Reggie y Riff rstaban sentados frente a frente en el gimnasio, en una esquina. Sin hablar.
-¿Vas a decir algo? -dijo el menor- tú me trajiste.
-Deja que piense como explicarlo.
Él suspiró y Riff rodó los ojos.
-Eres muy impaciente.
-Tu muy lento.
-No quería dejar de hablarte.
Reggie asintió.
-¿Y por qué lo hiciste?
-Creí que era lo mejor para todos.
-Condescendiente, como siempre -dijo y tomó su mano- no me dejes solo, Riff. Yo se que tu no quieres estar conmigo, pero te quiero. Y eres una de las únicas personas con las que me siento yo mismo.
Riff lo acercó tomando su chaqueta azul y amarilla, y besó sus labios.
-Quiero intentar.
-¿En serio?
-Sí. Solo si eso está bien contigo, aún mi familia no sabe que soy gay y las serpientes-
Sus labios se sellaron cuando los de Reggie se juntaron con los suyos, y al separarse, el mayor sonrió y lo abrazó.
- Lo siento. No volveré a dejarte, haré las cosas bien, lo prometo.
- Se que no lo harás.
En otro lado, dentro de un salón vacío, Betty y Jughead se besaban lujuriosamente mientras ella se sentaba a horcajadas encima suyo, y él ponía sus manos debajo de la falda blanca.
-Te amo -dijo Jughead-
-Yo a tí.
Él sonrió y se paró, Betty envolvió sus piernas en el torso del ojiazul y él pegó la espalda de la rubia contra una pared, besando su cuello.
-Eres mía -dijo y comenzó a marcar la parte de su cuello que la camiseta celeste que llevaba puesta cubría-
-Dios -jadeó- no me hagas esto. Estamos en la escuela y tengo clase en diez minutos.
-Maldita clase estúpida -dijo él y besó sus labios- quiero hacer esto todo el día.
Jughead volvió a su cuello y ella rió.
-Terminaría roja, y tu le explicas eso a mi mamá.
Él besó su frente y la dejó en una mesa.
-Almorzaré con mis amigos, pero si necesitas algo me dices ¿sí?
-Sí.
-¿Trajiste tu fruta?
-Sí.
-¿Hiciste tu tarea?
-Sí, mamá.
- Bien -rió- ve, te veo luego.
Ella se fue y al salir, se chocó con alguien.
- Lo siento. -dijo y suspiró al ver un chico con una chaqueta de cuero y un tatuaje de serpiente en su muñeca-
-Tranquila, no te...ví. Es raro que no te haya visto, eres hermosa.
-Tiene novio, Pea -dijo Riff tomándolo de la muñeca para alejarlo- lo siento, pequeña, sigue caminando.
- Te iba a buscar a tí.
Él se acercó mientras su amigo se alejaba.
-¿Cómo te fue con Reggie?
Riff sonrió mirando al suelo y Betty chilló de la emoción dando pequeños saltitos.
-¡Son novios!
-Shhh -dijo tapando su boca- no grites. No somos novios, estamos saliendo. Ni siquiera se si le gusto.
- Le encantas.
-¿Tú crees?
-¡Sí!
-Él me encanta -dijo con una boba sonrisa- Es tan lindo, y tierno, y me hace sentir muy bien.
Betty sonrió y lo abrazó.
-Jamás te ví así, eres adorable.
-No le digas a nadie. En especial a Katy.
-¿Por qué no a Katy?
-Me gusta la imagen que tiene de mi -dijo comenzando a caminar- de su amigo mayor y fuerte que la protege como si fuera su hermano. No quiero que eso cambie.
-No va a cambiar. ¿Por que no le dices a Reggie que almuerce con nosotros hoy?
-Todos nos van a ver.
-Riff -dijo amenazante- se que es difícil para tí. Pero si lo mantienes en secreto, terminara como terminó antes. Y no quieres eso.
Él suspiró.
-Bien, le diré, pero no creo que acepte.
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Little Betts
RomanceBetty se escapó de su casa a los doce años debido a su padre abusivo, y desde entonces, vive en una habitación de hotel con el dinero de su tía y su madre, quienes viven al otro lado del país. En ningun momento pensó que todo eso estaba a punto de c...