LOS LECROUX

CAPÍTULO 50

—¿Disculpa?—¿quien es esta idiota?

—Puede ser un poco humillante y agresivo, pero por favor lo mejor sería que dejaras a mis chicos en paz—su voz me irritaba, sentía como la mano me picaba con ganas de acabar en su cara cada vez que abría su boca.

—No se quién eres y tampoco me interesa, pero es tarde y no tengo las ganas para hablar contigo sobre mis novios-dije remarcando las últimas palabras y una mueca disimulada con una sonrisa surco su rostro—Asi que ya puedes ir marchándote por donde has venido y no vuelvas a venir a mi casa como una arrastrada detrás de mis novios, ¿he sido lo suficientemente clara?—y cerré la puerta en su cara, el buen humor que tenía se acaba de ir por la puerta, es que ni un día de pareja y ya tengo una ex escocida en la puerta.

En mi habitación me pegue al cristal y le mandé un mensaje a Aaron pero como es un perezoso y no me contestó le escribí a Axel necesitaba una explicación urgente, si no ya pueden ir despidiéndose de sus hombrías.

Simio tonto—pasaron dos minutos cuando leyó mi mensaje.

¿Ya me echas de menos?, si quieres puedo ir un rato y jugamos con el regalo que te di—me reí con sus palabras, el regaló si usaría un poco más tarde.

Te voy a hacer una pregunta y quiero que me respondas con la verdad—algo dentro de mí se sintió nerviosa—¿Quien es Amanda?

Segundos y minutos pasaron y el no me contestó.

¿Por qué quieres saberlo?

No me respondas con otra pregunta—no desconfiaba de ellos pero tampoco soy ingenua para quedarme con la duda—Te lo pregunto por que acaba de venir a mi casa diciéndome que deje a sus novios en paz y como comprenderás no estoy muy contenta

Paso mucho antes que tú y es un tema delicado que tenemos que hablar todos juntos, te queremos Blair—escuche la voz de Egan y Liam en el fondo discutiendo.

¿Están bien?—me acomodé en la cama y mi voz salió preocupada

Si bueno no eres la única que no está contenta con la llegada de esa arpía, no te preocupes te lo explicaremos—sonaba cansado—Buenas noches pequeña.

Buenas noches mis simios

Escuche como mis padres entraban por la puerta y apagué el teléfono cayendo dormida.

Narra Egan

—Se suponía que estaba que aún estaba en rehabilitación—furia es lo que sentía y encima tiene la cara de presentarse en la casa de nuestra pequeña—Esa maldita loca debería estar entre rejas o en el puto manicomio.

—Ya vale Egan no puedes hablar así, sigue siendo una persona con problemas—Aarón sonaba enfadado.

—No la defiendas—me coloqué enfrente de él con los puños apretados—Sabes que tengo razón en lo que he dicho.

—No la defiendo pero no tenemos por que tratarla así—se apartó de mi de un empujón—Vamos Egan no me jodas todos en esta puta habitación hemos caído por esa mujer.

El cabron tenía razón y esa me enfadaba más, pero que ganaba volviendo no tenía sentido.

—Caímos, pasado yo ya tengo a la persona por la que me he tirado al acantilado sin pensar y si tu aún sigues de lame culos te pido que dejes a Blair tranquila porque como llore por tu culpa me olvidare que eres mi amigo y hermano—Axel llegaría a niveles extremos por ella y no dudaría en ayudarle.

—Yo quiero a Blair y no la voy a dejar.

—Es una advertencia hermano, no lo olvides—se levantó y se fue a la habitación cada uno nos fuimos a nuestro cuarto pensando en lo ocurrido.