Narra Blair
Note como Egan salía de la habitación dejándome sola, todo estaba tranquilo hasta que escuché la voz de Axel enfurecida, me levanté buscando mi sujetador la verdad no quería que se me fueran marcando los pezones y dejándolos a la vista de todos, me volví a colocar la camiseta de Egan y rebusque por uno de sus cajones unos boxers agarre unos y baje a donde provenían las voces.
—Amanda por favor ten un poco de dignidad y no vengas ahora de arrastrada—la voz de Axel sonaba venenosa y fría hacía la mujer que se presento en el portal de mi casa que ahora tiene nombre Amanda, joder su nombre de por sí no me gusta—Axel por favor escúchame, ahora estoy bien el medico me ha dado el alta, estoy perfectamente—¿que me he perdido?
—Si perfectamente debía estar la gran cantidad de dinero—el sarcasmo de las palabras de Liam me hizo reír en mis adentros me quedé escondida escuchando todo.
—Aaron diles algo, tú me entiendes mi amor siempre lo has hecho—ella se acercó a su cuerpo peligrosamente, mis sonaron en mi cabeza, una vez que se encontraba enfrente de él colocó sus manos en ambas de sus mejillas—Estoy bien—un sentimiento de preocupación de instaló en mi pecho, el no la apartaba sino que se quedó mirándola sin hacer nada.
—Alejate de él Amanda, no te lo volveré a repetir—Axel tomó su brazo y la alejó de Aarón—Vete y no vuelvas no eres nadie para nosotros—ella le miró furiosa y se fue dando un portazo—Aarón—se acercó poniendo su dedo en su pecho— Solo te lo diré una vez lastimas a Blair por tus gilipolleces y te prometo que no volverás a respirar su mismo aire y va por vosotros también—salio de la sala hacia donde me encontraba, corrí hasta la puerta y me giré tranquilizado mi respiración.
—Hola hermosura—sonreí por sus palabras y me envolvió en un fuerte abrazo, su corazón estaba acelerado—¿Puedo hablar contigo un momento?
—Claro—tomo mi mano entrando en su habitación. Se sentó en la cama dejándome a horcajadas sobre él.—¿De qué, quieres hablar?
—Bueno quiero aclarar todo mi tema sobre Amanda, es algo complicado pero voy a intentar ser lo más claro posible—sus manos se ceñieron a mi cintura y fue trazando círculos en mi piel.
—Hace unos cuatro años vino Amanda por primera vez a Phoenix, Aarón y yo teníamos quince y bueno Egan, Liam y Damien diecisiete, ella nos trataba bien empecé a sentir demasiadas cosas por ella, así mismo mis hermanos por ese entonces aún no teníamos muy claro si queríamos seguir como nuestros familiares en una relación poliamorosa—rasco su nuca con nerviosismo—Bueno acordamos intentarlo los primeros meses fue bien mi situación estaba controlada no había vuelto a tener un ataque, pero ella empezó a como decir,....se volvió extraña era como si no fuera ella—asentí tomando sus mejillas.
—Todo fue peor cuando le presentamos a nuestra abuela, ella es una persona estricta y fría, no suele ser cariñosa, Amanda ahg, ella se pasó el día siguiente diciendo que nuestra abuela era mala, que no la trataba con respeto y mierdas así—cerro sus ojos con fuerza y sacó sus mando de mi cintura se levantó dejándome en la cama.
—Ella solo sabe hacer una cosa, jugar con los demás y destruir sus putos sentimientos, le quise no te lo negare—me miró a los ojos con sinceridad— Pero comenzó a mentirnos o ocultarnos cosas, nos trataba mal sus comentarios cargados de veneno eran un incentivo de mi ira, el amor se convirtió en rencor hasta llegar al odio, los demás se distanciaron de mi por solo decir la verdad de las acciones de Amanda. Ese año fue el peor de mi vida, los ataques se volvieron demasiado consecutivos hasta llegar de un punto de atacar o herir a mi propia familia, no era un tema físico si no psíquico, mi abuela, mi madre y Logan eran los únicos que me entendían y no me hacían sentir tan..inútil—suspiro y se sentó en el suelo y se abrazo a mis piernas—Un día, llegó a la puerta de nuestra casa estaba solo, ella lloraba bajé y la vi su ropa estaba hecha trizas, al rato llegaron todos. Me culparon de hacerla llorar y de pronto de comenzó a reír, Aarón como un perro faldero se pegó a ella.

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LOS LECROUX
Teen Fiction{Duología Eternel} Primera parte: Una noticia que te toma por sorpresa, una mudanza, nuevas amistades, rencuentros y nuevas experiencias. Cuando mi madre me conto que nos íbamos a mudar otra vez a otro lugar diferente a los que estaba acostumbrada...