Luz (Luce) Trilogia My Land

Capítulo 25

El auto estaba algo aislado en el estacionamiento. Inmediatamente pienso en la escena del asesinato del publicista, en un escenario inquietantemente similar al que tengo ante mí. Un segundo después, escucho un ruido proveniente del mismo estacionamiento.

- Para - le digo a Cleo. Me quedo quieta, tensa como una cuerda de violín.

Veo mejor, pero no veo nada. Cleo también está aterrorizada. Siento su miedo en mi piel. Necesitamos vencer el pánico. No podemos ceder así. Eso es exactamente lo que Él pretende.

Cuando doy el primer paso hacia el coche, veo una sombra que sale de detrás de un cubo de basura. Salto hacia atrás. Lina se despierta y levanta la cabeza de mi hombro.

Es solo un gato de pelo oscuro.

- Está bien, hermanita. Sigue durmiendo y estaremos en casa pronto.

Sonrío con Cleo ante mi estupidez. Tengo que mantener la calma, pienso para mí misma. La sangre fría es fundamental en estas ocasiones. Y así, finalmente llegamos al coche.

Está estacionado justo debajo de una gran linterna que ilumina el área como si fuera de día. Si había alguien, se podía ver desde lejos. Después de poner a Lina en el asiento trasero, me doy cuenta de que hay un volante publicitario pegado al limpiaparabrisas. Instintivamente, lo alcanzo y, a medida que me acerco, veo algo escrito en el capó. Arañaron la pintura metalizada del auto, probablemente con una llave.

"DE NADA SIRVE ESCAPAR".

La frase está escrita en letras de imprenta y ocupa todo el ancho del capó.

- ¡Ay mi Dios! - exclama Cleo. - ¿Crees que fue él? ¿Mi hermano?

- Eso creo. Significa que está detrás de nosotras y sabe dónde estamos.

- Podría estar espiándonos ahora.

- Será mejor salir de aquí lo antes posible.

- Deberías echarle un vistazo a ese folleto, Alma - dice, pasandome el papel.

Sobre el rostro sonriente de una mujer que ofrece un lavado de autos con los más variados servicios y grandes descuentos, hay una dirección escrita con marcador negro: "Esta noche a las 00:00. No te lo pierdas".

- No podemos ir, Alma.

- No creo que tengamos otra opción.

- ¿Qué puede pasar si no vamos?

- Nos puede hacer mucho daño, Cleo, créeme. Esto no es una invitación, es una orden.

- Podría ser una trampa.

- No necesita una trampa para atraparnos y matarnos. Si quiere, nos mata y ya está. El motivo de este folleto es diferente.

- ¿Cual?

- Lo averiguaremos más tarde. Ahora tenemos que dejar a Lina en casa. Jenna puede volver en cualquier momento.

Estoy muerta de miedo, tal vez incluso más que ella, porque sé muy bien lo que está en juego y los riesgos que conlleva. Pero necesito ser fuerte, por las dos y también por mi hermana pequeña que duerme inocentemente en el asiento trasero.

Cleo no habla mucho en el camino. Unos pocos monosílabos es todo lo que obtengo en respuesta a mis preguntas. Saber la verdad fue un duro golpe para ella. Aunque también he pasado por esto, ayudar es difícil porque cada uno reacciona a su manera ante las dificultades.

- Trataste de matarme cuando nos conocimos esa famosa noche hace una semana - le digo en un momento. - Pero al final, nos hicimos amigas. No todo es tan malo, ¿ves?