𝖨𝗇𝗂𝖼𝗎𝗈 | Kookv [COMPLETA]

𝐂𝐚𝐩 3 𝐦𝐞𝐞𝐭 𝐡𝐢𝐦

𝐉𝐮𝐧𝐠𝐊𝐨𝐨𝐤

Conduzco por las calles de Seúl a toda velocidad, los autos se dispersan a los lados pues todos aquí deben saber quien es el dueño de este vehículo. Todas las propiedades Jeon tienen un sello distintivo a la vista de todos, pobre de aquel que se atreva a atravesarse en mi camino.

Desde que se supo nuestro regreso a Corea no han hecho más que volver a los agentes locos, quieren seguirme la huella pero no pueden, sé como muevo mis fichas y mi identidad será revelada muy pronto, por ahora quedo como la nueva arma de la mafia, la mejor de todas. He sido educado en las cantinas alemanas y rusas, tengo sangre oscura, he matado miles de inútiles personas, quien no le sirve al clan no le sirve al mundo porque el mundo es nuestro.

Me dirijo a la mansión de uno de los clanes que nos pisan los talones para ser el número uno, los Min.
Supe que hace unos días su jefe mayor ha dejado este mundo y eso significa que el heredero del trono está a punto de posicionarse, habrá una ceremonia y no me la voy a perder, el caos es mi estilo y si el niño mimado de Min YoonGi será el nuevo jefe sacarlos del mapa será más que pan comido.

Antes de llegar estacionó en un centro comercial de lujo a un kilómetro menos de la propiedad, no puedo llegar sin un presente, seria descortés de mi parte, nótese el sarcasmo.

Me adentro y todas las miradas caen sobre mi, puedo decir con seguridad que soy alguien intimidante y la gente lo sabe, se apartan cada que doy un paso. Estoy por entrar cuando un inepto choca conmigo.

-¿Qué no sabes caminar?. Me dice con todo molesto. Gracioso.

Reparo en su aspecto y vaya, es un chico apuesto, lleva un pantalón de gabardina color beige y una camisa con escote dejando ver sus clavículas, piel un tanto morena, porta elegancia y con lo que veo buen carácter.

-Ten más cuidado la próxima lindo principito, no quieres cruzarte de nuevo conmigo te lo aseguro.

Lo dejo ahí con la palabra en la boca y sigo mi camino, no necesito escuchar que tiene que decir, aún así ha despertado mi atención pero que más da, para una vez que lo ví y no lo volveré a ver.

He llegado a la mansión Min con mi regalo en mano, claro que un caro reloj siempre tiene una trampa, todo es trampas cuando se trata de nosotros por eso es que somos los mejores en el juego. Me adentro y veo toda la decoración, tonos negros y dorados, nosotros preferimos el rojo, como la sangre.

-  Vaya vaya, que tenemos aquí, el cachorro de los leones ha vuelto al mundo real, a que debemos tu visita Jeon JungKook- dice en un tono burlón.

- Min YoonGi, nada mejor que venir a causarte un dolor de cabeza, un pequeño presente de mi parte- sonrío ladino para él.

- Oh, que bonito, ¡es un gran detalle! Me va encantar servir tu cabeza a mis invitados como plato fuerte- ríe.

- Disfrútalo mientras puedas, que las muertes lentas son las mejores, es por eso que soy el número uno y a ti te queda conformarte con ser el segundo en la lista mi amigo- veo como cambia su cara pero de inmediato vuelve esa sonrisa que detesto.

- Bien, quédate el tiempo que quieras, la diversión aún no comienza y para demostrarte mi cortesía te daré tu entretenimiento- regresa a ver a sus guardias y da órdenes, al paso viene un chico rubio, viste muy sensual y se acerca a Min.

-Me mandaste a llamar mi amor, ¿quién necesita mis servicios?- dice y Min lo acerca para besarle lentamente.

- El es Jeon JungKook mi cielo, esta algo tenso, ya sabes que hacer-

-Claro mi amo-, dice el chico y se acerca a mi llevándome a una de las habitaciones, es un chico muy alegre para todo este infierno, sin duda está más loco que Min.

- Tu nombre bombón- le digo mientras me hace la mejor mamada de mi puta vida, tiene talento.

- Queda anónimo para ti, Jeon JungKook

-Haré que Min hable por ti entonces-. Jadeo por la sensación.

- Perfecto-.