ꜰᴀɴᴛᴀꜱɪᴇꜱ

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꧁ Omnisciente ꧂



Lilith arreglaba sus cabellos ansiosamente mientras se miraba en su espejo. No recuerda la última vez que se sentía así de ansiosa por una simple cita, aunque esta vez no era muy simple que digamos. Estaba por tomar sus cosas para comenzar q maquillarse cuando su teléfono comenzó a sonar, una videollamada.

Miró quien era y solamente pudo suspirar pesadamente. Miró la hora y le quedaban por lo menos veinte minutos, optó por responder para no levantar sospechas.

—Hola, Sean...— saludó sonriente mientras comenzaba a sacar sus cosas.

—¿Vas a salir con alguien?— Sean ignoró su saludo y preguntó genuinamente confundido al verla arreglarse.

Lilith elevó las cejas y lo miró, pudo ver en la pantalla el ceño fruncido del castaño.

—Estoy bien, gracias por preguntar. ¿Y tu?— preguntó intentando disimular su disgusto.

Sean sacudió la cabeza y soltó una risita.

—Lo siento, es que... quería invitarte a salir y se me hizo raro verte arreglándote...—

—Lo siento, pero no podré. Tengo una cita muy importante.— Lilith le sonrió levemente, otra vez mirándose al espejo mientras pintaba sus pestañas.

—¿Y con quien vas a salir?—

Lilith no pudo evitar fruncir el ceño notoriamente, aveces amaba ser totalmente expresiva y nunca tener miedo de decir las cosas como son.

—Sean, ese no es asunto tuyo.— sonrió de costado asintiendo con obviedad.

—Claro que lo es, estamos... en algo ¿No?—

¿Pero que mierda? Lilith se preguntó a si misma con ese gesto de disgusto.

—Sean, aunque fuéramos algo, si tengo una cita, no tengo porque decirte con quien y porque voy a salir, no soy de tu propiedad y...— el timbre de su hogar la interrumpió. —Ya llegó mi cita, me tengo que ir. Adiós.— sonrió sin gracia.

—No, Lilith...— Sean trató de disculparse pero Lilith no lo dejó, colgó la llamada sin más.

Suspiró con pesadez sin entender el extraño comportamiento de Sean. Frunció el ceño mientras se levantaba para abrir la puerta, aún era pronto...

𝐎𝐡, 𝐋𝐢𝐥𝐢𝐭𝐡...   ꜱᴇʙᴀꜱᴛɪᴀɴ ꜱᴛᴀɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora