Experimento 12-Z

XXXII

Piscis; 5 de mayo, 9am

Bien. Debo aprender a cocinar, estas tostadas están quemadas y saben asquerosas.

Géminis aparece por un lado de la mesa con su taza en la mano. La apoya en la mesa, pero la golpeó y se rompió, dejando que el café empiece a desparramarse por la mesa.

Levanté mi celular y mi intento de desayuno para salvarlos.

- Ey, ¿No te gustaría ser más cuidadosa? Podrías haber roto mi celular - digo y me traslado a otra silla con mis cosas.

- Gracias por preocuparte por si no me lastimé con la taza rota - dice y empieza a recoger los trozos de taza.

- Lo siento, pero no puedes ser tan bruta con las cosas de la casa, si estás cansada podemos hablarlo. No es necesario romper una taza.

- Simplemente usé fuerza de más. No estoy cansada o algo por el estilo. Estoy perfecta - dice y busca algo para limpiar el café de la mesa - Y en el caso contrario, dudo que fueras a quien le pediría ayuda para calmarme.

Eso me extrañó un poco - ¿Por qué?

Escuché como suspiró por detrás y volvió con un paño en la mano y limpiar su desastre.

Esperé un poco más, pero nada salió de su boca. Estaba evadiendo mi pregunta.

- ¿Por qué no confías en mí?

- Mira, Piscis. Hoy no tengo paciencia para preguntas, menos para darles una respuesta, estoy exhausta.

... ¿Qué? Acabas de decir que estabas perfecta y ahora exhausta

- Yo creí que estabas perfecta - digo y le doy un sorbo a mi café, poniendo los ojos en blanco y vuelvo a dejar la taza en la mesa.

- ¿Quieres saber porqué no confío en tí? ¿Porqué no quiero tu ayuda?

- Claro que quiero - digo y me trueno los dedos.

- Porque eres como un niño, tú no sabes de los problemas reales, estás siempre en otro mundo de fantasía muy alejado del real y por cualquier cosa lloras

Quedé un segundo analizando sus palabras.

Y es que tiene bastante razón.

Auch. Eso dolió

- Eso es mentira - dije de inmediato y mi voz me delató.

Oh, aquí viene el llanto

- ¿Estás bromeando? Te digo una cosa más y te rompes en mil, Piscis, no aguantas la realidad en la que vivimos, lloras por ella y por eso te alejas. Ahora vas a ponerte a llorar porque acabo de decirte la verdad, y sabes que tengo la razón. No es necesario meterme a tu mente para notarlo.

- Cierra la boca - la corté y tomé aire - Tú eres la que realmente no sabe nada.

Se llevó la mano al pecho y tomó aire - ¿Yo? ¿Disculpa?

- Si, tú. Siempre ves todo lo negativo, y últimamente has estado más agresiva de lo normal, creo que te está durando mucho el efecto del último experimento. Ya todos estamos en la normalidad, eres la única que sigue mal.

No llores, no llores, no llores, no llores

- ¿Que más vas a decirme? ¿Que soy una mala persona? Sería lo último.

- Un poco si. Tratas mal a todos, Géminis. Algo anda mal en tí luego del último experimento.

- ¿Mala persona yo? ¿Bromeas, Piscis? La única mala persona de la casa aquí es Escorpio.