56. Fin del rompecabezas.

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Narra Narradora

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Narra Narradora

Sydney se acercó al cuerpo desfigurando de Andrew, estaba temblando. Ni siquiera vio a los chicos que estaban ahí con los dientes en un frasco.

—Joder... Andrew, tú... —Sentía como su cuerpo quería vomitar al solo verlo. Pero era valiente, tenían que deshacerse de su cuerpo.

—¿Donde lo quemaremos? —Joe lo pensó, sabía que no podía hacerlo en el mismo bosque donde cremo a Benji, ni siquiera donde enterró a Ron.

—¿Y si lo partimos en pedazos y lo repartimos por todo Nueva York?

—¿Que?

—Ethan, estas jodidamente loco si quieres hacer eso. ¿Y si lo encuentran? —Sydney lo vio asustada, pero este negó.

—Lo repartiremos en lugares donde jamás lo encontrarán.

—Joe... No me digas que hablas en serio de hacer esto. —Este le miró, sabia que era una locura pero era un buen plan.

—¿Donde tienes pensado hacerlo?

—Cerdos... —Fue lo único que pudo decir, viendo hacia la nada.

—El mar también puede ser una buena opción... —Sydney los vio a ambos, nunca creyó escuchar tal cosa.

—No podemos hacer esto juntos, Joe... Vamos, podemos hacer algo más.

—Un pantano también suena bien. —Ethan se acercó a Sydney, le acarició la mejilla. Ninguno quería hacer eso, pero debían hacerlo o ir a la cárcel.

—Yo... No puedo hacerlo, es decir... Es una locura. —Se alejo de el, yendo al cuerpo de Andrew.

—Es la única forma de salir de todo esto Sydney

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—Es la única forma de salir de todo esto Sydney. Si tienes más ideas, estamos dispuestos a escucharlas.

Silencio, no dijo ni una sola palabra y solo limpio sus lágrimas, alejándose de el cuerpo.

—¿Como le haremos? —Los vio a los dos, estaban seguro que debían hacerlo por separado ya que sería muy sospechoso.

—Puedo llevarlo a los cerdos ahora mismo, ya saben. Nadie sospecharía al lugar donde iría.

𝐃𝐑𝐎𝐖𝐍 | Joe Goldberg Donde viven las historias. Descúbrelo ahora