Depredador (Borrador)

38. 𝙳𝚎𝚜𝚌𝚞𝚋𝚛𝚒𝚖𝚒𝚎𝚗𝚝𝚘𝚜 𝚢 𝚖𝚎𝚗𝚝𝚒𝚛𝚊𝚜

𝐹𝑒𝑙𝑎

- Fela al fin lo entiendo, lo siento por tomarme tiempo en entenderte.

¿Estoy siendo comprendida? ¿Hay alguien en este universo que ha llegado a comprenderme y no juzgarme? Siempre he lidiado con personas que jamás han llegado a comprender realmente, como mi abuela, mis muchos psicólogos y Oliver. Ellos se empeñaron en que fuera el típico modelo ejemplar de esta sociedad; puedo decir que eso me estreso y frustró millones de veces. Y, el dilema de todo esto era, cuando me decían: Dime y te puedo ayudar con el problema. Y, las pocas veces que me expresaba había dos tipos de historia; la que jamás lograron a comprender y que confunden absolutamente todo o era solo observándome con pena en absoluto silencio.

Sin embargo, hoy no he dejado de sonreír solo repitiendo mil veces las palabras de Alek en mi mente. El se ha disculpado realmente, y para ser un hombre de la mafia esas palabras es algo que jamás se ve. Me alegro demasiado que él se haya dado de cuenta, que me estaba presionando aunque no era algo que me enojara. Porque finalmente cada prueba de Alek, era algo que quería hacer. Sin embargo, tenía miedo de ser la peor versión al frente de los ojos de mi abuela... bueno creo que aun tengo ese miedo pero un cincuenta por ciento disminuido. Y, es increíble que jamas me di cuenta que me afectaba mucho, estando sumergida en una confusión en mi ser. Naciendo una pregunta en mi ser... ¿Quién quiero ser de verdad? Aunque sienta esas ansias para elegir, pero existe aun ese cincuenta por ciento de temor restante, y se claramente que ese miedo proviene en lo que pueda perder.

Sin embargo, no es algo que quiera pensar mucho estoy segura que el momento que necesite tomar una decisión, no lo haré por Alek, mi abuela o la sociedad. Lo haré por mi y aceptaré cualquier tipo de consecuencia por mí elección pero lo haré feliz.

Quiero seguir feliz como hoy. Y, es extraño sentirme como una mujer casada con Alek, es decir Alek acabo de irse a la habitación y estoy sentada en el sofá tomando mi taza de café mientras que espero el desayuno, antes sin duda iba a escapar por la ventana pero ya no siento esa necesidad. Solo quiero estar rodeada por sus brazos, disfrutar de sus lindos besos por mi mejilla y reposar mi mirada en la suya en silencio mientras acaricia mis mejillas, teniendo esa curiosidad para saber más de él.

- Fela. - escucho la voz de Alek sin embargo la ignoro estando distraída observando el bosque.

- ¡Amiga, tu esposo no me quiere dejar pasar!

!Mierda! Se me ha olvidado comentarle ayer a Alek que Carolina iba a desayunar con nosotros. Desde que llegué a Cuba, Carolina y yo no hemos tenido conversaciones pacíficas entre nosotras dos. Desde el suceso del apartamento, ella no se ha cansado de decir que Alek es un idiota y que deberia huir de el.

Y, la comprendo de una parte, nadie espera que su mejor amiga se case con un mafioso y de paso, que el mafioso casi mate a alguien en su apartamento. Ella piensa que Alek, me está manipulando o maltratando. Sin embargo, ella no tiene ni idea que mis padres pertenecían a la mafia, ella no sabe que ya he visto la oscuridad del mundo en mi infancia, y creo que es momento de que ella sepa todo mi pasado y los motivos por los que aún permanezco al lado de Alek.

Me levantado caminando hacia el pasillo de la entrada, haciendo contacto visual con Alek que se encuentra parado cruzando sus manos en su pecho, su mirada reposa en la de Carolina que se encuentra frunciendo el ceño furiosamente, pero mantiene su silencio. Creo que puede ser miedo hacia Alek, que no debería tener. Alek no le hará ningún tipo de daño.

- Carolina. - dije yo, con una sonrisa en mi rostro dirigiéndome hacia ella, su mirada cambia de dirección hacia mi, ella intenta relajar su frente regalándome una sonrisa forzada. Ignoro sus intentos de lucir feliz. - Te he extrañado. - la abrazo. Carolina recibe mi abrazo ejerciendo la misma fuerza que yo.