Luz (Luce) Trilogia My Land

Capítulo 52

- ¿Alma? ¿Alma? - Oigo una voz que me llama. Tan pronto como abro los ojos, veo al profesor K inclinado sobre mí. Sus gafas de sol me sorprenden al principio. Entonces finalmente entiendo que estoy de vuelta en el mundo real.

- Profesor... ¿Sigo viva?

- Estás bien, estuvo bien, al menos de nuestro lado.

- ¿Que quieres decir?

- Vi que estabas muy agitada en los últimos segundos.

- ¿Te quedaste aquí conmigo todo el tiempo? - Pregunto, tratando de organizar mis pensamientos. Todo gira a mi alrededor a una velocidad vertiginosa.

- Estaba esperando a que te despertaras. ¿Cómo estuvo ahí abajo?

- Horrible. - Esto es todo lo que puedo decir.

Trato de levantarme. Mis piernas tiemblan, como cuando estaban hechas de agua.

- Me siento tan rara. ¿Cuánto tiempo me quedé en My Land?

- Unos diez minutos.

- ¿Sólo eso? Parece una eternidad. Allí el tiempo no tiene medida. Todo está inmóvil, excepto cuando las almas se agitan y toman forma... Y estaba la horrible agitación de las Almas-Guardias... Es una pesadilla.

Mientras me ayuda a salir de la Cámara, me pide noticias de Morgan.

- Hablé con él. Estaba muy seguro de sí mismo, del progreso que él y Ariel están haciendo, junto con las demás almas rebeldes.

- ¿Así que Ariel está libre?

- Sí, pero lamentablemente Raúl y Christian no.

- ¿Llegaste a verlos a ambos?

- No, pero escuché que están atrapados en un lugar llamado...

- Meandro Eterno.

- ¿Lo sabías?

- Lamentablemente sí. Escuché que es un lugar donde es casi imposible sobrevivir, donde el alma se enfrenta a sus miedos más profundos e indescriptibles. Para siempre.

- ¡Qué horror! ¡Tenemos que ayudarlos!

- Estoy seguro de que Ariel y Morgan están haciendo todo lo posible. No tuviste contacto con Leviatán, ¿verdad?

- Afortunadamente, no.

- No fue por suerte. Todo lo que sucede en My Land es Su decisión.

- Pero Ariel me dijo que Él no es ni omnipotente ni omnipresente.

- Es cierto, pero es muy difícil que no sientas la presencia de almas nuevas. Seguro que te escuchó.

- Me estás asustando.

- No era mi intención. Solo quiero que seas consciente. ¿Están llegando muchas almas al Atrio?

- Sí, Morgan y los demás se esfuerzan por ayudarlos a escapar antes de que sea demasiado tarde, antes de que caigan en el Abismo del Abandono. Es un mundo lleno de sufrimiento.

- Demasiado. Pero nuestro mundo tampoco es una broma.

- ¿Pasó algo mientras no estaba?

- Fuimos atacados por Rio y su pandilla.

- ¡Oh no! ¿Y cuáles fueron las consecuencias? - pregunto, llegando a los escalones de la piscina. No veo a nadie en el borde.

- Cassandra... te defendió valientemente, pero al correr tras un Nonato, cayó en un pozo que nadie había visto. Probablemente sea el pozo que alimenta la piscina. ¡Estaba tan escondido! - No puedo evitar sentirme culpable.