-¿Com quien hablas? -dijo Gladys entrando al cuarto de Betty-
-Con Riff. Me está ayudando con mi tarea de arte.
-¿Por qué no le pides ayuda a Jughead?
-A ver -suspiró- quiero estar con Jughead y me dices que no, pero cuando no estoy con él quieres que esté.
-No, solo me pareció raro.
-Juggie está enfermo y tiene que descansar, y Riff es más grande y sabe más.
-Claro, no le digas eso, Jughead es muy inseguro ¿sí?
Ella asintió.
-Mamá...Jughead no está comiendo.
Gladys suspiró.
-Lo sé. No se que hacer para que lo haga.
-Yo tampoco. Y me preocupa.
-Tu tranquila ¿sí? yo lo soluciono.
Betty asintió y volvio a mirar su celular.
Horas despues, al terminar de cenar, Jughead fue a la habitación de la rubia.
-Amorcito -dijo abrazando su almohada- ¿puedo dormir contigo?
-Claro que sí, ven.
Él la abrazó, recostó su cabeza en su pecho y cerró los ojos.
-Eres bebé.
-No, tu eres bebé -respondió el mayor-
-Tú -dijo con un puchero-
Él sonrió.
-Te amo, mi bebé.
-Yo a tí, pequeñita.
A la mañana siguiente, Betty despertó, y apagó la alarma para abrazar a Jughead y dejar un beso en au mejilla.
-Mio.
Él despertó y la miró con los ojos cansados.
-¿Qué hora es?
-Las seis treinta.
-Creo que iré a entrenar -dijo sentándose en la cama-
-No -dijo abrazándolo con fuerza-
-Ya me siento bien.
-Mamá dijo que debes quedarte en reposo por dos o tres días.
-Pero esos son muchos días.
-Ya lo sé, Juggie. Pero si no te quedas, luego serán más.
Él se acostó y la abrazó.
-¿No te gusta quedarte y que te haga mimitos?
-Sí -dijo asintiendo con la cabeza mientras se acomodaba en el pecho de la rubia debajo de las sabanas-
-Aún podemos dormir un rato más.
-¿No puedes pedirle a Riff que venga por tí y te quedas más tiempo conmigo?
-No, mamá me mataría si me ve en una motocicleta -dijo cerrando los ojos- descansa, Juggie.
Él cerró los ojos y pareció pasar un instante hasta que Gladys entró a la habitación.
-Betts, arriba, se hará tarde.
-Mamá, Juggie tiene fiebre -dijo despertando- y esta todo pálido ¿se va a morir?
Su madre rió y besó su frente.
-No, cariñito, no se va a morir, ve a desayunar, tus cereales estan en la mesa.
Ella bajo las escaleras y Gladys acarició la mejilla de Jughead.
Le quitó las mantas y suspiró para dejar su cartera blanca y acostarse a su lado.
-Mami -dijo con la voz ronca y cansada- no te vayas.
-No me iré, mi amor, me quedaré contigo.
-Tengo frío.
-No puedes taparte, cariño, te hará peor.
-Solo un poquito.
-Bien, solo un poquito.
Él la abrazó y ella besó su frente.
-¿Cómo te sientes, amor?
-Mal. Me duele todo.
-Lo se,tranquilo, ya va a pasar.
-Me duele respirar ¿Eso es normal?
Ella frunció el ceño confundida.
-Cariño... ¿a que te refieres con que te cuesta respirar?
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Little Betts
RomanceBetty se escapó de su casa a los doce años debido a su padre abusivo, y desde entonces, vive en una habitación de hotel con el dinero de su tía y su madre, quienes viven al otro lado del país. En ningun momento pensó que todo eso estaba a punto de c...