella le gana y por mucho.
-Perdona por eso, insistí en que nos dieran habitaciones separadas, pero se negó, solo hasta un día antes de la boda dormiré en otra. —dijo entrando a la habitación y la miré asintiendo.
-No te preocupes dormiré en el sofá o estaba pensando en pasar un poco más de tiempo con mi hermano, ya sebes...porque ha pasado demasiado tiempo desde la última vez que convivimos. —una mentira más no va a afectar en nada...o eso creo.
-Lo entiendo, yo también quisiera pasar más tiempo con mi hermana, pero el trabajo no se lo permite. —ella fue a abrir la puerta dejando pasar a un chico con nuestras maletas y cuando se fue se acercó a mi sonriendo. — ¿A dónde iremos primero? Digo para saber cómo vestirme.
-Podríamos ir a nadar un rato en la playa y después ir a comer, ¿te gustaría hacer otra cosa? —tomé una de mis maletas sacando un short, sandalias y una playera. —cámbiate tú en el baño.
-Eso está bien, me encanta. —dijo mientras sacaba sus cosas y corrió al baño. —te daré unos minutos para que tú te cambies. —asentí cambiándome de ropa en cuanto entro al baño. Cuando ambos estuvimos listos salimos del hotel y caminamos hasta alejarnos de todas las personas e incluso del hotel, ya que quería hablar con ella para aclarar esto y no se lo tome de otra manera. —me encanta venir aquí...me recuerda a la primera vez que nos hicimos novios, aunque claro no fue aquí, pero el mar me hace pensar en eso, pero da igual. —sacó de su bolso una toalla colocándola en la arena y me miró sonriendo. —cerca de aquí rentan tablas de surf, iré por una, ¿también quieres una?
-Sí...lo recuerdo, estábamos muy jóvenes. —fruncí mi ceño mirando hacia un grupo de chicos que estaban riendo mientras subían las escaleras. —no...digo sí, pero no te preocupes, tu acomódate aquí, yo voy por ellas. —tomé mi billetera y caminé acercándome a esos chicos los cuales cruzaron la calle...mie*da son los "hermanos de Allison" o por lo menos tres de ellos. Los comencé a seguir a una distancia prudente hasta que llegamos a una casa de un piso, aunque bastante grande, esperé a que entraran para acercarme por la parte de atrás y miré por una ventana que daba a la cocina, pero no podía ver nada más, seguí caminando hasta con cuidado de no hacer ruido, pero caí al suelo, mordí mi labio con fuerza mirando con que me había tropezado. — ¿Qué es esto? —fruncí mi ceño levantando la madera y encontrándome con una puerta que supongo da a algún sótano...Matt si te encuentran estás en problemas. Encendí la lámpara de mi celular bajando lentamente, mi respiración se agitó en cada paso que daba hasta que llegué a otra puerta, la abrí entrando a una habitación la cual me dio escalofríos al recordar lo que me pasó. —jod*r... ¿Señor Coleman?
-¡Matt! ¿Qué haces aquí? —lo miré confundido cómo él a mí, se encontraba atado a una silla. —si viniste a sacarme por favor hazlo ahora o te pueden atrapar.
-¿Qué está pasando? ¿Por qué lo tienen aquí? —me acerqué rápido tomando un cuchillo de la mesa y me acerqué a él para así cortar las cintas en sus muñecas. — ¿Se encuentra bien? ¿Le hicieron daño?
-Te cuento en cuanto ambos estemos lejos de aquí. —al desatarlo salimos con cuidado del sótano. Al estar afuera escuchamos voces acercarse así que corrimos lo más rápido que pudimos hasta alejarnos unas cuadras. — ¿Cómo sabías que estaba allí?
-No lo sabía, cuando vi a los chicos los seguí porque pensé que...bueno no importa, bajé al sótano por curiosidad, pero ¿qué hacía allí? —pregunté respirando agitado aun sintiendo la adrenalina por mi cuerpo.
-Desde la última vez que nos vimos empecé a hacer algunos viajes hasta que encontré algunas pistas, vine aquí hace un mes y fui al departamento de Allison, cuando salí me subieron a una camioneta. —lo miré al escuchar lo que dijo y seguimos caminando hasta perdernos entre la gente. —me interrogaron, pero no dije nada, así que me mantuvieron encerrado por entrar a la casa de unos agentes acusándome de querer agredirlos y tentar contra el gobierno.
-Pero...ese lugar estaba solo, ¿no? —él asintió despacio saqué mi billetera entregándole dinero. —a partir de ahora yo me encargaré de esto, le pido una disculpa e igual me encargaré de que ellos no vuelvan a molestarlo. —miré a mi alrededor y al ver un taxi le hice la parada. —cuando llegué al hotel solo diga que es invitado de mi boda, le darán una habitación y puede irse cuando desee. —me acerqué a la ventana del copiloto dándole la dirección y en cuanto subió al auto llamé al hotel dándole indicaciones de que lo dieran una habitación. —No entiendo que está pasando, pero lo voy a averiguar ahora mismo... ¡Emily! —bufé al recordar que la dejé en la playa y caminé hacia allá no sin antes pasar a comprar dos tablas de surf junto con algunas cosas más.
Iba caminando por la banqueta hasta que escuché que me gritaron y fruncí mi ceño buscando con la mirada de dónde provenía hasta encontrarme con un rostro muy familiar. — ¿Tú que haces aquí? —sonreí al ver a mi hermano.
-Quede de ver a una amiga, pero me plantó porque tenía una emergencia o algo así. —dijo mi hermano cuando se acercó a mí y me dio un abrazo el cual correspondí.
-Ya veo...espero este todo bien, yo iba a la playa, Emily me está esperando, pero acompáñame estoy seguro de que le hará feliz verte. —asintió caminando a mi lado.
-Gracias, pero dime hermanito, ¿estás seguro de hacer esto? —murmuró tomando una de la tabla y le di las gracias e hice una mueca. —no te ves muy alegre.
-Si...ya el sábado será la boda, no la dejaré faltando una semana. —lo escuché reír y rodé mis ojos. — ¿Qué es tan gracioso?
-Bueno qué tal si el día de la boda te arrepientes y sales huyendo, será gracioso si ahora en lugar de la novia sea el novio el que huya. —sonreí negando despacio y al llegar al lugar en donde se suponía estaba Emily. —oh...tal vez ella huyó antes de la boda.
-Claro que no, ella no haría algo así. —se encogió de hombros y al ver que ni ella ni las cosas estaban decidí llamarle, pero entraba a buzón. El miedo y la culpa se apoderaron de mi... ¿Qué tal si vieron que saqué a Coleman del sótano y ahora tienen a Emily?
-Hermano tranquilo, tal vez se fue al hotel porque se le olvido algo. —dijo palmeando mi hombro y lo miré nervioso. —vamos al hotel, si no está te ayudo a buscarla.
-Estábien, vamos. —caminé mirando a todos lados para ver si de causalidad la veía,pero durante el camino no la encontré. Al llegar al hotel pregunté en larecepción si la habían visto pero cuando dijeron que no había entrado el pánicose apoderó de mí y corrí al ascensor para ir a la suite con Thomas detrás demí...espero que ellos no la tengan.
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Atado a ti por siempre.
RomanceMatthew Carpenter es un exitoso empresario que perdió a su esposa Allison, una agente encubierta de la CIA, que murió por salvarle la vida a Matt. Para salvar la reputación de su empresa, su padre lo obliga a casarse con Emily, su ex novia de la uni...