21.- Clientes

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- Qué alegría verte, Kurapika - saludó la hija del señor Nostrade llevando en sus manos una carpeta negra - veo que ya te instalaste.

- Neón, te agradezco mucho la recomendación pero, ¿porqué estoy en este puesto? recién anoche te confirmé mi asistencia. - dijo aún confundido con la noticia.

- Soy la secretaria de mi padre, además, él ya tenía previsto todo esto, aunque si aceptabas trabajar desde casa entenderíamos que no deseabas esa responsabilidad - explicó entregándole la carpeta.

- ¿Qué es esto? - preguntó leyendo la etiqueta en la portada. - ¿Clientes literarios?

- Mi padre invierte en diferentes negocios, uno de ellos se lo inspiraste tú, nos afiliamos con diferentes sectores de escritura y arte. Ya debo irme, por hoy termina de instalarte y lee los documentos, después podrás encargarte de mantener una buena comunicación con nuestros clientes.

La chica Nostrade salió dejando a Kurapika con muchas preguntas.

- Esperaba al menos recibir capacitación para esto, ¿qué se supone que hace un vicepresidente en esta empresa? - tomó asiento en su escritorio para revisar los archivos que le confiaron, dándose cuenta de importantes que eran.

Lista de escritores afiliados.

Este documento debe ser cuidadosamente manipulado por
personal autorizado.

- Esto es... - el rubio estaba perplejo al leer cada nombre en la lista, conocía a casi todos los escritores, a muchos de ellos los admiraba, pero le interesó uno en especial a quien nunca imaginó.

•...
•Simon Headwon
•Chrollo Lucilfer
•Albert Woods
•...

Nuevamente, la curiosidad lo invadió de forma inevitable, revisó el caso particular de aquél escritor en una página que anexaba sus datos de cliente.

- ¿Porqué hago esto? ¿realmente me quedaron dudas? - tomó un respiro mientras leía los datos básicos del susodicho, perdiendo de vez en cuando la vista en la foto de identificación. -Es bastante atractivo. - susurró para luego darse una rápida bofetada - Oh, basta Kurapika, no pienses en eso.

Hasta que un dato específico le llamó la atención.

Número telefónico personal:
+xx xxx xxx xx xx
Sólo recibe llamadas empresariales.

- Un momento. - al verlo, impulsivamente sacó el celular del bolsillo, revisó en la galería sus capturas de pantalla y comparó aquél último mensaje con el número de la lista.

- Es el mismo. - soltó la carpeta regando las hojas por el suelo, impactado con el descubrimiento - El número es real... y... le pertenece a Chrollo Lucilfer.

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