AMNESIA +V O L V E R T E• A •V E R +

C I N C O.

Christopher Vélez.

Ella siempre había estado rota, créanme que jamás en mi vida había conocido a alguien como ella , tan triste ,tan infeliz....

No pretendía romper su corazón nunca fue mi intención terminar de destruirla , ella era una delicada muñeca de cristal , una que cuide todo lo que pude mientras lo de nosotros duro.

Pero no se puede tener todo en la vida yo no podía tenerla y cumplir mi sueño , ella estaba ahí  dando todo por mi ...

Me dio todo de ella , todo lo que nunca nadie tendrá y yo.

Solo le di una canción que ni siquiera es de amor solo es un recordatorio de que la tuve y que quizá si la vida quería vengarse de mi, iba a volver a verla ..

Quiero volverte a ver a besar y abrazarte para nunca más soltarte .. Ashley Madison Aston.

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—¿No te fue bien?— negó soltando un suspiro.

—Tampoco mal en realidad— levanto los hombros sin verme.

—¿Quieres?— le extendí el cigarrillo de menta que había comprado.

—No fumo— sonrió pero lo tomo de mis manos llevándoselo a la boca.

Le dio una calada y miró hacia fuera de la ventana, hacia frío y me percate de que quizá hiba a llover en un rato más .

—¿Que paso?— pregunte mirando que solo levantaba los hombros y dejaba el cigarro caer en su mano .

—Creo que le da miedo — sonrió levemente.

—¿A tu mamá?— me miró asintiendo.

—A quedarse sola — le dio otra calada al cigarrillo.

—¿Tu crees?— le quite el cigarrillo.

La noche estaba cayendo y no creía que está vez Ash se quedaría conmigo otra vez apenas hace unos días lo había hecho y su mamá la había castigado con no salir ni siquiera a la banqueta.

—Entonces ... No es un mentira — ella me miró extrañada.

—¿Que?...

—Que aún se castigan a las niñas buenas que se portan mal — ella comenzó a reír .

—Si claro versión pirata de Hachel — negó riendo.

—Ya vez , te ves tan bonita riendote Ash — la mire fijamente viendo como ese sonrojo que ya conocía aparecía de nuevo .

—Si , no es mentira — hablo ignorando mi comentario.

—¿Que?.

—Eso, de que aún castigan a las niñas buenas que se portan mal — sonrió levemente.

—Ya — asentí —te encerraran en un calabozo o la puerta con llave — ella me miró con cara de “si sigues diciendo estupideces te daré con lo primero que vea ”.