𝖨𝗇𝗂𝖼𝗎𝗈 | Kookv [COMPLETA]

𝐂𝐚𝐩 45 𝐩𝐥𝐞𝐚𝐬𝐞

𝐉𝐮𝐧𝐠𝐊𝐨𝐨𝐤

- No te pregunté si podían, te dije que lo hagas-. Demando.

Dos días y TaeHyung sigue "dormido", dicen que será mejor su recuperación pero a mi que, quiero que despierte y ver sus hermosos ojos, solo eso necesito para bajar todo el estrés y mal humor que ha incrementado estos días en mi.

- JungKook, estás pensando solo en ti, deja que se recupere primero y luego te lo follas-.

- Silencio Min-. Cree que me ha hecho gracia alguna, pues no.

- Jóven, sé que usted manda aquí, pero hasta en la mafia la medicina y la salud debe estar primero, le suplico que respete nuestros protocolos y normas, se lo pido de la manera más respetable posible-. Me hace una pequeña reverencia.

- Largo de aquí, ¡largo de aquí todo el mundo! ¡inútiles!-. Grito y nadie se atreve a rechistar nada.

Quedo solo y me adentro en la habitación de principito. Lo veo ahí conectado y con algunos sueros pinchando su delicada piel canela.

Me acerco y tomo su mano.

- Tienes que recuperarte pronto, ¿entiendes?, no hay más tiempo principito, todo el mundo debe saber quien eres-. Acaricio su mano. - Killer T debe dominar el mundo conmigo, quemarlo y hacerlo miserable como a mi me gusta, y principito debe amarme y quedarse a mi lado mucho tiempo así que despierta ya si-.

Lo miro, detallo cada una de sus facciones, delicadas pero varoniles, cualquiera moriría por él, es un hecho, es demasiado para el mundo, que suerte que yo no soy el mundo.

Acaricio su mejilla, es que hasta inconsciente me vuelve loco, su efecto no se ha ido con el tiempo, se quedó aquí en mi interior, si eso es estar enamorado no me contradigan nunca.

- Cuando despiertes lo primero que haré será presentarte ante el mundo como mío, como el segundo al mando en la mafia, todo será tuyo y te prometo que nadie nos va a separar-.

Si tengo que ser la persona más egoísta que ha pisado el planeta por el lo seré, sería una cualidad más agregada a la lista.

Admito que la obsesión llegó a mi cuando él ni sabía quién era, no es nada sano pero me vale una mierda, el sufrimiento del corazón es mil veces peor que nada y yo a el ya lo dañé, lo mejor de todo es que fue para que se quedara, eso logré, eso hice y lo seguiré haciendo, de otra manera no sé querer, nunca lo sabré. El va a mi ritmo, complementa mi lado tóxico y posesivo.

- Espero que me escuches por que es una de las pocas veces que te lo diré-.

Saco la joya que ya le había dado antes, la coloco en su cuello con cuidado y es espectacular como el rojo del rubí resalta en su cuello.

- No sé cómo llegamos a esto, pero enamorarme de ti probablemente fue la mejor decisión de mi vida principito-. Beso corto sus secos labios y me alejo de ahí.

Salgo de la habitación y verifico que todas mis medidas de seguridad estén donde deben estar, no quiero que nadie lo toque.

Regreso a mi mansión, aún me quedan ciertos asuntos pendientes, por ejemplo Kim NamJoon. Me sorprendió que el sea el jefe de la antigua rival de la mafia Jeon, JaeSook batalló hace tiempo con ellos, los Kim. Los creíamos desaparecidos o muertos cuando no se volvió a saber nada de ellos por años, tenían poder pero siempre por debajo nuestro.

El padre de NamJoon fue quien atacó a mi padre primero por ciertos desacuerdos en aquellos tiempos, se sabe que JaeSook ganó cada una de las disputas formando a nuestra mafia.

Ahora entiendo por qué su querida agencia se concentraba más en los saqueos de mercadería que en atrapar a los delincuentes, nunca tuvo sentido.

Como sea, mi punto más va por lo que le hizo a principito, por culpa de él y el que está ahora tres metros bajo tierra es que no puedo estar besando y haciendo mío a ese precioso ser humano.

Mando a llamar a Yeol quien no tarda nada en llegar a mi despacho.

-Dígame señor-.

- Busca a Kim, de seguro debe estar lamentándose la muerte de SeokJin en algún cementerio de este país así que no será difícil-.

- ¿Y qué le decimos señor?-.

- Nada, seré yo quien deje las cuentas claras, traigan a ese mal nacido ante mí de la manera más brusca que puedan, ¿te quedó claro?-.

- Si señor, avisaré a todos y empezaremos la misión de inmediato-.

- Bien-. Finalizo y se marcha sin más. Va a pagar así como pagan todos.

Hasta eso mando a preparar un arreglo de rosas negras para TaeHyung, lo ideal serían blancas o rojas pero, ¿yo he sido alguna vez acorde a las reglas? Jamás. El negro es nuestro color y tiene que saber de quien son las flores apenas las vea, estas tendrán toques rojizos oscuro y una tarjeta refinada, adicional a eso mando a pedir un regalo especial que quiero que luzca cuando vuelva conmigo.

Decido finalizar el trabajo y paso toda la noche en el hospital con él, no pienso perderlo de vista más. En un tramo de la noche lo visitan conocidos y según amigos de él, no tengo cabeza para sacar a nadie por mucho que me fastidie la presencia de ellos aquí, bueno, seamos sinceros, YoonGi me ha detenido todas esas veces, me encargué de mandarlo a mierda.

- ¡Cómo jodes!-. Le grito.

- Estoy salvando tu pellejo de una decepción cuando TaeHyung despierte y se entere lo que haces con sus amigos-.

- ¡Me vale una mierda!-.

- Eres imposible, ¿sabes que? Haz lo que se te antoje, allá tú-.

- Ajá-. Que patético es, no sé como lo sigo soportando, se volvió un demonio con alas blancas.

Hecho a todos de ahí cuando ya tengo libertad de hacerlo, tuve que amenazar a algunos tercos que no paran de hablar, salieron corriendo.

En fin, paso con mi principito recostandome a su lado en la camilla, lo abrazo fuerte y beso su cabeza con delicadeza. -Despierta-. Susurro suave  -Por favor despierta-. Dejo un beso más y quedo dormido a su lado.