Pov Calle:
Jadeante me separé de ella, la observé por segundos dejando mi vista clavada en sus ojos, el negro azabache aún seguía allí, ocultando cualquier rastro de ese verde oliva que me transportaba a aquel sueño.
Apoyé mi cabeza en su pecho sientiendo como su corazón aún latía galopante debido al reciente orgasmo, el mío en cambio lo hacía por ella.
Dejé escapar un suspiro intentado sacar cualquier pensamiento, cualquier anhelo, cualquier sueño en el que ella y yo acabásemos juntas, siempre había escuchado decir a la gente que la vida es muy injusta, hoy lo comprendí.
Tenía al que consideraba al amor de mi vida debajo mía, sus labios estaban hinchados por la acción de los míos, su cuerpo aún temblaba por culpa de mi lengua, pero el destino era injusto, tanto que aún teniéndola a milímetros de mí, la sentía tan lejos.
Fueron sus ligeros movimientos los que provocaron que mis pensamientos se disiparan sintiendo la tensión de su cuerpo.
P- Calle... -susurró- es mejor que...
C- Ohh sí perdón- hablé sin dejar que acabase la frase.
Me levanté en un ágil movimiento sintiendo mis mejillas enrojecer.
Había caído en una realidad gélida donde a ella solo le importa yo cuando de sexo se trataba. Era incapaz de dejar de maldecir el momento en el que se me ocurrió proponer ese estúpido plan.
Carajos yo la amaba.
Sin decir nada agarré mi ropa vistiéndome con una agilidad casi sorprendente, fueron segundos los que tarde en desaparecer de la vista de Poché, necesitaba huir de allí, necesitaba pensar o mejor, necesitaba dejar de pensarla, necesitaba dejar de amarla, extrañarla, sentirla, desearla.
C- Joder, puto amor- grité desesperaba mientras buscaba algún bar de copa donde poder desquitar mi enojo conmigo misma.
C- Un whisky doble por favor- ordené a aquel muchacho que asintió sonriendo.
B- Aquí tienes precisa- habló dejando aquel vaso frente a mí.
Con rapidez lo tomé dejando que aquel líquido quemara mi garganta.
Perdí la cuenta de cuántos fueron, solo podía sentir la música retumbando en mi cabeza, mi cuerpo desinhibido y el efecto del alcohol recorriendo todo mi sistema.
C- Podme otro- grité alzando mi mano.
B- Creo que ya fueron suficientes, ven conmigo mi turno acaba de terminar- dijo saliendo de la barra y tomando mi cintura.
C- No, yo solo...me iré a casa- murmuré.
B- Vamos preciosa, pasaremos un buen rato- susurró en mi oído.
Intenté alejarme, pero su agarre en mi cintura se afianzó.
B- Te vendrás conmigo- ordenó en un tono severo.
X- Ella ha dicho que no- ese tono de voz...yo, yo conocía ese tono de voz.
B- Y tú quién se supone que eres?- preguntó el bartender.
X- La persona que te pateará la cara si no la sueltas- habló confiada.
El muchacho solo rio amargamente alejándose de mí.
B- Has tenido suerte pequeña- murmuró antes de desaparecer de mi vista.
X- Estás bien?- susurró tomando mi rostro, observándolo con preocupación.
Asentí lentamente, allí estaba de nuevo ese verde oliva que había tratado de olvidar durante toda la tarde. No sé si fue el efecto del alcohol, la cantidad de sentimientos que me había guardado, o la impotencia de no poder decirle que le amaba lo que provocó mi llanto, solo sé que me aferré a ella como si mi vida dependiese de su contacto, aunque muy en el fondo eso era verdad.
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Holaa❤️❤️ cómo andan??
Espero que os guste el capítulo ☺️☺️
En mi Instagram podéis encontrar la historia, donde la subo antes!!
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❤️ GRACIAS ❤️
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Impregnada de tí (caché)
Fanfiction¿Cómo se ordena un corazón desorganizado por el amor? ¿Cómo se escapa del miedo? Daniela encontró su lugar seguro en unos ojos verdosos, los de su profesora. Pero esa mirada esconde algo más que seguridad...el miedo al amor reina bajo la oscuri...
