Atado a ti por siempre.

CAPÍTULO 61: Nuevo hogar, nuevos problemas.

Al día siguiente de la fiesta Matt me llevó a comprar la casa, al principio se negó a que yo le diera una parte, pero no le quedó de otra que aceptar. Ya han pasado casi tres semanas desde que estamos viviendo juntos en esa casa y ha sido un poco complicado porque Mateo ha estado algo inquieto, Denise casi todas las noches duerme con nosotros abrazando a Matt, pero a mí me patea, lo peor es al cuidarla en las tardes cuando sale de la escuela, hace berrinches todo el tiempo hasta que Matt llega de trabajar. Por suerte ahora está en la escuela, aunque no falta mucho para que llegue y empiece a lloriquear, es más fácil lidiar con un asesino que con Denise, en fin, fruncí mi ceño al escuchar mi celular.

-Hola cariño, necesito que me hagas un favor. —dijo Matt en cuanto conteste la llamada. —tengo una junta y necesito que vayas por Denise, ¿puedes hacerlo? Ya le avisé a maestra que vas a recogerla.

-Está bien, no te preocupes yo iré por ella, igual Carmen está aquí así que se puede quedar con Mateo unos minutos. —hablé dándole un golpe en la pierna a Carmen cuando ella se rio. —te mandaré un mensaje en cuanto esté con ella. —le colgué y me levanté de la cama colocándome mis zapatos. —no tardaré, llama si necesitas algo.

-Necesito una nieve, no importa el sabor. —asentí tomando las llaves del auto. —estaremos bien, anda ve porque luego se hará tarde. —salí de la casa rápido y subí al auto conduciendo hacia la escuela.

No tarde mucho en llegar y al estacionarme bajé del auto recargándome en el mientras esperaba a que salieran. Buscaba con la mirada a Denise mientras los niños salían, al verla fruncí mi ceño cuando unos niños la aventaron al suelo pateándola.

-¡Hey! Malditos mocosos. —me acerqué rápido empujándolos para levantar a Denise. — ¿estás bien? Jod*r tu mejilla. —me giré al sentir un empujón en mi hombro. — ¿usted es la madre de esos engendros?

-¿Disculpa? ¿cómo acabas de llamarlos? —preguntó arrogante. — ¿quién eres tú? ¿eres madre de algún niño o...? —me miró de pies a cabeza haciendo una mueca. — ¿o solo una vaga corriente?

-¿Y usted es la madre de esos engendros o...una perra prepotente? —no esperaba que ella me diera una cachetada haciendo que esos mocosos se rieran. —no debió hacer eso. —apreté mi puño y golpeé su cara con fuerza. —la corriente es usted por pelear frente a unos niños. —iba a darle otro golpe, pero sentir la mano de Denise apretar mi brazo y cuando vi que la señora iba a golpearme de nuevo así que sujeté su muñeca doblándola. —ya basta señora...está haciendo un escándalo —la solté al ver a un señor regordete en traje acercarse

-Señoras a mi oficina. —él ordenó y sujeté la mano de Denise siguiéndolo, puede que le haya metido el pie la vieja haciéndola cuando pasó primero que yo. —por favor compórtense. —al llegar a la oficina hicieron que Denise se quedará afuera. —siéntense por favor. —me senté en una de las sillas cruzándome de brazos. —explíquenme que fue lo que pasó. —apenas y el señor terminó de hablar y la señora loca comenzó a gritar tonterías.

*Narra Matt*

Las miradas y murmullos se hicieron evidentes en cuanto puse un pie en el colegio, estaba a mitad de la junta cuando recibí una llamada del director y tuve que dejar todo de inmediato para venir a ver qué pasó. Me acerqué a la secretaria mirando a Denise sentada con su cabeza agachada y escuché unos gritos que venían de la oficina del director, claramente unos son de Anahí.

-No tardaré. —le dije a Denise antes de entrar a la oficina y los gritos se hicieron más fuertes hasta que Anahí me miró sorprendida. —buenas tardes director... ¿a qué se debe su llamada? ¿por qué mi prometida estaba discutiendo con esta señora? —pregunté apoyando mis manos en los hombros de Anahí la cual estaba muy tensa.