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Cassidy

Tomo mis sienes con histeria mientras mantengo la cabeza abajo recapacitando todo lo que pasó en menos de una hora. Estuve apunto de tirarme por una montaña, Jayden me salvó, otra vez, la vida y para rematar me trajo a un laboratorio fuera del perímetro donde la doctora me explico algo imposible.

—A ver si entendí... — levanto la mirada hacia la mujer, Jayden y Louise —¿ Lo que me pasa no es un trauma ni una secuela de mi muerte sino que al volver me traje un demonio torturador conmigo ?

—Exacto, ellos se suelen presentar en tus sueños para alimentar tus miedos sin que tu lo sepas y siempre llevan trajes blancos — la científica me ayuda a entender todo otra vez —Me sorprende que tu amiga hipnopata no supiera lo que estaba pasando...

—Camelia no hurga en mis sueños a menos de que yo lo autorize — doy otra vuelta por el lugar para asimilarlo otra vez. Es un pequeño laboratorio subterráneo que hay a las afueras del perímetro, por que estemos aquí ilegalmente —¿ Cómo me deshago de él ? Porque aunque no lo crean, no es muy lindo tener esto en la cabeza.

—Sé que puede ser estresante y doloroso, pero nada duele más que el tratamiento para esto — la doc me mira con una leve sonrisita.

—Mejor dicho, es un infierno — Louise se cruza de brazos con sarcasmo en su mirada.

A lo que tengo entendido ella también tuvo uno de estos demonios torturadores en su cerebro, al parecer cuando tenía diez años se ahogó en un lago engañoso de su pueblo y cuando estaba apunto de entrar al otro lado, lograron revivirla. Esto solo trajo más problemas y casi toma la misma decisión que yo, pero Jayden encontró a la doc y lograron salvarla. Lo que no sé aún es como.

—Tenemos que matarte y volver a traerte... — al momento que la doc suelta eso me giro hacia ella con incredulidad.

—¿ Está diciéndome que lo que me metió en este embrollo es lo que me va a sacar ?, excelente idea — me cruzo de brazos obviamente negándome a volver a morir, no es una experiencia muy agradable. Al rato de escuchar como ella se van, siento las manos de Jayden en mis muslos cuando se arrodilla frente a mi —Quieren que muera otra vez ¿ puedes creerlo ?

—Aunque no haya muerto aún, sé que puede ser muy doloroso y para nada agradable, — agradezco al de arriba porque él si entienda de lo que hablo —Pero es la única manera de ayudarte.

—No quiero morir otra vez... — hablo con el corazón en mi mano. No soy tan abierta sobre mis pensamientos y mis sentimientos así que esto es un gran avance —Fue horrible... los gritos de agonía, la oscuridad... querrer ayudar a las almas y lo poder verlas. Puede que para ustedes hayan sido minutos sin mi, pero para mi fueron como horas y se sintieron como años. No quiero volver allí...

—Y no quiero obligarte a hacerlo, pero quiero que tengas en cuenta que esto no va a mejorar. Ese demonio no se cansará hasta verte muerta y así conseguir tu alma — pone su mano sobre mi mejilla y al instante empiezo a sentirme más calmada.

—Está bien, lo haré — se levanta y me besa antes de que las chicas entren —Pero prometanme que no estaré tanto tiempo allí.

—Pondré un cronometro de dos minutos, solo deberás entras y matarlo, luego te resucitaremos — la doc me empieza a colocar algunos cables cuando me acuesto sobre la camilla. Me conecta a un suero y a una monitor de ignorarlo vitales —Te voy a inyectar con este veneno, así que no sentirás nada y cuando sea hora de volver te aplicare el suero.

—Lo hace sonar tan fácil que olvida la mejor parte ¿ cómo voy a vencer a un demonio en su propio reino ? — me colocar el último cable en la nuca y luego empieza a poner el cronómetro.

Él me eligió Donde viven las historias. Descúbrelo ahora