ʙᴀʙʏᴅᴏʟʟ

1.1K 62 22
                                    

≫──────°❅•❀•❅°──────≪

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

≫──────°❅•❀•❅°──────≪



꧁ Omnisciente ꧂


Lilith seguía mirándolo con total admiración. Sentía el brazo del rumano envuelto en su cintura, su agarre era firme y la mantenía cerca suyo en todo momento. Sebastian agradecía infinitamente ser testigo del bello defecto que se encontraba en sus ojos, no podía dejar de verlos.
Su otra mano tomó su nuca y poco a poco acercó el rostro de la chica al suyo para besarla de una vez por todas, deseoso por sentir sus carnosos labios y acariciarlos a su antojo.

Lilith cerró sus bonitos ojos cuando sus labios se rozaron entre sí, necesitaba sentir los labios del rumano que lucían tan apetecibles.

Pero, esta vez... solo se conformarían con ese peligroso roce.

—¡Lilith! ¡¿Te besaste con Sean?!— extrañamente, la voz de la chica Stan que se escuchaba desde arriba, interrumpió la tension entre ambos.

Lilith suspiró pesadamente y abrió sus ojos, encontrándose con la mirada ahora oscura del rumano.

—Hmmm, te besaste con ese niño...— su voz ronca susurró sobre sus labios.

La francesa parpadeó un par de veces, sin saber que decir o como actuar. Sentía que lo había traicionado, ¿Por que...? No lo sabía, pero se moría por descubrirlo.
Stan no quería que las cosas fluyeran de manera fácil, deseaba conocer cada aspecto de ella y cómo lograr complacerla, y ya se estaba dando una idea.

En vez de acercar sus labios a los suyos para besarla, los acercó a su oreja para poder susurrarle sin ser escuchado.

—Puedes seguir viéndote con el, no tengo problema con ello. Pero... pregúntate algo, nena...— Lilith tragó al escuchar como la había llamado. —¿El logra hacerte sentir así? ¿Nerviosa y tensa?—

Lilith volvió a tragar con dificultad. Su corazón latió con rapidez cuando escuchó los ruidosos pasos de Gemma acercándose a ambos.

—Señor Stan...— trató de alejarse para evitar ser vista pero Stan tomó su cintura con firmeza.

—Contéstame.— gruñó.

Lilith no pudo evitar notar las similitudes entre esta situación y el intenso sueño que había tenido con el. Lo peor de ello, lo estaba disfrutando al máximo.

—No...—

—Eso quería escuchar.— Stan asintió con una sonrisa. —Pero no te preocupes, tienes tiempo para decidir, nena.—

𝐎𝐡, 𝐋𝐢𝐥𝐢𝐭𝐡...   ꜱᴇʙᴀꜱᴛɪᴀɴ ꜱᴛᴀɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora